Sucesos

La policía noruega investiga un extraño tiroteo en la Universidad de Oslo

La policía noruega investiga un tiroteo con un herido registrado hoy en la Universidad de Oslo y la posterior aparición de un objeto que asemejaba una bomba en ese mismo lugar, sin que por el momento haya indicios de trasfondo extremista o terrorista. El jefe de los servicios secretos noruegos (PST), Erik Haugland, dijo por la tarde en una rueda de prensa que "por el momento nada indica"una relación entre los hechos registrados en el campus de Blindern y entornos "extremistas o terroristas".

Además, apuntó que no hay "amenazas específicas contra la Universidad de Oslo u otras instituciones educativas"noruegas.

Haugland mostró su interés por esclarecer los "motivos tras los incidentes"de hoy, pero agregó que por el momento nada sugiere que el caso vaya a ser competencia de PST.

Poco antes de las 03.00 hora local (01.00 GMT), un guarda de seguridad de la Universidad de Oslo descubrió a dos personas a las que consideró sospechosas en el campus de Blindern y, al acercarse para identificarlos, fue tiroteado.

El guarda recibió en el pecho el impacto de una de las cinco balas del calibre 22 disparadas; otras tres le hirieron en las extremidades, según las fuerzas de seguridad.

El empleado se encuentra hospitalizado, aunque simplemente está herido de forma leve ya que vestía un chaleco antibalas, pues hace menos de un año se produjo otro ataque con armas de fuego en la universidad.

Según el testimonio del guarda, el hombre que le disparó era blanco, de 1,75 metros de altura, hablaba en inglés y llevaba una gorra roja y zapatos grises.

Posteriormente, sobre las 07.00 hora local (05.00 GMT), se descubrió en el lugar del tiroteo, frente a la facultad de Físicas, un artefacto sospechoso de ser una bomba.

El objeto, indicó la policía de Oslo, estaba "obviamente diseñado para parecer una bomba"y "para provocar miedo".

La policía acordonó de seguido la zona y cerró temporalmente a aviones y drones un espacio aéreo de dos millas náuticas (3,7 kilómetros) de radio en torno a la Universidad de Oslo.

A continuación procedió a detonar el objeto con la ayuda de un robot operado a distancia.

Según explicó en rueda de prensa el jefe de la policía de Oslo, Johan Fredriksen, el artefacto probablemente no contenía "explosivos reales", aunque se seguirán analizando los restos.

La policía ha iniciado una investigación criminal por intento de asesinato por el tiroteo del guarda y se ha hecho con las imágenes de las cámaras de seguridad, aunque aún no han sido analizadas.

Decenas de agentes han peinado la zona con perros especiales para intentar encontrar objetos personales de los agresores.

Por el momento se ha encontrado una cazadora negra que podría pertenecer a uno de los atacantes, según la policía.

El incidente de hoy es el segundo tiroteo contra un guarda de seguridad en el campus de Blindern -el mayor de la Universidad de Oslo- en menos de un año.

Tras el primer suceso, se decidió que los guardas portasen chalecos antibalas, lo que ha salvado la vida del trabajador atacado esta madrugada.