Brexit

Partida de póquer

La Razón
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Tras una tercera reunión sin resultados concretos, ¿qué se espera de la negociación? ¿Está en vía muerta?

–Se ha avanzado muy poco en estos meses y cada vez queda menos tiempo para negociar. Se está llegando a acuerdos en temas como la convalidación de títulos académicos, que ahora es automática, o en la necesidad de una alternativa a la tarjeta sanitaria europea. Pero aún queda mucho camino por delante en temas principales como la ciudadanía, la factura a pagar por Reino Unido, las fronteras y el mercado común.

¿Debería Reino Unido pagar la factura pendiente con la Unión hasta 2020?

–Hay que entender esta negociación como una partida política de póquer. La Unión Europea presionará con lo que pueda y Reino Unido, que está en una posición mucho más delicada, hará lo mismo. Los que defendieron el Brexit están ahora contra las cuerdas porque vendieron a sus ciudadanos que permanecer en la UE constaba mucho dinero y que si salían no tendrían que pagar nada. Ahora debe explicar por qué tienen que pagar miles de millones a la UE para efectuar esa salida. Pagarán más por irse que por quedarse. También tendrán que explicarles que quizá tengan que abonar una parte proporcional de las pensiones de los funcionarios de la UE de todos los países y no sólo las de los británicos.

¿Qué consecuencias tendría un «Brexit desordenado», como ayer apuntó Barnier ante Davis?

–Si no se ponen de acuerdo en los temas importantes y llegase la fecha de salida de Reino Unido de la UE, nadie sabría cómo actuar. Habría una incertidumbre total en la relación entre ambos en todos los ámbitos que se debaten. En materia del mercado común, por ejemplo, Reino Unido saldría del mercado de la UE, lo que significa que volvería a regirse por la Organización Mundial del Comercio y a tener aranceles.