Estado Islámico

Daesh pierde el bastión iraquí de Tal Afar

El Estado Islámico suma una nueva derrota en Oriente Medio, mientras en Líbano Hizbulá pacta una tregua con los yihadistas, que son evacuados en camiones junto a sus familias al este de Siria

El Ejército iraquí, en Tal Afar
El Ejército iraquí, en Tal Afarlarazon

El Estado Islámico suma una nueva derrota en Oriente Medio, mientras en Líbano Hizbulá pacta una tregua con los yihadistas, que son evacuados en camiones junto a sus familias al este de Siria.

La frontera sirio-libanesa ha dejado de ser territorio dominado por el Estado Islámico y los combatientes del Frente de la Conquista del Levante, antiguo Frente Al Nusra. El Estado Islámico e Hizbulá pactaron un alto el fuego a ambos lados de la frontera, donde desde hace semanas el Ejército libanés y el sirio, junto con la propia Hizbulá, han estado luchando por el control de la zona.

En su ofensiva contra el EI, el Ejército libanés ha recuperado 100 kilómetros cuadrados de los 120 que los terroristas llegaron a dominar en la zona después de infiltrarse desde Siria. El cese de hostilidades incluye también el intercambio de prisioneros y de cadáveres de ambos bandos. Con ello había las esperanzas de traer con vida a los nueve soldados libaneses secuestrados por los extremistas en Arsal, en agosto de 2014. Por el momento, la evacuación sólo se hará del lado sirio, ya que las autoridades libanesas esperan a que sean trasladados primero los restos mortales de los soldados fallecidos.

Según el acuerdo, el Estado Islámico traslada a sus combatientes y sus familias desde la región de Al Qalamún, fronteriza con Líbano occidental, a la provincia de Deir al Zour, el principal bastión del grupo en el noreste sirio, siguiendo un dispositivo que ayer ocupó a 30 vehículos, según datos del Observatorio Sirio de Derechos Humanos.

En otra ofensiva relámpago, en la frontera con Irak, el Ejército iraquí y las fuerzas paramilitares chiíes del Movilización Popular reconquistaron la ciudad de Tal Afar. Tras una semana de duros combates las fuerzas iraquíes le arrebataron al EI uno de los últimos baluartes en Irak.

Los extremistas sólo tienen bajo su control, en esta comarca, la región de Al-Ayadiya, al noroeste de Tal Afar, y varias aldeas de la zona. Ubicado a 70 kilómetros al oeste de Mosul, Tal Afar fue desde agosto de 2014 uno de los principales bastiones urbanos del EI en la provincia de Nínive.

No obstante, el júbilo por la liberación de esta estratégica ciudad ha durado poco, pues los yihadistas celebraron su derrota con un atentado con coche bomba en el barrio bagdadí de Sadr, que dejó más de una decena de muertos. Los yihadistas no han ofrecido mucha resistencia en sus últimos bastiones y las fuerzas iraquíes han avanzado rápidamente y con facilidad en la pasada semana. Mientras, en Mosul –que el la organización terrorista Estado Islámico conquistó en junio de 2014 y fue su principal feudo en Irak hasta el pasado julio–, los radicales lucharon durante casi nueve meses, los que tardaron las tropas conjuntas en recuperar el control de la urbe, capital de Nínive y la segunda ciudad del país. Tras retomar Mosul, las fuerzas iraquíes controlan la mayor parte de la provincia, excepto algunas bolsas en Tal Afar, Al Ayadiya y sus alrededores.