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Lufthansa se niega a explicar por qué contrató al copiloto

Los presidente de Germanwings, Thomas Winkelmann, y Lufthansa, Carsten Spohr, depositan un ramo de flores en el monolito de homenaje a las víctimas
Los presidente de Germanwings, Thomas Winkelmann, y Lufthansa, Carsten Spohr, depositan un ramo de flores en el monolito de homenaje a las víctimaslarazon

El presidente de Lufthansa, Carsten Spohr, se desplazó ayer a la zona donde nueve días antes se estrelló el vuelo Barcelona-Düseldorf de Germanwings. Fue acompañado por el presidente de la filial «lowcost», Thomas Winkelmann. La visita no fue fácil porque la víspera Lufthansa había admitido que conocían el pasado médico de Andreas Lubitz, el copiloto del A320 de Germanwings que llevó el aparato contra la montaña provocando la muerte de todos los ocupantes. La compañía alemana declaró que había entregado documentos a la Justicia que reflejan que Lubitz había informado a Lufthansa en 2009 de su «episodio depresivo severo», lo que no le impidió obtener un certificado médico de aptitud para volar así como su título de piloto. Esta noticia ponía en entredicho lo que había anunciado días antes el presidente de Lufthansa, quien declaró que el copiloto había «pasado todos los tests médicos y también los exámenes técnicos, y era apto para pilotar un avión». Sin embargo, ayer se mantuvo a la defensiva y no quiso decir ni una palabra a los periodistas que esperaban respuestas tras las revelaciones sobre los antecedentes psiquiátricos de Lubitz.

Carsten Spohr y Thomas Winkelmann llegaron en helicóptero a Seyne-les-Alpes, donde se encuentra la base logística de los equipos de socorro y de investigación que siguen trabajando en el lugar del accidente. Se reunieron con los responsables para agradecerles el trabajo que están realizando.

Después realizaron una breve visita a Vernet, el lugar donde se ha levantado una estela en memoria de las víctimas. Los dos depositaron unas flores y permanecieron durante unos minutos en silencio. «Doy mi palabra a las víctimas de que nuestra ayuda no va a detenerse esta semana. Seguiremos aportándola todo el tiempo que sea necesario», aseguró Spohr en una breve alocución en la que aseguró que las investigaciones iban a ser todavía muy largas.

Spohr tambien dio las gracias «a los cientos de personas que han hecho un trabajo formidable para ayudar durante estas últimas semanas», a los policías, a los gendarmes, a los médicos forenses y a los habitantes de la región que han facilitado la acogida de los familiares, que siguen llegando todos los días al lugar del accidente. El alcalde de Seyne-les-Alpes, Francis Hermitte, se quejó ayer en BFMTV de que «en materia de prensa habían visto y oído de todo», concretamente afirmó que algunos medios les habían pedido que contaran «lo que no habían visto ni habían hecho».