Partido Republicano

Los escándalos sexuales sacuden al Capitolio

Los casos de acoso entre los políticos de ambos partidos podrían alterar la mayoría en el Senado e impedir la aprobación de la reforma fiscal de Trump.

El congresista de Michigan John Conyers ha negado las acusaciones de haber acosado sexualmente a sus empleadas
El congresista de Michigan John Conyers ha negado las acusaciones de haber acosado sexualmente a sus empleadaslarazon

Los casos de acoso entre los políticos de ambos partidos podrían alterar la mayoría en el Senado e impedir la aprobación de la reforma fiscal de Trump.

¿Acoso sexual a menores? ¿Sexo consentido con mujeres adultas? ¿Inapropiado? ¿Tienen que dimitir o basta con pedir perdón a los votantes? Estas diferencias pueden costar un asiento o incluso dos en el Senado o la Cámara de Representantes a ambos partidos. Incluso, pueden determinar el futuro de la ansiada reforma fiscal en la agrupación de los conservadores y Wall Street. Por ello, lo que más preocupa en Washington es que los diferentes escándalos sexuales alteren la distribución de los asientos en la Cámara Alta, en manos en la actualidad de los republicanos, que mantienen la mayoría por la mínima.

El presidente Donald Trump y los líderes de la mayoría en el Capitolio Mitch McConnell, de Kentucky, y Paul Ryan, de Wisconsin, siguen de cerca el desarrollo de estas controversias sexuales, que han llegado incluso hasta al padre de George W. Bush, de 93 años, acusado de tocar el culo de una mujer de forma inapropiada.

De momento, ayer se añadió un capítulo más al del congresista republicano de Texas Joe Barton, cuando se dio a conocer que amenazó a su ex novia con denunciarla a la Policía del Capitolio si publicaba una foto que le había mandado desnudo. El republicano de Texas pidió perdón a sus votantes el día anterior, a los que aseguró que había enviado la imagen sin ropa después de separarse de su segunda mujer. Sí, quiso dejar claro que “tuve relaciones sexuales consentidas con mujeres adultas maduras. Siento no haber tenido mejor juicio durante esos días. Siento haber defraudado a mis votantes”, explicó Barton con unas palabras con las que intentó diferenciar su caso del candidato de su partido a senador de Alabama Roy Moore, acusado de haber acosado sexualmente a menores hace décadas. “Esta mujer admitió haber tenido relaciones consentidas conmigo. Cuando terminamos, me amenazó con compartir las fotos privadas en venganza”, resaltó Barton en su comunicado, mientras valora denunciar a su ex novia.

Mientras, en el Partido Demócrata, se cuenta el caso del congresista de Michigan John Conyers, que ha negado las acusaciones de haber acosado sexualmente a sus empleadas, y amenaza con emprender medidas legales contra las denunciantes. En cambio, especialmente controvertida para el partido, es la situación provocada por su senador de Minnesota Al Franken, contra el que en los últimos días han aparecido más acusaciones: dos mujeres acabar de denunciar incidentes por separado en los que el político les habría tocado de forma inapropiada.

En caso de que tuviese que dimitir de su puesto en la Cámara Alta, aumentaría la mayoría republicana que tienen en el Senado los conservadores. Por ello, el presidente Donald Trump, al que durante la campaña electoral le acusaron de comportamiento inapropiado 13 mujeres, ha cargado contra Franken, mientras ha respaldado a Moore, cuyo asiento es fundamental para que los conservadores mantengan su ventaja.