Bruselas

Las comunidades amonestadas aseguran que no han sido avisadas

La Razón
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MADRID-La mayoría de las comunidades a las que el Gobierno volverá a examinar ante la posibilidad de que no cumplan el objetivo de déficit no se han enterado de su situación o, mejor dicho, aseguran que nadie les ha avisado de que no están cumpliendo. Tal y como publicó ayer LA RAZÓN, el Ministerio de Hacienda considera que Andalucía, Aragón, Castilla-La Mancha, Valencia, Murcia, La Rioja, Cataluña y Extremadura podrían no llegar a ese 1,5 por ciento de déficit y, sin embargo, varias de ellas aseguran no tener conocimiento de ello. Es el caso de Aragón, comunidad que se muestra sorprendida de estar en esa lista. Según aseguraron desde el Departamento de Hacienda, «nadie nos ha apercibido de nada» y no entienden cómo ahora llegan a esta situación si, según los datos del primer trimestre, «éramos la segunda con mejores cifras». Su sorpresa, dicen, «es mayúscula».

Algo parecido ocurre con Castilla-La Mancha. Desde la Junta de Comunidades aseguraron, en boca del consejero de Hacienda, Arturo Romaní, que «nadie nos ha comunicado que exista algún riesgo de incumplimiento». Y en Andalucía y Extremadura, lo mismo: nadie tiene constancia de que no vayan a cumplir con sus obligaciones.

Por su parte, desde Cataluña, el anuncio del Gobierno de imponer un déficit del 0,7% a las autonomías en 2013 ha indignado a la Generalitat, que considera que ya está haciendo esfuerzos muy importantes. Su consejero de Economía, Andreu Mas-Colell, exige al Ejecutivo de Rajoy que flexibilice esta cifra, aunque no ha amagado con la desobediencia, a diferencia de Convergència, que ha animando a la Generalitat a ignorar las restricciones que se reclaman desde Madrid. En este contexto, es inevitable contemplar que Cataluña pueda ser intervenida, un escenario que la Generalitat ya ha valorado a pesar de que, según Mas-Colell, nadie le ha amenazado de forma pública ni privada. En cualquier caso, llegado este extremo, el gobierno de Artur Mas aboga por pedir la interlocución de la UE, ya que entiende que Bruselas será más receptiva. Pero la realidad, asumida por la Generalitat, es que Bruselas sólo reconoce como interlocutor al Gobierno. Así las cosas, es de prever que Cataluña no tenga otro remedio que acometer una cuarta tanda de recortes, en esta ocasión de unos 800 millones de euros. Un discurso algo más diferente llega desde la Comunidad Valenciana. La Generalitat considera que están en la lista porque sólo se han tenido en cuenta los datos del primer trimestre, cuando aún no se había aplicado el «potente» plan de ajuste. Por ello, aseguran que pese a que aún no se ven resultados, en los próximos días se aclarará todo.

Mientras, la Región de Murcia reconoce que recibió el pasado jueves un toque de atención en el Consejo de Política Fiscal y Financiera debido a que, según los datos de los que dispone Hacienda, el Plan de Reequilibrio no está reduciendo el déficit tan rápido como se esperaba. No obstante, el vicepresidente y consejero de Economía de Murcia, Juan Bernal, explicó que durante este mes desglosará al Ministerio las trabas encontradas, al tiempo que ratificó el compromiso de la Comunidad Autónoma de reducir el déficit del 4,3 al 1,5 por ciento, aunque consideró que «será difícil y complicado». Asimismo, aseguró que la hoja de ruta acordada «será palpable en el segundo semestre».

 

LAS REACCIONES
CATALUÑA

La Generalitat, muy crítica con los ajustes del Gobierno de Rajoy, destaca que nadie les ha avisado de nada, ni en público ni en privado.
ANDALUCÍA
Desde la comunidad presidida por José Antonio Griñán aseguran no haber sido avisados de que no avanzan por buen camino.
ARAGÓN
«Nadie nos ha apercibido de nada», afirman tajantes desde la autonomía presidida por Luisa Fernanda Rudi.
C. VALENCIANA
Los datos que maneja el Ministerio, dicen, corresponden al primer trimestre, cuando aún no se había iniciado su importante plan de ajuste.
C.-LA MANCHA
Al igual que Aragón y Andalucía, a la región de María Dolores de Cospedal no les han dicho «que exista algún riesgo de incumplimiento».