Refugiados

El Tribunal Supremo autoriza la aplicación del veto migratorio de Trump

El decreto prohíbe la entrada en EEUU a los ciudadanos de seis países musulmanes

Donald Trump durante un discurso en Salt Lake City
Donald Trump durante un discurso en Salt Lake Citylarazon

El decreto prohíbe la entrada en EEUU a los ciudadanos de seis países musulmanes.

El Tribunal Supremo de Estados Unidos permitió ayer la entrada en vigor por completo del veto migratorio proclamado por el presidente, Donald Trump, para prohibir la entrada al país de los nacionales de seis países de mayoría musulmana (Chad, Irán, Libia, Somalia, Siria y Yemen). En una breve orden judicial, el Tribunal Supremo aprobó una petición del Gobierno federal para que se eliminaran las restricciones impuestas por cortes inferiores a la última versión del veto migratorio adoptado el 24 de septiembre.

En el momento de su entrada en vigor, el 18 de octubre, dos jueces –primero uno de Hawái y luego otro de Maryland– bloquearon la aplicación de ese veto al considerar que podría dirigirse contra una minoría religiosa y, por tanto, violar la Primera Enmienda de la Constitución, que protege la libertad de culto. No obstante, esos jueces permitieron su entrada en vigor para Corea del Norte y Venezuela, países donde viven muy pocos musulmanes y donde, por tanto, no pudo probarse que Trump intentaba discriminar a los miembros de esa religión, el argumento usado para las otras seis naciones. Las restricciones a Venezuela no se aplican a toda la población, sino a algunos funcionarios y su «familia inmediata».

Ambos tribunales inferiores permitieron la entrada a los «extranjeros que tengan una relación de ‘bona fide’ [buena fe] con una persona o identidad en EE UU». Esta decisión provocó que se convirtiese en objeto debate el alcance del genuino «bona fide» al determinarse que se permitiría la entrada a los abuelos, nietos, cuñados, tíos, sobrinos y primos de personas que vivieran en EE UU.

Tres intentos

Sin embargo, el Supremo no dio a conocer ayer las razones para tomar su decisión, pero dijo que espera que los tribunales inferiores revisen lo antes posible los asuntos que tienen pendientes para que pueda haber una decisión definitiva a nivel federal. Las juezas progresistas Ruth Bader Ginsburg y Sonia Sotomayor se mostraron en de-sacuerdo parcialmente con la decisión del tribunal. Justo esta semana, tienen previsto celebrar audiencias para estudiar la legalidad del veto migratorio el Tribunal de Apelaciones del Cuarto Circuito, con sede en Richmond (Virginia), y el Tribunal de Apelaciones del Noveno Circuito, con sede en San Francisco (California).

Desde que llegó al poder el pasado 20 de enero, el líder republicano ha intentado hasta en tres ocasiones implementar un veto migratorio, cuya primera versión fue proclamada el 27 de ese mes. Después de un gran caos en los aeropuertos de Estados Unidos y numerosos reveses judiciales, Trump adoptó en marzo su segunda iniciativa contra refugiados y países de mayoría musulmana, que entró en vigor en marzo y que fue sustituida por ese tercer veto, proclamado en septiembre y que anoche comenzó a aplicarse por completo en seis países de mayoría musulmana.