Actualidad

El 60 por ciento de las médicos españoles admite que su estilo de vida no es saludable

Un estudio con más de 2.500 médicos de Atención Primaria ha revelado que sólo un 39,6 por ciento de las mujeres de esta profesión reconoce llevar un estilo de vida saludable, mientras que el resto declara llevar uno (36,4%), dos o más (23%) hábitos de vida no saludables.

El 60 por ciento de las médicos españoles admite que su estilo de vida no es saludable
El 60 por ciento de las médicos españoles admite que su estilo de vida no es saludablelarazon

Así se desprende de los resultados del Estudio CHABS, presentado por Novartis con motivo de la celebración del Día Internacional de la Mujer, para conocer el riesgo cardiovascular y los hábitos de vida de las médicos que trabaja en España.

Del estudio se analizó una submuestra de 700 mujeres, con una media de 8,1 años de experiencia profesional, 35,4 años, un promedio de 40 horas semanales trabajadas y alrededor de 38 pacientes atendidos al día.

De este modo, observaron como los hábitos saludables de las profesionales de menos de 16 años de experiencia profesional son algo peores que los del resto de médicos, en parte porque aseguran tener mayor dificultad para desarrollar hábitos de vida saludables, tales como seguir una dieta (32,2%) y practicar ejercicio (51,5%).

Pese a todo, existe una buena autovaloración del estado de salud entre las mujeres médico con menos años de experiencia. El 90,2 por ciento consideran tener un estado de salud bueno o muy bueno, a pesar de que el 18,6 por ciento hayan visto limitadas sus actividades habituales por alguna enfermedad durante el último año.

El descanso insuficiente es el hábito no saludable que más destaca entre las mujeres médico, representando un 33,1 por ciento frente al 23,9 por ciento de los varones.

Le sigue el sedentarismo que ocupa un 24,9 por ciento en las mujeres y un 20 por ciento en los hombres. Además, los varones médicos, sin embargo, consumen más alcohol (16,1 frente al 3,7 por ciento) y confiesan llevar una mala alimentación en el 7,1 por ciento de los casos (frente al 5,6 por ciento en mujeres).

La presencia de factores de riesgo cardiovasculares (FRCV) como la hipertensión arterial, el tabaquismo, la diabetes, la hipercolesterolemia o los antecedentes familiares, son también inferiores en las mujeres médicos con menos años de experiencia.

Así, el factor más común es tener antecedentes familiares de enfermedad cardiovascular, mientras que el 12,3 por ciento señala el tabaquismo. La hipertensión arterial, la hipercolesterolemia y la diabetes registran en cambio unas cifras muy bajas.

LA MITAD DE LAS MEDICOS QUE FUMAN VEN DIFICIL DEJAR DE FUMAR

Entre las médicas fumadoras de la submuestra (15,4%), un 54,1 por ciento considera difícil o muy difícil dejar de fumar. Además, un 35,8 por ciento de las fumadoras manifiestan no querer o no intentar dejar de fumar, cifra considerablemente mayor que la del resto de médicos y médicas con más experiencia (29,7%).

Las mujeres médico presentan un grado de estrés percibido de un 4,7 en una escala del 1 al 7, un valor ligeramente mayor que para el resto de médicos, aunque menor respecto al de las médicas con más experiencia profesional.

Por otro lado, las médicas con menos de 16 años de experiencia profesional reflejan un mayor nivel de agotamiento emocional que sus compañeros y que las profesionales con mayor experiencia (57,4% con un nivel medio o alto).

Además declaran tener un menor distanciamiento del trabajo (mayor compromiso, un 38,7%) y, finalmente, el grado de realización personal es considerablemente menor que para el resto de médicos.

El 38,3 por ciento de las médicas reconoce que sus prácticas preventivas en materia de salud cardiovascular son regulares o malas. No obstante, cuando las comparan con las de sus propios pacientes, las califican de mejores o mucho mejores.