Reino Unido

Cameron carga contra May por su ambigüedad sobre el Brexit

El ex «premier» se sintió tan «defraudado» que se refería a ella como «agente enemiga»

Cameron abandonó Downing Street tras el referéndum del Brexit, lo que provocó un proceso exprés de primarias que llevó a May a ser primera ministra
Cameron abandonó Downing Street tras el referéndum del Brexit, lo que provocó un proceso exprés de primarias que llevó a May a ser primera ministralarazon

El ex «premier» se sintió tan «defraudado» que se refería a ella como «agente enemiga»

La luna de miel ha durado poco para la «premier» Theresa May. Su ambivalencia para definir la estrategia ante el Brexit le está costando todo tipo de críticas tanto dentro como fuera de sus filas. Pero no es la primera vez que ese carácter ambiguo le crea adversarios. Su indeterminación durante la campaña del histórico referéndum de junio acabó con la paciencia del mismísimo David Cameron. El ex «premier» se sintió tan «defraudado» con ella que sus colaboradores decidieron bautizarla como «submarino May» o «agente enemiga». La bomba la soltó ayer Craig Oliver, hombre clave para el entonces líder «tory», con la primera entrega de un libro que promete desestabilizar al Partido Conservador.

Es ya todo un clásico. Cada vez que un primer ministro abandona Downing Street sus memorias hacen correr ríos de tinta. Y aunque para las de Cameron aún habrá que esperar un año, la publicación de su íntimo colaborador se ha convertido en el mejor aperitivo. Sólo ya el título supone toda una declaración de intenciones: «Desatando a los demonios: La historia interna del Brexit». Según Oliver, May –entonces ministra del Interior– se negó a dar su apoyo explícito al entonces responsable del Ejecutivo hasta en trece ocasiones cuando éste le pidió que se uniera a la campaña por la permanencia de Reino Unido en la Unión Europea.

El autor del polémico libro, que durante cinco años fue jefe de comunicación del ex líder «tory», explica que Cameron se mostró «visiblemente herido» e incluso mostró su enfado a May durante «una reprimenda» telefónica. Finalmente, la ahora inquilina del número 10 apoyó la permanencia en el bloque. Aunque, según el libro, durante la campaña fue «una figura que estuvo muy quieta en el centro de todo». «Ahora es la última que permanece», matiza. Lo cierto es que las intervenciones de May en los meses previos a la consulta pasaron desapercibidas. Es más, durante uno de sus discursos llegó a mostrar su preocupación ante la adhesión de Turquía al bloque. La pregunta es: ¿Estaba May a favor del Brexit desde el principio? Oliver no acaba de despejar la duda, aunque recalca que sólo salió en defensa de Cameron cuando éste estaba «herido de muerte».

Para muchos analistas, sus tímidas apariciones fueron parte de una estudiada estrategia con vistas a presentarse a unas posibles primarias, como luego pasó, sin estar demasiado salpicada por ninguno de los bandos. Por otra parte, Oliver también señala que el ahora titular de Exteriores y ex alcalde de Londres Boris Johnson –ex líder oficioso de la campaña por el Brexit– creía que la campaña por la salida, que finalmente ganó, «quedaría machacada». Según la versión que ofrece ahora el libro, el polifacético político dudó hasta el último momento y mandó su decisión final a Cameron por texto tan sólo nueve minutos antes de hacerla pública.

Ni desde Downing Street ni desde la oficina del titular de Exteriores han respondido a dichas afirmaciones. Aunque no son las únicas. En otra publicación, titulada «Guerra abierta: cómo el Brexit hundió a la clase política británica», el jefe de Política del rotativo «The Times», Tim Shipman, confirma que Cameron llegó a llamar «cobarde» a May por no arroparle en su negociación con la UE, cuando reclamó un «freno de emergencia» para controlar el flujo de inmigrantes europeos en Reino Unido.

Corbyn tiende la mano a sus críticos

El Partido Laborista británico inició ayer en Liverpool su congreso anual «con ganas de cambio» y la voluntad de su dirigente, Jeremy Corbyn, de «llegar a todos» los diputados reacios a su renovado liderazgo y dar más poder a los miembros de la formación. Corbyn desveló su intención de otorgar más protagonismo a los simpatizantes laboristas.