Cerco a la corrupción

Lula se sentará en el banquillo por corrupción

El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silvalarazon

El juez responsable de la investigación del gigantesco escándalo de desvíos en la petrolera brasileña Petrobras aceptó ayer los cargos formulados contra el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva por lo que será procesado por corrupción y lavado de dinero. El juez federal Sergio Moro aceptó la denuncia formal presentada la semana pasada por la Fiscalía contra Lula, a quien acusa de haber recibido 3,7 millones de reales (un millón de euros) en favores de una de las empresas beneficiadas por los desvíos en la petrolera estatal.

La decisión también convierte en reos a la esposa del ex mandatario, Marisa Leticia Lula da Silva; al presidente del Instituto Lula, Paulo Okamoto, al ex presidente de la constructora OAS Leo Pinheiro y a otros cuatro ejecutivos de esa empresa.

Los investigadores sospechan que Lula aceptó un tríplex de lujo en Sao Paulo como pago de una de las constructoras que se beneficiaron de la trama en Petrobras, que consistía en cobrar comisiones a cambio de contratos públicos. Lula, sin embargo, niega cualquier delito. «Prueben una corrupción mía y me iré a pie para ser encarcelado», proclamó la semana pasada en un discurso en el que lloró tres veces.

Esta causa no es la única abierta contra Lula, puesto que tiene pendiente otra investigación por un supuesto delito de obstrucción a la Justicia. En este caso, se analiza si intentó comprar el silencio del ex director de Petrobras Nestro Cervero, uno de los delatores de la «operación Lava Jato». Efe