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Más viejos que Matusalén

«La saga de los longevos», de Eva G. Sáenz, da el salto al papel tras arrasar en internet«La saga de los longevos»E. García SáenzLa esfera de los libros592 páginas,19,90 euros (e-book, 3).

Más viejos que Matusalén
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En España ya hay libros que nacen online y acaban editándose en papel, el sueño de cualquier autor novel. Eva García Sáenz comprobó que las editoriales eran muy lentas y que su libro, «La saga de los longevos», requería una edición 2.0 y promoción viral en las redes sociales. Y así lo hizo. Se puso al día en marketing en la red y a partir de un blog inició la promoción de su novela sobre una familia de inmortales. El éxito la ha acompañado hasta el punto de ser editada en papel, aupada por internet. Además de la red, sería interesante analizar por qué muchos escritores españoles han apostado por la literatura de género y cuántos están triunfando en el mercado nacional y extranjero, desde Zafón a Laura Gallego, seguidos de Posteguillo, Félix J. Palma y Javier Sierra. Ya sea en la novela histórica, la heroica o el ciberpunk, dando la espalda a la antaño prestigiosa idea de «autor».

El éxito de lo fantástico
De entre las docenas de nuevos escritores de fantasía cabría colocar a Eva García Sáenz entre los seguidores del costumbrismo de lo fantástico. Está en la saga de Patrick Rothfuss, que tanto éxito está teniendo entre niños y jóvenes, con su visión del mundo épico-heroica en clave cotidiana, y también en la saga de ficción paleoantropológica de Jean M. Ayuel. Ambos reconstruyen mundos inexistentes con la rotundidad y precisión que confiere la visión cotidiana, ya sean las fantasías de espada y brujería como la prehistoria. Con ambas tiene conexión «La saga de los longevos». Parte de «Los inmortales», de épico recuerdo para los fans de la serie cinematográfica ideada por Gregory Widen, y lo desmitologiza con ese costumbrismo de lo épico que gusta a las nuevos lectores. García Sáenz parte del trasfondo mitológico de estos seres mortales pero con un gen de la longevidad, y revive con minuciosidad su transcurrir por la historia. Esta saga resulta un relato bien trabado, con una ajustada intriga y originalidad en el tratamiento. Narrado en primera persona, utiliza un fondo documental rico en referencias paleontológicas y de gerontología que avivan la verosimilitud. Traza también un relato romántico de los protagonistas, con incursiones temporales en la prehistoria y el presente. Una pasión entre dos seres condenados a encontrarse: un longevo cromañón y una «efímera» prehistoriadora.