Castilla-La Mancha

Doce «piteros» detenidos y 9000 piezas arqueológicas recuperadas

La Guardia Civil ha detenido a un grupo de doce saqueadores de yacimientos arqueológicos en Castilla-La Mancha y Comunitat Valenciana en la operación Necrópolis, un grupo que empleaba detectores de metales para localizar los restos, principalmente monedas, de las que se han intervenido unas 9.000 de un valor "incalculable".

El portavoz de la Unidad Central Operativa (UCO) del instituto armado, Félix Ruiz, ha señalado que los doce "piteros"detenidos -nombre con el que se designa a las personas que expolian yacimientos mediante el uso de detectores de metales, que "pitan"al localizar alguna pieza- son de nacionalidad española.

A falta de una tasación definitiva de los expertos, Ruiz ha dicho que entre las más de 9.000 piezas intervenidas en el marco de la operación, destaca el hallazgo de un conjunto de monedas que los miembros del grupo ya habían limpiado y que habían sido seleccionadas para su colección particular.

Durante la operación se han efectuado registros en trece domicilios de los detenidos en las localidades valencianas de Aldaia, Alaquàs, Manises y Moncada, donde se han interviniendo objetos arqueológicos de gran importancia histórica y científica, como monedas, medallas, detectores de metales y planos cartográficos de yacimientos, así como material para la limpieza de las piezas.

Las primeras investigaciones del Grupo de Patrimonio Histórico de la Guardia Civil se remontan a principios de este año y permitieron averiguar que los ahora detenidos se desplazaban de madrugada y en grupos de cuatro o cinco personas hasta yacimientos arqueológicos ubicados en zonas despobladas de monte y distantes varios kilómetros de las vías de comunicación principales.

Una vez perpetrado el expolio, el grupo abandonaba el lugar por distintos caminos que previamente habían estudiado con el fin de eludir los posibles controles policiales.

Reuniones tras los saqueos

Los saqueadores solían reunirse en bares de sus localidades de residencia para mostrarse entre sí las piezas robadas, muchas de las cuales ponían posteriormente a la venta en mercadillos especializados o a través de intermediarios.

La operación llevada a cabo por el Grupo de Patrimonio Histórico de la UCO ha contado con la colaboración de otras unidades del cuerpo de las provincias afectadas.

La Ley 16/85 de Patrimonio Histórico Español prohíbe expresamente la búsqueda, sin autorización, de restos arqueológicos, así como que si estos fueran hallados de forma casual o previa autorización, deben de ser entregados inmediatamente a la administración.