Referéndum en Grecia

Choque de trenes

La Razón
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- ¿Qué razones hay detrás de la victoria del «No»?

–Existen varias razones para entender la imposición del «no». Primero la falta de un liderazgo en el campo el «sí»; mientras que estaba apoyado por todos los partidos moderados y gran parte de la élite económica, académica e intelectual, no ha tenido una figura que lo encabezara, y los líderes moderados son bastante poco populares. En segundo lugar, Tsipras ha tenido éxito a la hora de vender su pregunta; mientras que el 75% de los griegos quiere permanecer en el euro a toda costa, más del 60% han votado «No», lo que significa que una parte crucial del electorado ha rechazado que el «No» signifique «Grexit». Por último, el tiempo para hacer campaña ha sido demasiado corto (ocho días) y la pregunta ha sido demasiado larga, complicada y manipuladora; las condiciones bajo las que se ha organizado han sido criticadas en el Consejo de Europa.

- ¿Se han explicado bien la pregunta y las consecuencias a los griegos?

–Categóricamente no. El Gobierno nunca ha explicado qué pasará tras el voto del «No». Incluso ayer, los ministros dieron mensajes contradictorios sobre un posible acuerdo y en qué consistirá. Pareciera que cada uno tuviera su propia agenda, por lo que todo dependerá de Tsipras.

- Tsipras ha apelado a la dignidad, la justicia y la democracia, es un gran comunicador, pero, ¿cree que está compartiendo responsabilidad con los griegos a través del plebiscito?

–Tsipras ha construido un discurso populista en el que se presenta a sí mismo como un representante de la gente oprimida en contra de una élite extranjera hostil y un sistema político doméstico corrupto. Si él hubiera pedido el «Sí» o hubiera sido neutral estaría compartiendo responsabilidad. Pero al convocar el referéndum sobre un borrador, que ya era irrelevante pues el programa de rescate había expirado, y al ponerse a favor de rechazar la propuesta, queda claro que lo que quería es tener autoridad a un choque con los acreedores de Grecia.

- ¿Cuáles serán las consecuencias en el corto plazo para los miembros de la UE?

–Si no se llega a un acuerdo o se logra un mecanismo temporal para la provisión de liquidez, los bancos griegos se quedarán sin billetes el martes. Eso significa que al final de semana, el Gobierno griego tendrá que firmar cualquier cosa que los acreedores propongan o expedir pagarés. Los actores principales han dejado claro que no consideran a Tsipras ni a Varufakis socios fiables, por lo que o hay un giro de 180º de Tsipras o no habrá acuerdo pronto.