Marbella

Sira Antequera: “Mis bodas siempre responden a un sueño, casarse en invierno también lo es”

Sira Antequera: “Mis bodas siempre responden a un sueño, casarse en invierno también lo es”
Sira Antequera: “Mis bodas siempre responden a un sueño, casarse en invierno también lo es”larazon

Sira Antequera es mucho más que Wedding Planner, aunque fue la introductora de la profesión en España hace ya 18 años desde Marbella, y sigue diseñando las bodas y eventos más espectaculares para clientes internacionales y españoles, tanto en España como fuera, allá donde los novios deciden casarse, en lo que se conoce como destination weddings. Es conocida como Wedding Artist por el marcado carácter artístico con el que enfoca sus diseños. Su trabajo es una creación emocional con un desarrollo visual que genera tendencia. Los asistentes a sus eventos hablan de pura emoción. Sus novios y clientes, además, de cómo se ven reflejados hasta en los menores detalles y de cómo disfrutan. La calma y la serenidad que dicen que les aporta en el proceso la disfruto yo mientras tomamos un café con la fundadora de Sí, quiero.

-Sira, son conocidas sus bodas por el retrato personal que haces de cada pareja. ¿Cómo las diseña? ¿De dónde arranca el proceso creativo?

-Siempre pido a mis novios sus sueños. Casarse empieza con un sueño: unos novios y un deseo. A mí me gustan las bodas que responden a sueños intensos, con un punto de “y si...?” , de atrevimiento y disfrute que nos lleve a crear una boda única que sea un retrato de la pareja.

-Escuchamos hablar de emoción, de arte cuando hablan de su trabajo. ¿Qué diría que es lo que caracteriza a sus bodas?

-Nuestra prioridad es la experiencia emocional de novios e invitados: diseñamos y creamos una experiencia multisensorial que les induce a una vivencia emocional totalmente única.

Nani de Pérez (foto)

-Parece que hay una tendencia creciente a casarse en invierno...? Por qué?

-El invierno tiene sabor a chimenea chispeante, a familia que se reúne, a sobremesas con risas mientras se diluye la luz, a complicidad compartida ante las velas, a interminables noches de fiesta... El invierno es el territorio de los grandes cuentos. El invierno es la geografa de la magia... El sueo lleva a los novios a una exploración que persigue un recuerdo, una imagen, una emoción con la que empezamos a construir el día que imaginan. El invierno sabe a música barroca y a leña de encina y castañas. Y también a ballet, a fantasías narradas con un chocolate caliente, a dulces caseros y a las mesas más bonitas del año.

Y además hay novias enamoradas de las opciones infinitas de los vestidos de frío con siluetas más complejas con capas, capuchas, estolas, abrigos, manguitos, mangas largas, guantes... con tejidos y pieles que son imposibles en meses de calor. Y que deciden casarse en invierno por llevar un vestido, un escote, un cuello alto o un largo de manga o prenda determinados. Como decía... novios que sueñan, en este caso concreto, novias.

¿Las mesas de invierno tienen una línea cromática propia? ¿Cómo se enfoca la decoración de una boda de invierno?

-Me encanta que el frío incorpore el rojo a la decoración de bodas. El imaginario invernal está tan centrado en la Navidad que hace de sus colores tradicionales uno de sus motivos más deseados. Colores burdeos, rojos y verdes son una combinación tradicional que es siempre deseable y cálida. Frutos y flores rojos, verdes de abetos y coníferas, hojas en esos tonos profundos de la magnolia incluso de la camelia, hortensias verdosas, piñas, guirnaldas, velas -muchísimas velas siempre, chimeneas, fuegos...- para crear el entorno más fabuloso.

Una opción más tierna y sencilla en las mesas tendrá manteles oscuros (en terciopelo, hilo o fantásticos estampados como tartanes escoceses o cachemiras), bajoplatos de madera, cristalerías talladas, servilletas de hilo o lino y sillas de madera.

Las novias que deseen una opción más formal e impactante podrán incorporar cubertería en oro, con los manteles crudos y neutros (lisos o estampados en brocados y cachemiras), bajoplatos en dorado o cristal y sillas en dorado.

El juego de colores y tonos permite combinar hasta donde la imaginación y los gustos lleven. A mi me fascinan las decoraciones en total white, con toda la gama de blanco y sin intervención de otros colores, conjugada con plateados o dorados.

Amanda Watts (foto)

-El menú de invierno también es diferente, claro...

-Claro. La alimentación tiene que ir conjugada con el momento: día/noche, temperatura y/o estación, incluso hay que tener en cuenta el perfil de los invitados. Un menú de invierno permite presentar opciones que en los meses de calor no tendrían espacio: menús más largos y platos que tienen una mayor elaboración (y temperatura) son bienvenidos.

-Cuando uno piensa en decoración, piensa en flores y una mesa elegante. Pero ¿hay otros elementos imprescindibles en la decoración?

-Yo creo que imprescindible es la sonrisa de los novios. El resto dependerá del tipo de boda que deseen. Para crear atmósferas es fundamental un proyecto de iluminación adecuado. La iluminación es el concepto decorativo que pasa desapercibido para ojos no profesionales, y sin embargo es el prioritario. El resto de elementos son una respuesta concreta: zonas de chill out, estaciones, branding para desarrollar una imagen en papelería y elementos de comunicación, seating plan especiales, carpas, etc.

Couche Photo (foto)

-¿Cuáles son las grandes novedades en eventos?

-La enorme importancia de la gastronomía en nuestra cultura hace que todo lo relacionado con ella tenga un alto protagonismo y además siga siendo creciente. Nosotros introdujimos hace años el concepto de estaciones y corners en los eventos, creando zonas específicas con distintos tipos de exposición de alimentos, e incluso de showcooking y maridajes con vinos y champagnes. Los ubicamos y decoramos de manera que sean una experiencia sensorial completa, empezando por los ojos y continuando por el paladar. El cóctel con estaciones suele contar posteriormente con una parte de almuerzo o cena servida porque el montaje de mesas ha adquirido una importancia visual de primer nivel. Un montaje deslumbrante de buffet de postres es un fabuloso broche de oro a una cena.

Sumando el diseño musical adecuado, construimos el marco escenográfico adecuado para una vivencia inolvidable.

-También vemos escapadas de invierno para casarse en paraísos soleados. ¿Es posible hacer una boda de verano en Diciembre?

-La escapada también se tiene su momento en invierno. La necesidad imperiosa de correr a lugares donde el termómetro no baja de los 30 grados. Volver a sentir el sol en la piel. No sentir el peso de la ropa de invierno y ver tu piel brillante y dorada otra vez... Algunos destinos deseados para casarse están fuera de nuestras fronteras. Otros, dentro: en algunas zonas de España el invierno es solo una fecha. Como cada pareja tiene su manera personal de casarse, nosotros les ayudamos a definir la boda que desean, completamente a su medida, empezando por elegir el lugar según su idea.