Pedro Morenés

«Vamos a luchar contra la amenaza terrorista allí donde pudiera atacar a España»»

Asegura que «quien quiera politizar a las Fuerzas Armadas comete una transgresión de uno de los pilares de la democracia». Destaca que invertir en Defensa es asegurar la seguridad de los ciudadanos y alerta de que «nuestro sistema está en riesgo de ser atacado por quienes no creen en él»

El ministro de Defensa durante la entrevista
El ministro de Defensa durante la entrevistalarazon

El ministro de Defensa destaca que invertir en Defensa es asegurar la seguridad de los ciudadanos y alerta de que «nuestro sistema está en riesgo de ser atacado por quienes no creen en él»

A poco de dejar la legislatura, el ministro de Defensa hace balance de cuatro años al frente de las Fuerzas Armadas. De carácter marcial, le importa más el reconocimiento del esfuerzo y la entrega por la paz y la libertad de los hombres y mujeres que componen el Ejército que el suyo propio. Tampoco se olvida del trabajo de su equipo, porque al igual que en la milicia los logros son compartidos.

–Se cierra la legislatura con otro pequeño aumento en el presupuesto de Defensa. ¿Se ha marcado ya la senda para que continúe en aumento?

–Espero que sí. Hay un acuerdo de septiembre de 2014 en la cumbre de la OTAN en el que los países miembros se comprometen primero a no seguir bajándolos, segundo subirlos en función del crecimiento del PIB para llegar al 2 por ciento de éste en un plazo razonable. Eso es muy difícil de cumplir a rajatabla, en tiempos de crisis económicas, y lo que estamos haciendo es mantener un presupuesto cuya reducción afectaría a la seguridad de todos los españoles.

–¿Los distintos partidos políticos se han dado cuenta de la importancia de invertir en Defensa?

–Estoy convencido de que todos saben la importancia que tiene la seguridad y la defensa. Otra cosa es que la coyuntura política promueva posiciones de cortas miras en algunos líderes políticos e incluso ciertos gobiernos que, aun sabiendo y considerando fundamental esa responsabilidad la obvien tratando de conseguir objetivos o rentabilidad política, utilizando la defensa. Una grave irresponsabilidad.

–¿Serán necesarios créditos extras para el programa de armamento?

–Los créditos extraordinarios que se han ido haciendo a lo largo de estos años son estrictamente necesarios para dotar a las Fuerzas Armadas del armamento y material que necesitan y para mantener la industria nacional, pagando también la deuda que otros no quisieron pagar.

–¿Por qué es necesario invertir en Defensa?

–Porque vivimos en un mundo que no es perfecto y es necesario garantizar aquellos elementos de convivencia que ha costado tanto tiempo desarrollar como la libertad, la justicia, el Estado de Derecho, el bienestar, la democracia. Nuestro sistema, nuestra democracia, está en riesgo de ser atacada por quienes no creen en ella o consideran que su sistema de valores y de vida tiene que ser impuesto por la violencia –como estamos viendo estos días–. La primera responsabilidad de un Gobierno es asegurar la seguridad interior y exterior y el bienestar de sus ciudadanos utilizando, si llegase el caso, todos los medios que el estado de Derecho da al Gobierno, entre ellos el uso de la violencia legítima cuando fuese estrictamente necesario.

BALANCE

–¿Qué considera lo mejor y lo peor de estos cuatro años al frente del Ministerio?

–Lo mejor es trabajar en esta casa. También es el reconocimiento que de la Institución militar se ha hecho a nivel nacional poniendo a las Fuerzas Armadas como una de las que tienen más credibilidad; y el reconocimiento exterior que también es patente por la adjudicación a España de los mandos de varias operaciones, entre ellas la punta de lanza de la OTAN (VJTF), el mando de Mali, el liderazgo del Eurocuerpo y la organización del mayor ejercicio de la OTAN: el Trident Juncture. Ese reconocimiento interior y exterior que hacen nuestras Fuerzas Armadas para el mantenimiento de la paz, la libertad y los valores y principios en los que nos movemos es algo que me conforta especialmente. Lo peor es la pérdida de seres humanos en el ejercicio de esas responsabilidades.

–¿Cómo deja el Ministerio de Defensa?

–No lo dejo todavía. Esa pregunta me gustaría contestársela... pero queda mucho tiempo. Hemos dedicado nuestro mejor esfuerzo a que el Ministerio se quede encarrilado hacia el futuro e intentado consensuar las políticas de medio y largo plazo con otras sensibilidades políticas, lo que garantiza que tenga una estabilidad futura, que es fundamental para esta institución.

MISIONES

–¿Se mantiene como fecha este fin de año para que los españoles abandonen definitivamente Afganistán?

–No, las tropas españolas van a cambiar la naturaleza de su misión en Afganistán. Vamos a dejar Herat, pero no Afganistán. Seguiremos cooperando en Kabul, porque el gobierno afgano necesita todavía el apoyo y el soporte nuestro para desarrollar sus propias capacidades. Dejaremos un número muy reducido de personas ayudando a las fuerzas afganas a conseguir el nivel de excelencia para garantizar la seguridad, la libertad y la supervivencia de su país.

–¿Se puede calificar de éxito la misión de la OTAN tantos años después?

–Creo que Afganistán está infinitamente mejor que cuando llegamos nosotros. Lo importante es que el pueblo Afgano ahora tiene un futuro y entonces no lo tenía, que a todos los niveles desde el punto de vista económico, político y social ha mejorado. Eso es fruto de un enorme esfuerzo en vidas y un esfuerzo personal y económico de nuestras Fuerzas Armadas y nuestros aliados, y tiene que reconfortar a quienes han estado ahí. Podemos decir que hemos cumplido con la misión a la que fuimos, que es dar un futuro a Afganistán.

–España lleva desde enero en Irak ¿Se empieza a plantear aumentar las capacidades?

–No, no estamos pensando en aumentarlas. Creo que hemos hecho un importante esfuerzo en la coalición. Tenemos una labor de formación del Ejército iraquí y eso es esencial para su propia supervivencia y creo que no vamos a ir más de ese esfuerzo. Es lo que se nos ha pedido y lo que estamos haciendo con éxito.

–¿Piensan mandar tropas sobre el terreno?

–Ya tenemos tropas sobre el terreno, pero su misión es el adiestramiento y la mentalización de las tropas iraquíes. No vamos a combatir contra el Estado Islámico directamente a través de nuestra fuerza.

–¿Qué se ha conseguido en Irak hasta ahora?

–He estado visitando a nuestras tropas y he visto el espíritu extraordinario de toda nuestra misión allí, les he escuchado en cuanto a las dificultades de formación, la manera de entender la milicia por parte de las fuerzas armadas iraquíes, que poco a poco está mejorando, pero les falta una consolidación de los elementos fundamentales de las estructuras del Estado. Mientras eso no exista es muy difícil inculcar a las fuerzas iraquíes un sentido de pertenencia a un Estado. Hay que dotar a ese Estado de credibilidad, cosa que se está haciendo y de los instrumentos que permitan esa credibilidad, cosa que estamos haciendo nosotros.

–¿Cuándo se va a desplegar la misión de patrulla por el mediterráneo?

–Nosotros hemos ofrecido un avión de patrulla que estará en Sigonella, con una autorización para poder destacar hasta 250 personas más, que sería la dotación de un barco. Esto es una operación de la UE, y a través de la UE se están negociando los permisos para poder desplegar el avión en Italia, pero depende del Gobierno italiano y de la UE. Nosotros estamos preparados para el cumplimiento de la misión desde el día 1 que lo aprobamos al llevarlo al congreso, donde fue aprobado por la inmensa mayoría de la cámara, con un solo voto en contra. Tenemos preparados buques para enviar a Libia en 48 horas.

–¿Cobran más fuerza las voces en la UE que piden una intervención militar en Libia?

–No, no percibo que cobre fuerza una intervención militar en Libia. Sí que el tráfico ilegal de personas que estamos atajando tiene una serie de componentes que lo aceleran, unos son de tipo político, del ámbito de los refugiados, la pobreza endémica de regiones conexas y otro es la expansión del Estado Islámico por el norte de África. También la cooperación que existe entre el crimen organizado y el terrorismo yihadista. Esto es muy importante tenerlo en cuenta, es un problema complejo que hay que abordar con políticas de largo plazo que hay que empezar hoy en día para dar un futuro a estos países africanos; eso se llama generosidad, que es una de las facetas de la inteligencia política aunque se practica poco, y otro es evitar las consecuencias terroríficas que estamos viviendo en el mediterráneo. La lucha contra el EI, que se aprovecha de esta circunstancia, es una prioridad tan importante como la cooperación internacional. Si tenemos los medios para evitar que se produzcan estas tragedias debemos hacerlo. Siempre bajo la legislación internacional y propia.

–EE UU y Alemania han informado ya de que van a retirar su misión con misiles Patriot en el sur de Turquía. ¿Qué va a hacer España?

–España tiene un principio fundamental en su actuación, que es el cumplimiento de la misión, de nuestros compromisos con los aliados y seguridad de nuestras tropas. Si no se diese ninguno o alguno de estos elementos por los que estamos allí, España reconsideraría la misión. De hecho, voy a tener una reunión con mandos de OTAN para ver cuál es el alcance de la salida de Alemania, que es a principios de 2016, porque si la salida de EE UU y Alemania no es reemplazada, y la misión queda de tal manera que acaba siendo inútil, no podremos cumplir la misión, por tanto no tendría ninguna utilidad que España estuviese allí. Respetamos las decisiones que toman EE UU y Alemania, pero mientras no nos diga la OTAN otra cosa, España no saldrá de Turquía.

–En septiembre llega el último destructor americano a Rota y completa la parte española del escudo antimisiles de la OTAN. ¿Qué supone?

–Supone el cumplimiento de la fuerza que se estableció a finales de 2011 y que, siguiendo la línea política del Gobierno anterior, que compartimos absolutamente, hemos venido desarrollando. Desde el punto de la defensa de Occidente, supone un reforzamiento ante una amenaza de ataque con misiles que sigue siendo cierta. Supone un fortalecimiento de la presencia o del compromiso de España en la OTAN, un fortalecimiento de la alianza bilateral importantísima para la seguridad de nuestra área de influencia y en general para la seguridad mundial de la relación con EE UU; supone un adiestramiento importante de nuestra fuerza naval a través de la cooperación con los americanos y una presencia, una credibilidad y un estatus de España muy importante en esa responsabilidad con la estabilidad mundial.

–¿Veremos a España en alguna misión nueva?

–España estará en todas las misiones donde pueda ayudar a la estabilidad internacional, a determinados países que sufren injustamente situaciones de pobreza o desestabilización y donde, directa o indirectamente, se amenace a nuestra seguridad y la de nuestros aliados.

–España, Italia y Portugal serán las anfitrionas del «Trident Juncture», el mayor ejercicio de la OTAN en dos décadas. ¿Será una demostración de fuerza ante la amenaza que proviene del sur y de Oriente Medio?

–El jefe militar de la OTAN ha incluido dentro del ejercicio «Trident Juncture» la doctrina vinculada a los problemas del sur. Con la crisis ucraniana hubo intención de llevarse el Trident al este, pero por la presión que hizo España y la convicción de otros socios como EE UU, Francia e Italia de que el sur es realmente la amenaza endémica que tiene la OTAN se ha mantenido el ejercicio en el sur y se la ha dotado de componentes doctrinales y operativos que tienen que ver con esa amenaza.

–España lidera en 2016 la punta de lanza de la OTAN. ¿Qué va a suponer para nuestro país?

–Tenemos la VJTF. Nuestra posición en la OTAN ha cambiado radicalmente, hemos pasado de ser un país irrelevante en el plano internacional a ser muy relevante, incluso teniendo un presupuesto limitadísimo. Pero nuestra capacidad, operativa que se debe a la disciplina, a la organización, al entusiasmo y a la fe en sus cometidos en nuestras Fuerzas Armadas han suplido esas carencias, aunque no significa que esto pueda ser mantenido para siempre. España va a ser el primer país en liderar VJTF.

–¿Qué pasa con la misión Golfo de Guinea? ¿Ha habido algún avance para poner seguridad?

–Ya estamos haciendo cosas en el Golfo de Guinea. Tenemos que desarrollar una misión más completa e integrada, pero para España como foco de inestabilidad es un lugar fundamental.

–La misión de Mali la lidera ahora el Eurocuerpo, al frente del cual está un español. ¿Sería bueno que se convierta definitivamente en el ejército europeo?

–El Eurocuerpo es un embrión de algo que tiene que llegar. ¿Va a ser el Eurocuerpo algo parecido al ejército europeo? Es un intento con los grupos de combate de generar capacidades operativas combinadas. Antes de que haya un ejército europeo tiene que haber una política de seguridad y defensa compartida y mientras no exista esa política compartida es muy difícil que lo que va aguas abajo pueda funcionar. No se construye la política de defensa y seguridad de abajo arriba, sino de arriba abajo.

AMENAZA YIHADISTA

–Después de los últimos atentados, seguimos en nivel 4. ¿Hay riesgo de atentado inminente?

–Si esto ha ocurrido en Francia, en Túnez, si la amenaza yihadista está lanzada a nuestra civilización, España no es una isla. Creo que debemos hacer dos cosas: una, prevenir con alerta y con información y toda la intensidad de seguridad que haga falta, y otra, luchar contra el terrorismo islamista para evitar que llegue a España. Esa idea de que es mejor no mirar el problema y así no nos enteramos de que existe es una irresponsabilidad absoluta y este gobierno, como otros serios y responsables, va a hacer frente a la amenaza terrorista allí donde comienza, donde se expande y donde –Dios quiera que no– pudiera atacar en España.

–¿A qué amenazas reales nos enfrentamos en este momento?

–La existencia de varias organizaciones terroristas que quieren acabar con nuestra manera de vivir. Tienen múltiples facetas y espacios donde se mueven: desde el puro espacio de los enfrentamientos de armamento regular, el ciberespacio, la propaganda de todo tipo, la enseñanza de la violencia en determinados centros de formación, la penetración de instituciones en nuestros países... Es una amenaza variopinta difícil de identificar y que utiliza todos los elementos de desestabilización que un sistema de libertades, si no se respeta el Estado de Derecho, da a quienes están dispuestos a conculcarlo. La democracia es un sistema avanzado que se basa en el Estado de Derecho y sin ese respeto la democracia es débil. De eso se aprovechan quienes conocen esa fortaleza y a la vez debilidad de la democracia.

INDUSTRIA

–¿Tendrá para el final de legislatura encauzado su proyecto para la industria de Defensa?

–Ese proyecto es necesario, creo en él, es una tarea que ya han hecho otros países: Alemania, Francia, Italia... Creo en ellos. Siempre he dicho que no prejuzgo la forma jurídica que tenga que tener ese camino integrador hacia una industria consolidada, pero sí que creo que tiene que llevarse a cabo. Hemos puesto encima de la mesa todo lo necesario para que eso se produzca. Las empresas son entes privados salvo Navantia; tienen que entender este proceso, estoy seguro de que lo van a llevar a cabo por convicción y el Gobierno ha hecho lo que tenía que hacer, dotar a las empresas de aquellos elementos jurídicos y de inversión que permitan que ese proceso se lleve a cabo.

–¿Cuál es la clave para que la industria española tenga un futuro competitivo?

–Dimensión industrial, capacidad de invertir en I+D+i, capacidad de exportar, y peso económico societario que le permitan defenderse como conjunto y no como partes atomizadas de movimientos accionariales en un sector tan importante como la Defensa.

–¿España tendrá drones?

–Sí.

–¿Hay fecha?

–En breve.

–¿Hay alguna novedad con respecto al accidente del Airbus?¿ Sigue habiendo confianza por parte de los socios?

–Va a llevar su tiempo desde el punto de vista de la CITAAM. Se sabe cuáles han sido las causas, tienen que ver con los motores, se han tomado las medidas oportunas, para corregir los elementos del software, que es lo que produjo el accidente. Dentro de la tragedia, hemos comprobado que somos capaces de reaccionar para saber en un corto espacio de tiempo qué pasa. Si se tarda un año, que es lo que suele tardarse, la credibilidad industrial se vería afectada. Creo que tenemos un magnífico avión. La propia Airbus ha tomado la decisión de llevar el departamento técnico a Sevilla, lo cual es una demostración de confianza en nuestras capacidades.

CATALUÑA

–¿Cómo va la recuperación del Museo del Ejército de Barcelona?

–Tenemos que hacer cultura de Defensa, pero me cuesta llegar recursos a ese ámbito cuando tenemos aspectos de la seguridad real a los que tenemos que atender, por lo tanto va lento, pero va.

–¿Qué supone las elecciones catalanas para la unidad de España?

–Nada, son unas elecciones autonómicas y la unidad de España no se pone en tela de juicio en unas elecciones autonómicas.

–¿Ni siquiera con el desafío que ha hecho Artur Mas?

–Usted me ha preguntado qué suponen unas elecciones catalanas. La soberanía de España depende del conjunto del pueblo español, que es donde reside.

–Con la nueva Ley de Seguridad, ¿el Ejército podría actuar por ejemplo en Cataluña?

–El rey Carlos III hacía inscribir en sus cañones «ultima ratio regis» (última razón del rey). Todos hemos jurado, incluidos los mandatarios catalanes, cumplir la Ley y la Constitución y todos los vamos a hacer, el primero este Gobierno: cumplir y hacer cumplir la constitución, y el Estado cuenta con los medios suficientes para ello. Estoy convencido de que la hipótesis que plantea no tendrá nunca que llegar a ponerse en marcha.

POPULISMOS

–¿El auge de los populismos puede afectar a la Defensa?

–Se oyen muchas cosas. La primera responsabilidad que tiene un gobierno es garantizar la seguridad de sus ciudadano; a partir de ahí se genera una determinada estabilidad política, social y económica que genera bienestar, riqueza y libertad, democracia y Estado de Derecho. Cualquier intento de debilitar aquello que genera seguridad es un ataque contra las derivadas de esa estabilidad y el futuro de nuestra gente. Creo que a veces las coyunturas políticas y los populismos hacen decir cosas extrañas que cuando se gobierna desde esas posiciones políticas no se cumplen jamás, sino todo lo contrario. Y hay ejemplos en países que se rigen por esos criterios populistas de cómo la seguridad se utiliza no para proteger a las poblaciones, sino para someterlas, países en donde algunos de nuestros populistas de nuevo cuño han bebido.

–¿Donde gobiernan han puesto ya alguna exigencia?

–Bueno, ha habido alguna petición, algo curiosa y anecdótica, pero creo sinceramente que existe un respeto por las fuerzas armadas, por lo que significan. La garantía de credibilidad de las Fuerzas Armadas es su condición apolítica. Quien quiera politizarlas comete una transgresión de uno de los pilares de la democracia.

–El alcalde de Zaragoza no quiso ir a la entrega de despachos. ¿Cómo valora ese gesto?

–Para mí es un síntoma de que no ha asumido que representa a todos los zaragozanos y no a sus propias ideas. Él es el alcalde de Zaragoza y por lo tanto de todos los zaragozanos y deber respetar sus sensibilidades que mayoritariamente están con las Fuerzas Armadas y desde luego con una institución secular como es la academia. Es un gesto de sectarismo político que dice muy poco de quien representa hoy al Ayuntamiento de Zaragoza.

–¿Qué va a pasar con los terrenos de Campamento ahora que está el gobierno de Carmena? ¿Cuál es la situación actual?

–Hemos estado con la alcaldesa. Es una operación que interesa a Madrid, ella tiene que estudiarla –así nos lo ha dicho–, y creo que en estas conversaciones lo que tiene que prevalecer por encima de todo es el interés general, que pasa por la defensa nacional, por el ámbito en la Comunidad de Madrid, por el Ayuntamiento, por quien está viviendo cerca... Hacer política desde el punto de vista del interés particular o la propia visión de un problema que tiene muchas facetas es hacer política de corta vista y no conduce a nada. Estamos abiertos a soluciones desde el punto de vista de preservar todos los intereses involucrados, pero creo que la «Operación Campamento» es buena para Madrid, generaría bienestar, riqueza... Y no se puede parar ni por ignorancia ni por preposicionamiento político sin ningún tipo de alternativa que tenga una solidez o algo que sea superior para los intereses generales de España, de la Comunidad o del Ayuntamiento.

–¿Cree que los españoles volverán a dar su apoyo a Rajoy o ahora se entregarán a los populismos?

–La inmensa mayoría de los españoles de todo tipo y condición tienen más criterio del que pudiera parecer viendo algunas manifestaciones que se hacen en determinados ámbitos políticos. Si se aplica ese criterio de defensa de un futuro creíble, de la verdad de esta vida que es trabajo, esfuerzo, cooperación, solidaridad, responsabilidad... reconocerán que el presidente Rajoy cree a su vez y practica, esos valores por encima de sus planes políticos de corto plazo y eso estoy seguro de que lo van a reconocer los españoles. Así lo ha demostrado a lo largo de estos cuatro años asumiendo unas políticas durísimas para cualquier persona que se dedique a la política donde el coste personal y político que ha sufrido ha sido gigantesco, pero lo ha hecho porque está convencido de que es lo mejor para España.

REY

–¿Cómo ve a un año y dos meses al mando supremo de las Fuerzas Armadas?

–El Rey, como su padre, el Rey don Juan Carlos, tiene una cercana vinculación a las Fuerzas Armadas que viene de su propia formación como oficiales y creo que los militares ven en S.M. el Rey al primero de ellos.

–¿Cómo valora la retirada de las calles de los Borbones y demás símbolos en Cataluña?

–Me parece una política gestual poco seria, poco responsable, superficial, gestos para ingenuos. Y me produce una pena grande porque significa una demostración de falta de agradecimiento a quienes de alguna manera han garantizado que España sea hoy una democracia avanzada. Hay un viejo refrán que dice que el agradecimiento es patrimonio de los bien nacidos pues estoy seguro de que los catalanes que son muy bien nacidos, volverán a reconocer los servicios prestados por la Monarquía a Cataluña. Los catalanes en general ya lo hacen; los que no lo hacen entenderán con el tiempo que aquellos gestos ni se corresponden con la verdad histórica ni con la realidad política ni con un futuro en armonía entre todos los españoles.

CRISIS DEL ÉBOLA

–Un año después del virus del ébola, ¿el Gómez Ulla está preparado para afrontar una crisis de ese tipo?

–España está mejor preparada para afrontar una crisis de este tipo. Hemos hecho un esfuerzo con el apoyo del Ministerio de Sanidad y Hacienda y con el impulso del presidente del Gobierno para dotar al Gómez Ulla de ocho habitaciones de grandes infectados que nos garantizan que nuestra gente desplazada y quienes están más cercanos puedan tener más atención que la que hemos podido darles hasta ahora, que no ocurran los accidentes de nuestra enfermera... Es la instalación más avanzada en Europa contra los grandes infectados. Estará en servicio para grandes infectados a finales de septiembre.