Política

Dos años de la victoria del PP

Rajoy hará cambios en las candidaturas para no perder plazas clave

El Presidente del Gobierno Mariano Rajoy clausura la Convencion Nacional de Nuevas Generaciones del PP
El Presidente del Gobierno Mariano Rajoy clausura la Convencion Nacional de Nuevas Generaciones del PPlarazon

En Génova están ya a la espera de que el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, comunique su decisión sobre el cabeza de lista para las elecciones europeas de la próxima primavera. La previsión es que el proceso arranque con el nuevo año y se visualice en la Convención Nacional que, previsiblemente, se celebrará a finales de enero.

Contra lo que pueda parecer, en la dirección popular no están muy preocupados con estas elecciones, que se celebrarán en mayo de 2014. Sostienen que el desgaste por las decisiones adoptadas puede dejarse notar, pero están convencidos, al mismo tiempo, de que el «desastre» será socialista. Y que el día después de esos comicios, de lo que se hablará será del «batacazo de Rubalcaba». Mientras que el PP, sin embargo, «aguantará» y «salvará los muebles», sostienen en el «aparato» del partido. Si esto es así, se comprobará en medio año. Y hasta entonces la maquinaria del PP se pondrá a trabajar a todo motor para combatir el coste por la gestión de la crisis. El presidente del Gobierno se implicará personalmente desde el primer momento ya en la precampaña, y, por supuesto, en la campaña de esos comicios.

Como también lo hará, según precisan en Moncloa, en la campaña de la autonómicas y municipales de 2015. Aunque queda mucho tiempo para esta cita con las urnas, en Génova preocupan más que las europeas. Sus propios análisis admiten que están en juego baronías decisivas para el PP, como Valencia o la Comunidad de Madrid, aunque, al mismo tiempo, también vean margen para mantener otros Gobiernos autonómicos considerados feudos socialistas hasta los anteriores comicios, como es el caso de Extremadura o Castilla-La Mancha.

En estas autonómicas la desventaja del PP es que parte de unos resultados sin precedentes, que le dieron el mayor poder territorial de la democracia, y que la coyuntura actual no tiene nada que ver con el efecto arrastre a su favor de las anteriores elecciones, por el profundo desgaste del Gobierno socialista. Los resultados de entonces «es muy difícil que se repitan», pero «podemos limitar las pérdidas porque la mejoría económica jugará a favor de las siglas del PP».

Para cuando se celebren las autonómicas, en el PP creen que la consolidación de la salida de la crisis será un motor para la proyección electoral del partido, con fuerza suficiente como para apagar el ruido de los recortes presupuestarios que los «barones» populares han tenido que aplicar en estos años para cumplir con el déficit.

«Las elecciones llegarán bajo una música positiva y en un escenario en el que Rajoy podrá pasearse por toda España reivindicándose como el artífice de haber sacado a España de la crisis», confían en el Gobierno. Y apuntan también que para entonces el PP remará con el viento a favor de la reforma fiscal que se concretará en 2014. Por si acaso, en el poder territorial empiezan a mover sus propias fichas, a veces a un ritmo distinto al de Madrid, aunque esto afecte a la imagen de un discurso nacional. Para gobernar el PP necesita la mayoría absoluta y Rajoy hará los cambios necesarios, incluso en las candidaturas, para mantener «plazas» fundamentales como Valencia o Madrid, precisan en Moncloa. El PP ya maneja sus propias encuestas internas, y las decisiones dependerán de la evolución de las mismas. En las comunidades y en los Ayuntamientos más importantes, como el de Madrid.