Caso Pujol

Oleguer Pujol, al juez : «Sé que mi padre no tenía fondos en Andorra»

El fiscal le reprochó «el dinero que de manera corrupta ha obtenido Jordi Pujol Soley»

Oleguer Pujol, al juez : «Sé que mi padre no tenía fondos en Andorra»
Oleguer Pujol, al juez : «Sé que mi padre no tenía fondos en Andorra»larazon

El fiscal le reprochó «el dinero que de manera corrupta ha obtenido Jordi Pujol Soley»

Oleguer Pujol aseguró el pasado día 12 al juez de la Audiencia Nacional José de la Mata que su padre, el ex presidente de la Generalitat de Cataluña Jordi Pujol, «no ha tenido cuenta en BPA», la entidad bancaria andorrana donde el resto de la familia Pujol Ferrusola ocultó los fondos que, según defienden sin aportar documentación alguna, provienen de una herencia del abuelo paterno. El magistrado preguntó expresamente al benjamín del ex president si conocía si su padre tenía fondos en Andorra. «Sé que no los tenía», contestó según consta en la grabación de esa comparecencia, notificada ayer a las partes personadas en el procedimiento.

Durante ese largo interrogatorio que concluyó con la petición de Anticorrupción del ingreso en prisión de Oleguer Pujol, que De la Mata finalmente no acordó, el fiscal José Grinda no se anduvo por las ramas al justificar su pretensión de prisión provisional sin fianza. El representante de Anticorrupción reprochó al hijo del ex presidente de la Generalitat que su inversión en la operación de compraventa de 1.152 oficinas del Banco Santander en 2007 –en el que varios comisionistas se repartieron 11,5 millones en comisiones– procediese «de la cuenta de Andbank, del dinero que de manera corrupta, siempre hablando en fase de instrucción, ha obtenido su padre Jordi Pujol Soley».

Oleguer Pujol afirmó también desconocer que su madre, Marta Ferrusola, tuviese cuentas en Andorra. «No lo sabía –aseguró–, pero a raíz de la causa y de, obviamente, la publicación en “El Mundo”, constaté que mi madre había tenido cuenta en Andbank, en BPA y que en 2014 presentó una complementaria». Él regularizó parte de sus ingresos opacos en noviembre de 2012, pero no esa cuenta en Andbank, «porque mis hermanos no tienen intención de regularizar el legado y yo decido no hacerlo, porque les habría dejado en evidencia».

El fiscal Anticorrupción, no obstante, le acusó al intentar justificar su ingreso en prisión, de actuar con opacidad y de declarar esa cuenta finalmente en 2014 «porque no tiene más remedio, porque se está involucrando a quien es el origen de todos los fondos: el señor Jordi Pujol Soley, la única razón por la que oculta toda la familia el dinero que tiene en Andorra».

Porque el benjamín de los Pujol Ferrusola perseveró ante el juez en la versión de su padre sobre el legado del abuelo Florenci. En su declaración afirmó que abrió su cuenta en Andbank en 1992, «cuando me dijo mi hermano que debía tener mi cuenta para ingresarme el legado de mi abuelo», una herencia que cifró en «125 millones de pesetas». El legado, según él, «estaba en láminas, en productos de inversión, en Andorra supongo» y lo gestionaba su hermano mayor, Jordi. En 1990, cuando su hermano se hace cargo de la gestión de esa supuesta herencia, «yo tengo 18 años y la verdad es que no me entero mucho de eso», pretextó. En 1992, continuó, «le decimos que quizá debe ir distribuyendo ese legado para reinvertirlo».

«Básicamente era deuda soberana opaca fiscalmente, bonos del Estado. España misma lo hacía hasta 2009. Esto ha existido hasta hace cuatro días», aseguró. «Sí. El delito fiscal también existe», le replicó Grinda entonces, antes de recordarle que de 1992 a 1999 en sus cuentas figuran transferencias por valor de 34,6 millones de pesetas. Correspondientes, según Oleguer Pujol, a los rendimientos de los que su hermano Jordi les iba dando cuenta a medida que «vencen los productos financieros».

De la Mata intentó por tres veces sin éxito que el menor de los Pujol le desvelase en qué banco estaban esos bonos y las láminas financieras. «No lo sé, señoría. Las láminas las tenía en otro banco», respondió Oleguer Pujol. Ante la insistencia del magistrado, se cerró en banda. «Si no conozco el banco, menos voy a conocer al gestor. Mi hermano tenía las láminas, iba a la ventanilla, cobraba y luego repartía el dinero». Para el fiscal, sin embargo, «no es creíble que haya láminas, no es creíble que haya bonos, no es creíble que haya nada».

Oleguer Pujol se desvinculó de esa cuenta en Andbank y dijo que su actividad era de «pasividad absoluta». «Yo a Andorra subía una vez al año y era el banco el que me hacía las propuestas. La tenía para cobrar el legado de mi abuelo –insistió por enésima vez– y tener ese dinero ahí como una reserva. No disponía de ese dinero. No lo utilicé para vivir».