Gobierno de España

Rajoy activa a sus bases territoriales para unas elecciones anticipadas

Desde Génova aseguran que llevan más de 30 actos «para estar preparados por si acaso»

Mariano Rajoy, el pasado 8 de febrero en la reunión del Comité de Dirección del Partido Popular
Mariano Rajoy, el pasado 8 de febrero en la reunión del Comité de Dirección del Partido Popularlarazon

Desde Génova aseguran que llevan más de 30 actos «para estar preparados por si acaso»

El presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, arengará esta mañana a su Comité Ejecutivo para mantener prietas las filas alrededor de su propuesta de una gran coalición, con PP, PSOE y Ciudadanos, como salida para la situación de bloqueo que dejaron las elecciones generales de diciembre. Las crisis en el PP valenciano y de Madrid también formarán parte del orden del día de la reunión con la constitución de las gestoras anunciadas, y, por tanto, en la agenda se colará inevitablemente la sombra de la corrupción que sigue lastrando las siglas del partido.

No obstante, lo previsible es que Rajoy se encuentre hoy con una Ejecutiva dispuesta a seguir cerrando filas con su líder nacional en tanto se resuelve qué ocurre con la Legislatura. La dirección nacional lleva semanas de intensa acción territorial. Una estrategia dirigida a agitar la movilización interna por si, finalmente, hay elecciones de nuevo, y que tiene también como objetivo reforzar la adhesión a Rajoy y a su candidatura de haber de nuevo comicios. Génova sostiene que está más que preparada para el caso de que haya que ir de nuevo a las urnas, una opción que cada día, por cierto, ven más probable. Ya han celebrado más de una treintena de actos a nivel territorial con la participación de representantes de la dirección nacional, además de los que está asumiendo Rajoy personalmente. Y según puntualizan desde el Comité de Dirección del partido, toda esta actividad tiene precisamente como objetivo «animar a la tropa y tenerla preparada por si acaso».

De momento, no tienen decidido adoptar nuevas iniciativas de precampaña porque ahora están a la espera de ver qué pasa con la investidura de Pedro Sánchez. En Moncloa asumen que necesitan que Rajoy no vaya en ese debate sólo a la contra y que intente recuperar la iniciativa que perdió una vez que rechazó acudir él a la investidura y fue el líder socialista el que recibió el encargo del Rey Felipe VI. Para ello, el líder popular utilizará este próximo debate parlamentario para rebatir con su contraoferta de coalición la oferta que presente el protagonista de la sesión parlamentaria, el que pedirá la confianza del Congreso para asumir la Presidencia del Gobierno. El PP se maneja sobre terreno movedizo ya que no sabe con qué apoyos ni de qué manera se presentará el secretario general del PSOE ante el Parlamento. Fuera del circuito oficial dejan ver que el peor escenario para sus intereses es que prospere el acuerdo de Legislatura entre el PSOE y Ciudadanos porque esto trasladaría presión no sólo sobre Podemos, sino también sobre ellos. No obstante, igual que en otras cuestiones son más prudentes y fían las previsiones a las circunstancias de cada día, en lo que afecta a la votación en la investidura la posición por parte de la dirección popular es rotunda y no hay discusión interna. El «no» que anuncian en público es la única posibilidad que manejan, aun siendo conscientes de que ante un acuerdo de los socialistas con los de Albert Rivera ese «no» les escoraría hacia la derecha. Ya bajando a otro escalón, sí se percibe preocupación por miedo a que ante unos nuevos comicios el PP no consolide sus posiciones perjudicado por el viento en contra de las últimas semanas. Pesan las novedades de los casos de corrupción que están bajo investigación y también pesa la sensación de que van a seguir llegando malas noticias. En cualquier caso, Génova se aferra a la idea de que sólo la coalición de Sánchez con Pablo Iglesias, con «la connivencia independentista», suma para formar Gobierno. Y sin descartarla, la impresión predominante en la cúpula popular es que es «muy difícil» que prospere. «Podemos tiene la sartén por el mango y serán ellos los que determinen si nos llevan o no a todos de nuevo a elecciones», pronostican en el PP.

Con independencia de si Sánchez fracasa, en el PP también ven prácticamente imposible que ellos consigan afianzar la abstención del PSOE para evitar unos nuevos comicios, a partir del 5 de marzo, si Sánchez no es presidente. Rajoy «empezará una nueva etapa», según anticipan en su entorno. El líder del PP sondeará de nuevo a los partidos para ver si tiene apoyos para ir él a la investidura, y además hará una propuesta formal de Gobierno al PSOE y a C’s, retomando lo que siembre en la propia sesión de investidura de Sánchez.