Italia

El norte de Italia, el nuevo muro para los refugiados

Renzi levantará un campo para 500 migrantes atrapados en Como, en la frontera suiza

Voluntarios reparten comida entre los refugiados en un parque de Como
Voluntarios reparten comida entre los refugiados en un parque de Comolarazon

El norte de Italia es el nuevo escenario del bloqueo migratorio en Europa. En las últimas semanas, centenares de migrantes han sido trasladados de Ventimiglia (frontera con Francia) a la ciudad de Como, asomada a Suiza, donde actualmente se cuentan unas 500 personas entre migrantes y refugiados. No han faltado momentos de tensión, ya que algunas decenas de ellos, sin billete, han intentado tomar un tren desde Como con destino a Suiza tras haber oído un rumor de que otros 200 ya lo habían hecho de madrugada. Finalmente, el tren ha sido bloqueado mediante la intervención de los antidisturbios italianos.

No obstante, las autoridades transalpinas ya han considerado la posibilidad de una zona municipal de unos 2.500 metros cuadrados a un kilómetro de la estación de tren donde serán instalados unos módulos prefabricados en los que poder acoger sólo a 300 de los 500 migrantes presentes en la ciudad lombarda. La estructura temporal, al igual que la de Ventimiglia, será gestionada por Cruz Roja en colaboración con el Ministerio del Interior italiano.

Mientras, este fin de semana las Fuerzas Armadas han rescatado a 1.850 migrantes frente a Libia. Las operaciones han salvado nueve lanchas neumáticas y cuatro viejos pesqueros. Han colaborado otros buques militares europeos y las embarcaciones de Médicos Sin Fronteras y la española Proactiva Open Arms. El Mediterráneo central contabiliza, hasta la fecha, casi 104.000 personas rescatadas en lo que va de año. «Las cifras de rescates son muy similares al año pasado. Aunque hay más ONG respecto al verano anterior, la capacidad de rescate es muy parecida», explica a LA RAZÓN Paula Farias, jefa de operaciones en el Mediterráneo de Médicos Sin Fronteras (MSF). La gran diferencia de este verano es que «hoy los rescates son más agrupados. El buen tiempo implica salidas masivas desde Libia, lo que conlleva importantes complicaciones logísticas para todos aquellos que operamos en el Mediterráneo central».

Para que todas las personas que intentan cruzar el Mediterráneo puedan reclamar derechos de asilo y refugio, según Farias, la solución pasa por «abrir una vía legal y segura para que puedan solicitar el estatus de refugiados. Europa no puede permitir que se ahogue gente en el Mediterráneo». «No se trata de que entren sí o sí a Europa, sino de que se les deje llamar a la puerta. Si esto no cambia, a la larga nos avergonzaremos de cómo nos hemos comportado, añade la representante de MSF.

La opinión pública italiana se ha emocionado estos días al conocer la historia de Ahmed, un adolescente egipcio de 13 años que salió del Nilo rumbo a Italia para curar a su hermano pequeño Farid, de 7 años, que padece una grave enfermedad sanguínea, cuya cura de 4.000 euros no es asumible para su familia. «Fue terrible ver a mi hermano salir del hospital porque mi padre no tenía el dinero suficiente para la operación», explicó al «Corriere della Sera», afirmando que fue «el dolor más grande de su vida». Con certificado médico en mano, Ahmed desafió el Mediterráneo hasta acabar en Lampedusa. Sus palabras fueron conmovedoras: «Pido ayuda a los médicos, a Italia, a quien sea. Estoy dispuesto a devolverlo todo, trabajando». Protegido ahora por las autoridades, Ahmed ya está en Florencia esperando a su familia.En lo que va de 2016, han llegado a Italia 104.000 migrantes, el 38% del total de llegadas a Europa por mar. Las principales nacionalidades son: Nigeria (18.587 personas), Eritrea (11.564), Gambia (6.855), Costa de Marfil (6.670), Sudán (6.480), Guinea (6.381), Somalia (5.079) y Mali (5.022). El dato triste es que de los 3.156 muertos que ha habido en lo que va de año en el Mare Nostrum, el 86% pertenece al canal de Sicilia. Así pues, tres de cada cinco migrantes que pierden la vida en el mundo lo hacen concretamente en el Mediterráneo central.

Desbordada «la jungla» de Calais

De acuerdo con el censo realizado por la prefectura local de Calais (norte de Francia), a finales de la tercera semana de agosto, el número de refugiados en el campamento improvisado en el puerto de esta ciudad asciende a 6.901, cifra que refleja un aumento del 53% respecto a junio, cuando las autoridades informaron de la presencia de 4.489 inmigrantes. En Calais, miles de indocumentados, que huyeron de conflictos en sus países, permanecen en el campamento a la espera de una oportunidad para cruzar el eurotúnel y poder llegar a Reino Unido. En este sentido se conoció que el incremento pudo deberse a la entrada de más migrantes entre Francia e Italia.