ANÁLISIS: Una subida de la temperatura por Antoni Rosell

l ¿Cómo afectan las emisiones de metano al clima?
–El metano es un gas de efecto invernadero con mayor potencial de calentamiento que el dióxido de carbono. Absorbe más radiación infrarroja y por lo tanto, más calor. Por este motivo, que se incremente su volumen en la atmósfera puede tener un gran efecto sobre el clima. No obstante, es menos abundante que el dióxido de carbono, pues su vida es más corta –acaba transformándose en dióxido de carbono–, lo que limita su efecto.

l ¿Pudo el gas emitido por los dinosaurios a través de sus flatulencias elevar la temperatura terrestre?
–La relación del metano con los aumentos de la temperatura terrestre es clara, si bien dudo que las emisiones de los dinosaurios pudiesen ser tan considerables como para tener un efecto significativo en la Tierra. Sucede algo similar hoy en día con las emisiones derivadas de la ganadería, cuyo efecto no es tan importante como para cambiar el clima.

l ¿De qué otras fuentes puede emanar el metano?
–Además de los procesos de digestión y defecación de los animales, se produce también en los procesos de descomposición de materia orgánica y en zonas húmedas, pantanos o lugares con agua estancada. En estos humedales, como las plantaciones de arroz, la vegetación crece, muere, se descompone y emite metano. También está presente a altas latitudes, como los suelos de Siberia, donde el deshielo y la posterior descomposición de materia causan la emisión de este gas.

l ¿Se han producido en el pasado otras subidas de la temperatura por culpa de las emisiones a la atmósfera?
–En el océano, a poca profundidad y cuando se dan las condiciones adecuadas de temperatura y estabilidad, pueden formarse grandes depósitos de metano. Así, se cree que hace 55 millones de años hubo una desestabilización global de estos depósitos submarinos que causo la emisión de grandes cantidades de metano y, como resultado, una gran subida de la temperatura terrestre.

Antoni Rosell
Investigador Icrea de la UAB