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Presión socialista para que Hollande no sea candidato

Un grupo de diputados pide que no se presente a la reelección

El presidente galo, François Hollande, ofrece un discurso durante la presentación del nuevo centro de conexión de FedEx Express en el aeropuerto Roissy Charles de Gaulle en París (Francia) el pasado día 18 de octubre de 2016
El presidente galo, François Hollande, ofrece un discurso durante la presentación del nuevo centro de conexión de FedEx Express en el aeropuerto Roissy Charles de Gaulle en París (Francia) el pasado día 18 de octubre de 2016larazon

Un grupo de diputados pide que no se presente a la reelección

El libro «Lo que un presidente no debería decir...», con las confidencias de François Hollande a dos periodistas a lo largo de su mandato presidencial y los sondeos cada vez más catastróficos (14% de popularidad, según la última encuesta IFOP-JDD) han llevado a un grupo de parlamentarios socialistas a pedir al presidente de la República que no se presente a su reelección, según ha confirmado la senadora Marie-Noëlle Lienemann.

Pero, Hollande, de carácter optimista, no ha perdido la esperanza y sigue acariciando la posibilidad de presentar su candidatura. Si el desmantelamiento de la jungla de Calais, como parece, resulta un éxito, podrá ser un buen trampolín. Ahora le falta las cifras del paro, condición «sine qua non» para poder aspirar a un segundo mandato porque él mismo ha repetido en varias ocasiones que sólo será creíble su candidatura si baja el paro durante su quinquenio.

En abril de 2014 Hollande concretó que «si el paro no baja de aquí a 2017, no tengo ninguna razón de ser candidato para un segundo mandato». Este verano, durante su intervención con motivo de la Fiesta Nacional del 14 de Julio, el presidente de la República aseguró que Francia iba «mejor» y que habría «una inversión de la curva del paro antes de que acabe el año». Pero dos meses después, las cifras de desempleo de septiembre cayeron como un jarro de agua fría: 50.200 parados suplementarios, lo que hace un total de 3,56 millones, la cifra más elevada desde enero de 2013.

El Gobierno socialista achacó este mal resultado a los atentados de julio, que habían dañado el sector turístico en Francia, y también pudo decir que desde que ha comenzado el año, el desempleo ha bajado, con 23.700 parados menos, y también en el conjunto del año transcurrido (10.900).

Ahora Hollande cuenta con que las cifras de este mes, y del que vienen confirmen esta tendencia. El inquilino del Elíseo se ha dado como plazo hasta el mes de diciembre para decir si se presentará o no a su reelección. Son pocos, pero hay todavía algunas personas del entorno del presidente socialista, como Julien Dray, que esperan que dé una respuesta «positiva». Según Dray, «todo lo que está ocurriendo» le da a Hollande «ganas de combatir, de luchar» por un segundo quinquenio.

Líder en dificultades

- Impopularidad. Hollande bate récords de impopularidad entre los presidentes de la V República (14%).

- Desempleo. El paro en Francia es más elevado que cuando Hollande llegó al Elíseo en 2012.

- División de la izquierda. Crece el malestar socialista frente a Hollande, mientras crecen los candidatos en el resto de la izquierda.