Rusia

Las cinco muertes del califa Bagdadi

El Ministerio de Defensa ruso verifica si el máximo líder del Estado Islámico murió en el bombardeo del 28 de mayo a los cuarteles generales de la red terrorista en Raqa, al norte de Siria

Abú Bakr al Baghdadi
Abú Bakr al Baghdadilarazon

El Ministerio de Defensa ruso verifica si el máximo líder del Estado Islámico murió en el bombardeo del 28 de mayo a los cuarteles generales de la red terrorista en Raqa, al norte de Siria.

El líder del Estado Islámico, Abu Bakr al Bagdadi, podría haber muerto en un bombardeo a finales de mayo, según afirmó ayer el Ministerio de Defensa ruso. Aunque hay probabilidades de que Rusia esté en lo cierto, esta sería la quinta vez que se anuncia la muerte de el califa Bagdadi en los últimos años. Según el Estado Mayor ruso, cazas rusos bombardeado el 28 de mayo un centro de mando del EI próximo a la ciudad siria de Raqa, ultimo bastión que queda por arrebatar al grupo yihadista. El blanco del ataque, que aviones Su-35 y Su-34 ejecutaron en las primeras horas del 28 de mayo, fue una reunión del llamado Consejo Militar del Estado Islámico. El comunicado del ministerio señaló que entre los terroristas abatidos estaba el llamado emir de Raqa, el jefe del servicio de seguridad del EI y otro gerifaltes yihadistas que controlaba la zona entre Raqa y As Suhnah.

Por su parte, la agencia Sputnik, que también confirmó la muerte de cabecillas del EI, agregó que unos 330 combatientes perecieron en el bombardeo. Sin embargo, Moscú está todavía verificando los informes de la fuerzas aérea rusa por lo que no se puede confirmar que en el ataque mataran al líder del EI. De confirmarse su muerte sería como asentarle el golpe de gracia al moribundo Estado Islámico, que está a un paso de perder Mosul (su bastión iraquí) y a unas cuantas batallas para que le arrebaten la «capital» de facto del extinto califato.

Precisamente, los bombardeos rusos coincidieron con el inicio de la operación «Furia del Eúfrates», liderada por las fuerzas Democráticas Sirias, una amalgama de milicias kurdoárabes apoyadas por EE UU que lucha contra el EI para liberar el norte de Siria.

Así, el Ejército ruso informó de que los líderes del EI en Raqa se habían reunido con el fin de organizar convoyes de salida para los combatientes a través del corredor sur y dirigirse por el desierto de Homs hacia la ciudad de Palmira, que ha estado en manos de los yihadistas en dos ocasiones hasta que el Ejército sirio con la ayudad de Rusia la ha vuelto a recuperar.

Moscú dijo que bombardeó contra unidades del grupo yihadista que intentaban huir de Raqa los días 25, 29 y 30 de mayo. La información coincide con la agencia de noticias Amaq, altavoz del EI, que aseguró que había caído artillería pesada sobre el bastión de EI en esta ciudad y colgó en internet unas grabaciones mostrando el daño causado en la ciudad y sus alrededores. Tampoco el Pentágono ni el portavoz de la coalición internacional contra el EI que lidera EE UU pudo confirmar ayer el fallecimiento de Bagdadi. Incluso, el ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, se desmarcó de la afirmación de la posible muerte del líder yihadistas y dijo que no es «cien por cien seguro» que el emir del EI haya sido abatido en un bombardeo ruso. Sin duda, el grupo islamista está sufriendo un varapalo militar en el último año ya que en abril, fue abatido el «número dos» de la organización Ayad al Jumaili, en un ataque aéreo iraquí.