Gobierno de España

Sánchez mantendrá el «no» ante el Rey para bloquear la investidura

El líder del PSOE trasladará al Monarca la negativa del Comité Federal «sin cambiar un ápice» y no espera que Felipe VI ejerza ninguna presión sobre él para que se abstenga y facilite un Gobierno de Mariano Rajoy.

Don Felipe recibe a Pedro Sánchez en La Zarzuela durante la ronda de consultas tras el 20-D
Don Felipe recibe a Pedro Sánchez en La Zarzuela durante la ronda de consultas tras el 20-Dlarazon

El líder del PSOE trasladará al Monarca la negativa del Comité Federal «sin cambiar un ápice» y no espera que Felipe VI ejerza ninguna presión sobre él para que se abstenga y facilite un Gobierno de Mariano Rajoy.

La previsión de tener Gobierno cuanto antes, a principios de agosto, comienza a verse seriamente comprometida ante las posturas de bloqueo que han asumido PSOE y Ciudadanos en los últimos días. Los socialistas no se han movido ni un milímetro del «no» que ratificó el Comité Federal y la correlación de fuerzas que se dibujó en la elección de la Mesa del Congreso –en la que el PP contó con el apoyo extra de diez diputados nacionalistas, aún por identificar– ha dado oxígeno al argumento de Ferraz de que a Mariano Rajoy «le dan los números» con sus «afines ideológicos», un razonamiento que estaba a punto de caer por su propio peso por incomparecencia de interlocutores. También Ciudadanos utiliza la negociación con los soberanistas para condicionar su apoyo, pues aseguran que no se abstendrán si Mariano Rajoy hace gestos a estos partidos para superar la investidura. En cualquier caso, la mera abstención de la formación de Albert Rivera sigue siendo «insuficiente», como así la califican fuentes populares que apelan a que al partido emergente vire hacia el «sí» para presionar a los socialistas para la abstención. Por tanto, a Rajoy sólo le queda una semana para conseguir articular los apoyos suficientes, dado que –tal como publicó ayer este diario– Felipe VI sólo propondrá candidato si este tiene atados los avales para superar la votación de investidura.

El próximo jueves 28 de julio el líder del PSOE visitará La Zarzuela para su cuarto despacho con el Monarca en menos de seis meses. Sánchez detenta una posición de fuerza en la formación de Gobierno, pues sus 85 diputados son la llave más segura y estable para acabar con la inestabilidad política. Sin embargo, el líder socialista no parece tentado de probar este cáliz y prefiere mantenerse en su negativa a favorecer la gobernabilidad. Según fuentes del entorno de Sánchez, el secretario general socialista acudirá a la cita «con el ‘‘no’’ del Comité Federal» debajo del brazo. «Sin cambiar un ápice la posición que se defendió el 9 de julio», destacan estas mismas fuentes, que no prevén que el Rey ejerza ningún tipo de presión sobre el candidato socialista para que cambie de postura y se abra a la abstención para facilitar el Gobierno. «El Rey no entra en estos temas. No hace política», descartan. Lo que evitan desvelar desde Ferraz es si Sánchez mostrará su disposición a presentar su candidatura si Rajoy declina de nuevo. Un extremo que cuenta con bastante contestación interna, pero que el líder socialista ha evitado descartar en público, cuando se le ha interpelado directamente por esta cuestión en sus últimas comparecencias.

El «sí» de Ciudadanos

Tampoco el escenario es el más propicio. Desde la dirección se apunta a que la situación podría ser revisable si Ciudadanos diese un «sí» al PP. En este caso, Rajoy acudiría a la investidura con «una posición de mucha fuerza», lo que obligaría al partido a «reflexionar sobre qué papel asumir en ese nuevo panorama». Sin embargo, la formación de Rivera no parece avanzar hacia el voto afirmativo sino que retrocede hacia el negativo. Apoyándose en el argumento de que Rajoy habría entablado negociaciones con los nacionalistas, C’s se replantea el sentido de su voto y complica aún más las opciones de Rajoy de ser investido.

Son precisamente esas negociaciones, las que se fraguaron para la Mesa del Congreso, a las que Ferraz se agarra para inhibirse en el proceso de investir a Rajoy. Los socialistas delegan cualquier responsabilidad y señalan que «la ronda de consultas con el Rey tiene que servir para apuntalar la senda iniciada con los 179 votos» de la sesión de constitución de las Cortes. Una senda que no se circunscribe únicamente a la investidura, sino que tiene que servir también para aprobar los presupuestos, el techo de gasto y la resolución del conflicto territorial. «Si ha sabido dialogar y consensuar para conseguir una vicepresidencia de la Mesa, sería un revés muy duro para Rajoy no poder repetir ese acuerdo para obtener la Presidencia del Gobierno», señalan a LA RAZÓN fuentes del partido.