Londres

EE UU confirma su lucha contra el Estado Islámico

Carter cree que el nuevo Gobierno mantendrá sus compromisos. Cospedal pedirá autorización al Congreso para enviar 125 soldados a Irak

El ministro de Defensa británico, Michael Fallon, recibe ayer en el Foreign Office a María Dolores de Cospedal antes de participar en la cumbre antiyihadista
El ministro de Defensa británico, Michael Fallon, recibe ayer en el Foreign Office a María Dolores de Cospedal antes de participar en la cumbre antiyihadistalarazon

Carter cree que el nuevo Gobierno mantendrá sus compromisos. Cospedal pedirá autorización al Congreso para enviar 125 soldados a Irak

El ministro de Defensa británico, Michael Fallon, recalcó ayer la necesidad de alcanzar un acuerdo político en Siria, donde no augura «ningún futuro político» al presidente Bachar al Asad. «No hay futuro para él, incluso si doblega a la oposición en Alepo. Bombardear hospitales y restringir la ayuda humanitaria no es una victoria», afirmó tras la reunión de la coalición internacional contra el Estado Islámico (EI). Los 14 países que formaron esta alianza en 2014, entre ellos España, se dieron cita ayer en Londres para avanzar en las estrategias contra los terroristas islamistas en Siria e Irak, así como para establecer medidas para evitar la dispersión de los combatientes yihadistas en países occidentales.

«Solventar la crisis siria significa en último término alcanzar un pacto político. Continuamos trabajando en esa dirección con la oposición moderada», dijo Fallon, que pidió «al régimen y a sus partidarios, incluida Rusia, que dejen las tácticas destructivas y retornen a la mesa de negociaciones».

El ministro británico, que actuó como anfitrión, destacó como objetivos inmediatos de la coalición el frente abierto en Raqa, bastión en Siria del Estado Islámico, así como el frente de Mosul, en Irak. «Las fuerzas democráticas sirias abrieron la semana pasada un segundo frente hacia Raqa. Han comenzado su avance y están siendo apoyadas por aviones de la coalición», describió. En cuanto a Mosul, Fallon afirmó que, cuando la ciudad sea «liberada», el trabajo «no sólo será proveer ayuda humanitaria. Tendremos que asistir al Gobierno iraquí para establecer los mecanismos adecuados para asegurar que todos los grupos étnicos y religiosos se sienten seguros en el futuro», detalló en una rueda de prensa conjunta con el secretario estadounidense de Defensa, Ash Carter. El norteamericano destacó que era necesario no sólo «acabar con el cáncer del Estado Islámico en Siria e Irak», sino también terminar con «su metástasis alrededor del mundo». Respecto a su futuro tras la elección del republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales de noviembre, Carter afirmó que compartirá «las lecciones aprendidas» con su sucesor. «Mi recomendación será que Estados Unidos permanezca como líder de esta coalición para derrotar al Estado Islámico y proteger a nuestra nación y a nuestra gente», subrayó en tono de despedida.

La ministra española de Defensa, María Dolores de Cospedal, aseguró que el martes pedirá permiso al Parlamento para enviar a otros 125 militares y 25 guardias civiles a Irak. Su salida prevista para principios del próximo año elevará a 450 el número de efectivos de España en el país árabe. En un encuentro con la Prensa en la Embajada, la ministra aseguró que el Gobierno iraquí, que estaba representado por primera vez en la reunión, se mostró «muy agradecido» con España.

Las principales funciones de las tropas, como parte de la misión «Apoyo a Irak», iniciada en 2014, serán «propiciar la estabilidad en la zona una vez termine la fase de combate que se está viviendo, ayudar y formar en la desactivación de explosivos y colaborar en la ayuda humanitaria y sanitaria», explicó. Cospedal subrayó que en ningún caso los militares y guardias civiles españoles intervendrán en operaciones de combate sobre el terreno. «Creo que España cumple con el papel que le corresponde como socio de nuestros aliados, estamos en una tarea conjunta de lucha contra el terrorismo», afirmó para insistir en que esta lucha debe ser «global». La coalición internacional contra el yihadismo volverá a reunirse en marzo en Dinamarca.