Represión en Venezuela

EE UU impone nuevas sanciones contra Venezuela

El presidente Nicolás Maduro junto al ministro de Defensa, Vladimir Padrino, durante una reunión con los jefes de las Fuerzas Armadas en Caracas
El presidente Nicolás Maduro junto al ministro de Defensa, Vladimir Padrino, durante una reunión con los jefes de las Fuerzas Armadas en Caracaslarazon

La Administración Trump anunció ayer la imposición de sanciones a diez funcionarios del Gobierno del presidente Nicolás Maduro. Su movimiento se justificó al considerar irregulares las elecciones regionales del mes pasado en Venezuela. La reacción de EE UU se produce dos días después de que la Asamblea Nacional Constituyente retirase la inmunidad al congresista Freddy Guevara, vicepresidente de la misma, controlada por la oposición desde diciembre de 2015 y le prohibiese la salida del país. El Alto Tribunal allanó el camino para juzgar a Guevara, quien se refugió en la embajada de Chile.

A través del departamento del Tesoro, se dio orden de congelar sus bienes en EE UU, negar su entrada en el país y prohibir a los estadounidenses que mantengan relaciones comerciales con los mismos. Así, el Gobierno del presidente Trump estrecha el cerco a Maduro al considerar que estos diez funcionarios socavaron la democracia, censuraron a la prensa y administraron los corruptos programas gubernamentales de suministro de alimentos. Con esta orden son ya 40 los venezolanos sobre los que la Adminsitración Trump decide aplicar diferentes castigos. Ayer fueron sancionados por «destruir el orden democrático» Sandra Oblitas, Socorro Elizabeth Hernández y Carlos Enrique Quintero, relacionados con el Consejo Nacional Electoral; Elvis Eduardo Hidrobo y Julián Isaías Rodríguez, vinculados a la Asamblea Constituyente; Manuel Ángel Fernández, que dirige la telefónica estatal; Carlos Alberto Osorio, responsable de la Misión Transporte; y los ministros Ernesto Villegas, Jorge Elieser Márquez y Freddy Alirio Bernal.

La noticia de las sanciones llegó precisamente minutos después de que la Asamblea Nacional Constituyente chavista aprobase la «Ley contra el Odio», que tiene como objetivo controlar los mensajes que emitan desde los partidos políticos, los medios de comunicación y las redes sociales. Es la primera norma de este tipo que se aprueba en Venezuela donde las sanciones por expresarse serían de hasta 20 años de cárcel para quien viole la nueva legislación. La «Ley contra el Odio» fue diseñada y promovida por el propio Maduro el 10 de agosto, cuando exigió que se superaran las campañas de odio, intolerancia y violencia, que a su juicio emiten los medios de comunicación y las redes sociales. Todo después de las manifestaciones que se dieron en Venezuela desde abril hasta julio.

«Quien públicamente incite al odio, a la discriminación y o a la violencia contra una persona, en razón de su pertenencia real o presunta a determinado grupo social, étnico, religioso o político, será sancionado con prisión de 10 a 20 años», reza el artículo 20 de la norma, uno de los más polémicos. Asimismo, estipula que podrán bloquear páginas y multar a particularidades por los mensajes que se publiquen en Facebook, Twitter o cualquier otra red social. La Organización No Gubernamental Espacio Público alertó sobre la posibilidad de que se sigan cerrando espacios de información y que de ahora en adelante particularidades sean objetos de sanción discrecional por parte de funcionarios.