España

El Rey esperanzado en salir de la crisis avisa de que no será fácil

Se muestra contento de trabajar en estos «tiempos difíciles»

El Rey saluda a José Ramón Bauzá, presidente de Baleares
El Rey saluda a José Ramón Bauzá, presidente de Baleareslarazon

MADRID-Tras la cena la noche anterior con las autoridades de Baleares, el Rey recibió ayer en el Palacio de la Almudaina –por este orden– al presidente del Parlamento, Pere Rotger; al presidente del Gobierno balear, José Ramón Bauzá, y al alcalde de Palma, Mateo Isern. El presidente balear aseguró que el Monarca,«como primero de los españoles», está «preocupado, igual que todos nosotros, por la situación económica», si bien aseguró que en el encuentro no hablaron «lo más mínimo de un posible rescate a España».

Así, tras el encuentro entre el jefe del Ejecutivo autonómico y el Rey, que se prolongó durante unos 45 minutos, Bauzá destacó que Don Juan Carlos se interesó por conocer cuál es la situación económica en Baleares y los proyectos y propuestas que las islas presentan para reactivar la economía, «no sólo la propia, sino también la del Estado».

En la misma línea se desarrolló la entrevista con Rotger, a quien transmitió su preocupación por la situación de crisis económica y por el hecho de que no será fácil salir de ella. «Ha mostrado su esperanza de que salgamos, porque España es un gran pueblo, pero también que no será fácil», explicó Rotger a los periodistas. El presidente del Parlamento dijo haber encontrado al Rey «anímicamente muy bien» y explicó que en la cena que ofreció la Familia Real compartió mesa con el Monarca y estuvo «muy simpático, como es él». «Me dijo que está muy contento de trabajar, y más en estos tiempos difíciles», detalló Rotger.

 

«¿Os han ofrecido algo?»
Con ese estilo cercano usual en él, Don Juan Carlos se interesó por la atención prestada a los periodistas –que ayer evitaron el flash tras un comentario del Monarca la noche anterior–mientras esperaban durante la celebración de las tres audiencias en la Almudaina, y minutos después se sirvieron bebidas a los informadores en vasos grabados con las iniciales de los Reyes. El Monarca se detuvo ante los periodistas para preguntar si les habían ofrecido un café o se les había servido «algo». Uno contestó: «Agua», e hizo un gesto para ordenar que se sirviera a los informadores «una Coca-Cola o un refresco».