Elecciones Generales 2016

Rajoy no hará ninguna oferta al PSOE y a C’s si no aceptan negociar

Incluye en su ronda de contactos en busca de acuerdos a todos los partidos salvo a EH Bildu

Sáenz de Santamaría, durante la rueda de prensa que ha ofrecido hoy tras la reunión del Consejo de Ministros.
Sáenz de Santamaría, durante la rueda de prensa que ha ofrecido hoy tras la reunión del Consejo de Ministros.larazon

Incluye en su ronda de contactos en busca de acuerdos a todos los partidos salvo a EH Bildu

El presidente del Gobierno en funciones incluirá en su ronda de contactos a todos los partidos políticos, según confirmó ayer la vicepresidenta en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría. Esto incluye a los independentistas catalanes, a Democracia y Libertad, la nueva marca de Convergència, y a Esquerra Republicana de Cataluña (ERC). Aunque sí deja fuera a EH Bildu. No obstante, desde Moncloa precisan que el acuerdo para conseguir un Gobierno estable debe forjarse dentro del «marco constitucional, que la mayoría de los partidos comparten». Rajoy está dispuesto a escuchar a todo aquel que quiera reunirse con él, salvo la citada excepción de la marca abertzale. Y en el caso del secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, si éste le hiciera llegar que también quiere hablar con él antes del Comité Federal del día 9, esa conversación se produciría, precisan fuentes populares.

De momento, la impresión en Moncloa es que para que haya margen para avanzar, tanto al PSOE como a Ciudadanos «hay que dejarles que se enfríen». También creen que aunque ahora esos dos partidos estén jugando a ver quién es el que se retrata primero, y no quieran mojarse, al final hará su efecto la presión de la opinión pública. «Será determinante cómo evolucionan internamente», apostillan. Será un proceso «largo», pero creen que en el último momento aceptarán dejar gobernar a Rajoy. En cualquier caso, el líder popular no hará ningún ofrecimiento concreto si no constata que hay voluntad real de negociar.

La intención de Rajoy es asumir en primera persona estos contactos, sin intermediarios, y, si depende de él, con la mayor discreción posible. No quiere «espectáculos». Desde Moncloa advierten de que la intención de Rajoy es trabajar sin seguir el modelo de la legislatura fallida, donde se sucedieron las ruedas de prensa, los titulares y los pronunciamientos de unos y de otros, cada uno mirando por su interés de partido, sin que todo aquello rentabilizase en nada en favor del interés general. Por tanto, Moncloa no prevé ir informando al detalle de con quién habla Rajoy, sobre qué y cuándo hasta que no haya cuestiones concretas y no meros tanteos iniciales. Hasta ayer la única información que había trascendido es que Rajoy había hablado con Coalición Canaria (CC), que tiene un escaño. Estos primeros movimientos del candidato del PP confirman su decisión de dejar que PSOE y Ciudadanos «maduren» los resultados electorales. Especialmente en el caso socialista, inmerso en su debate interno y en las presiones de los «barones» territoriales a Ferraz para que retire el veto a Rajoy.

La vicepresidenta insistió ayer en que la prioridad es conseguir un Gobierno estable para los próximos cuatro años, que tenga como prioridad la UE, defender una posición común frente al terremoto del Brexit y cumplir con los compromisos comunitarios, pactando, por ejemplo, los próximos Presupuestos Generales del Estado (PGE). En esa negociación la vicepresidenta también incluyó la educación, la competitividad, la lucha contra el terrorismo, el fortalecimiento institucional o el impulso del empleo.

Moncloa desvincula en estos momentos la negociación de ofertas de «cargos o de ministerios». Primero Rajoy va a estudiar las posibilidades de acercamiento programático y, sobre todo, la voluntad de avanzar en la búsqueda de un consenso, puntualizan desde Moncloa. Y a partir de ahí, si hay margen, se abrirá el abanico «en todos los terrenos». Los mensajes que están llegando desde las filas socialistas llevan a que den por descartada la opción de la gran coalición antes de sentarse a hablar. Rajoy defendió esa opción como su preferida, pero si no hay voluntad de explorar un acuerdo, «no va a hacer ofrecimientos a Sánchez que por adelantado no tienen ningún sentido», insisten fuentes próximas al presidente. Entre los asuntos recurrentes, respecto al contenido de esta negociación post electoral, está la reforma constitucional. Al respecto, fuentes populares puntualizan que Rajoy no presentará una oferta de modificación constitucional «en ningún caso» porque no hay bases para llegar a un acuerdo y porque no iba en su programa electoral. Como mucho, «se puede hablar de una ponencia de reforma constitucional, que en cualquier caso se creará porque no tenemos los votos para impedirlo en el Congreso».