Reino Unido

Lo que dijo May a Goldman Sachs y oculta ahora a los británicos

Antes del referéndum temía que las empresas abandonaran Reino Unido en caso de Brexit

Theresa May, sale de Downing Street, hoy miércoles
Theresa May, sale de Downing Street, hoy miércoleslarazon

Antes del referéndum temía que las empresas abandonaran Reino Unido en caso de Brexit

Desde el mismo momento en que puso un pie en Downing Street, Theresa May ha sido vista como una gran estratega. Pese a que perteneció al bando que apostaba por la permanencia, sus apariciones públicas durante la campaña previa al referéndum del Brexit fueron casi inexistentes. Sin peso a sus espaldas, pudo por tanto presentarse como la persona que necesitaba el Partido Conservador para unificar sus filas. Y consiguió el sueño de convertirse en primera ministra. Pero la tibieza seguía ahí. Nadie sabía con seguridad lo que opinaba realmente May sobre la salida del bloque. Hasta ayer, cuando el rotativo «The Guardian» sacó a la luz unas grabaciones de un encuentro privado que la hoy líder «tory» mantuvo con ejecutivos de Goldman Sachs, tan sólo un mes antes del plebiscito.

«Los argumentos económicos están claros. Formar parte de un bloque comercial de 500 millones de personas es significativo para nosotros», recalcó. Las palabras causaron ayer gran revuelo en Westminster, ya que precisamente ahora May es criticada por no priorizar el mercado único. Desde que se puso al frente del Ejecutivo, May, presionada por los «tories» más euroescépticos, ha dado prioridad a recuperar el control de las fronteras. Sin embargo, en mayo dejaba muy claro cuáles eran los beneficios del mercado comunitario para la economía británica. «Creo –dice en la grabación– que uno de los temas es que mucha gente invertirá en Reino Unido porque está en Europa. Si no estuviéramos en Europa, creo que habría compañías dispuestas a estudiar si necesitan desarrollar una presencia en la Europa continental más que en Reino Unido. Así que creo que hay beneficios claros para nosotros en términos económicos. No deberíamos votar para tratar de recrear el pasado. Deberíamos votar por lo que es bueno para el futuro».

El laborista Keir Starmer, portavoz del Brexit en la oposición, lamentó que May se niegue ahora a dar «prioridad a la economía y el empleo» después de haberlo considerado «esencial». Por su parte, el líder liberal demócrata, Tim Farron, criticó el hecho de que «ahora que está al mando ignore sus propias advertencias».

Desde Downing Street insistieron en que la «premier» está dispuesta a llevar a cabo el deseo de los británicos. «Reino Unido ha votado claramente por abandonar la UE y este Gobierno está decidido a convertir en éxito las nuevas oportunidades que se presentan», especificó un portavoz tras la publicación de las grabaciones. «Queremos una salida de la UE suave y ordenada, que sea en el interés tanto de Reino Unido como de la UE», matizó. Las constantes concesiones a los ministros más euroescépticos se han interpretado como que May podría apostar por un «Brexit duro» dejando al país también fuera del mercado único.