Galicia

Un álbum de vivencias

Rocío Delgado, presentadora de "Escenarios Madrid", en Telemadrid

Un álbum de vivencias
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Los hoteles a veces fríos e impersonales, cuando te alojas en ellos porque te lleva el trabajo, y en lo único que piensas cuando inspeccionas el minibar o buscas desesperada el mando de la tele mientras te tumbas en la cama es en irte de allí cuanto antes. Sin embargo, hay enclaves mágicos, con los que conectas y que acaban formando parte, por derecho propio, de tu álbum de vivencias. Para mí, el hotel Samil, en Vigo, es uno de ellos. Qué voy a decir, como buena viguesa y enamorada de la ría, de los atardeceres viendo cómo cae el sol por detrás de las Islas Cíes... Gran lugar este hotel para, después de haber recorrido el paseo que bordea la playa, «oxigenando» como me gusta decir, recogerte y seguir disfrutando de la tranquilidad y del mar desde cualquiera de sus balcones. El mar es un elemento casi constante en mis escapadas. Pero no puedo dejar de recomendaros, sin salir de Galicia, en la provincia de Orense, un lugar en plena Ribeira Sacra donde, sin exagerar, el tiempo se detiene. Es el Parador San Esteban de Ribas do Sil, un antiguo monasterio benedictino, con todos sus elementos además, reconvertido en parador. Os invito a descubrirlo, está en una zona además, donde confluyen el río Miño y el Sil con una belleza sin par. Hasta el color verde cobra allí una dimensión especial. Y de Galicia a Cádiz. Concretamente a Tarifa, al «100 por cien Fun», un hotel precioso a unos metros de la playa de Valdevaqueros, llena casi todo el año de locos del surf. Imprescindible su restaurante, genial para tomarse una copita tras una jornada de playa. Originalísimas las habitaciones, cada una con su estilo, con su aire. Y navegando entre recuerdos hoteleros tengo que detenerme en dos islas y dos lugares: el primero, en las Palmas, el Meliá Tamarindos. Parece convencional, pero si necesitas unas vacaciones, una desconexión, es el lugar. Capítulo aparte merecen las habitaciones y la piscina, rodeada de una decoración isleña espectacular. ¿Y la otra cara de la moneda? Menorca. Reconozco que le tengo debilidad. Allí, para hospedarse descubrí, en el centro de la isla, en el casco antiguo de Ferreries, un hotelito con muchísimo encanto y una sencillez que te enamora: «Ses Sucreres». Las habitaciones son diáfanas, luminosas y nada recargadas. Está cerquita de todo. Sonrío al recordarlo. Supongo que es la sonrisa de cuando has terminado por incorporar el hotel, hostal o parador a los recuerdos del viaje. La prueba de que, entre todos, has encontrado el refugio que más se identifica contigo. El síntoma de que has acertado.

CLAVES
>> Nombre. Meliá Tamarindos.
>> Dónde. En Las Palmas de Gran Canaria.
>> Lo mejor. Su piscina.
>> Contacto. 928 77 40 90.