Irene Montero

Podemos presiona al PSOE

Advierte a los socialistas de que ahora vigilará «día a día» los acuerdos de gobierno, pero confirma que seguirán vigentes

El secretario general de Podemos en Valencia, Antonio Montiel, reunió ayer a su equipo para valorar el pacto
El secretario general de Podemos en Valencia, Antonio Montiel, reunió ayer a su equipo para valorar el pactolarazon

Advierte a los socialistas de que ahora vigilará «día a día» los acuerdos de gobierno, pero confirma que seguirán vigentes

La sangre no ha llegado al río todavía. La ruptura entre Podemos y el Partido Socialista no va a materializarse. Aunque desde el núcleo duro de la formación amenazan desde el domingo con romper con los pactos que actualmente mantienen en varias comunidades autónomas, lo cierto es que, como ya adelantó ayer LA RAZÓN, los pactos se mantienen. Sin embargo, para que Podemos siga apoyando al PSOE, necesitarán ver compromisos y un cambio de actitud.

La decisión que tomó el domingo el Comité Federal socialista de abstenerse en la próxima investidura del candidato popular, Mariano Rajoy, fue recibida como un jarro de agua fría en el partido morado, que ya llevaba anunciando varios días que la relación entre ambos partidos podría resquebrajarse si decidían facilitar un nuevo gobierno del Partido Popular.

El foco de las relaciones se centra en las tres comunidades autónomas donde Podemos apoya parlamentariamente al PSOE, como Aragón, Comunidad Valenciana e Islas Baleares, puesto que en Castilla-La Mancha y Extremadura sólo se formalizaron pactos para apoyar la investidura del candidato socialista. Por el momento las relaciones siguen en pie, aunque depende de las direcciones territoriales del partido la decisión de romper los pactos, según defienden fuentes de la formación morada.

Aragón: votan las bases

En Aragón, el propio secretario de Organización y líder de la formación en la comunidad aragonesa, Pablo Echenique, verbalizó ayer en una rueda de prensa el principio de la ruptura entre ambas fuerzas en varios territorios. De hecho, pidió a los militantes que «tomen nota» de la abstención puesto que iban a ser ellos los que decidan la «hoja de ruta» a seguir por el partido. Aunque esas declaraciones se hicieron en un tono bastante elevado, según ha podido saber este periódico, las relaciones no están rotas aunque serán bastante complicadas a partir de ahora y el propio presidente de Aragón, el dirigente socialista Javier Lambán, tendrá que decidir hacia dónde quiere gobernar, es decir, hacia el lado de Podemos o del PP. Desde la formación ven complicado rehacer las relaciones y, según afirmó el mismo Pablo Echenique, «cada vez es más difícil que nos podamos poner de acuerdo en las políticas que el señor Lambán quiere sacar adelante», dijo, ya que «el PSOE aragonés está cada vez más cerca del Partido Popular y más lejos de Podemos», lamentó.

Serán los próximos días 7 y 9 de noviembre los decisivos en el territorio aragonés para fijar la línea del partido y, también, para conocer si las bases quieren o no continuar con las relaciones con el Partido Socialista. Durante estos días la formación preparará una actualización de los documentos políticos en los que se extraerán preguntas y conclusiones sobre dicha relación, y que aventura ser negativa para las relaciones con el PSOE.

Valencia: más exigencia

Mientras, en la Comunidad Valenciana, el portavoz de Podemos, Antonio Montiel, ya ha recalcado al presidente de la Generalitat, Ximo Puig, que serán «más exigentes» y que, por ello, reclamarán garantías porque ya no confían en «sus buenas intenciones», informa Ep. En Valencia, al contrario que Compromís, Podemos no forma parte del Ejecutivo valenciano, pero sí que le da apoyos parlamentarios puntuales.

Baleares: en vía muerta

El partido morado balear sí que ha mostrado rotundamente su negativa a seguir apoyando al PSOE y a romper con el pacto de investidura que mantienen con el PSOE si los diputados baleares se abstienen en el Congreso facilitando así la investidura de Rajoy. De hecho, la portavoz de Podemos en el Parlament, Laura Camargo, aventuró que si se permite la investidura el pacto «quedará herido de muerte».

Extremadura: sin retorno

En Extremadura hace tiempo que Podemos se desvinculó de los socialistas, por lo que el PSOE necesita del PP para poder aprobar iniciativas puntuales. Desde la formación morada lamentan que se haya «impuesto la postura del PSOE más conservador.» Según han explicado fuentes de Podemos a este diario, la decisión se debe a que han querido «evitar unas terceras elecciones intentando que la gente olvide que tuvieron la oportunidad de formar gobierno con Podemos».

C.-La Mancha: el ensayo

El pacto de investidura se declaró «muerto» en este región hace tiempo, según la formación morada al constatar que el PSOE no cumplía con los acuerdos requeridos, y según explican desde el partido de Pablo Iglesias, haría falta un «cambio de actitud» para retomar los acuerdos.