Caso Pujol

La Fiscalía investiga el contrato de Marta Pujol con un ayuntamiento

Marta Pujol Ferrusola durante su comparecencia ante la comisión de investigación del Parlament
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La investigación sobre la familia Pujol prosigue, y ayer la protagonista de las pesquisas fue una de las hijas del ex presidente de la Generalitat, Marta Pujol. La Fiscalía abrió una investigación sobre la contratación de Marta Pujol Ferrusola como arquitecta municipal del Ayuntamiento de Sant Vicenç de Montalt (Barcelona), sin haber accedido a la plaza por concurso.

Según el Ministerio Público, la fiscal jefe del área de Mataró ha incoado diligencias para investigar el caso, tras trascender que la hija de Pujol ocupa desde 1996 una plaza de arquitecta en el consistorio por un contrato que estuvo vigente hasta 2004 –con una prórroga de dos años más– y que no consta que se haya renovado.

Se abrió esta investigación a raíz de la denuncia que le remitió Nou Sant Vicenç, el principal partido de la oposición, después de que el Ayuntamiento, gobernado por CiU y PSC, iniciara la redacción de las bases del proceso de selección del puesto de funcionario técnico superior de ingeniería que ahora ocupa Marta Pujol.

¿Indicios de delito?

En su investigación, que es secreta, el Ministerio Público tratará de averiguar en qué condiciones contractuales ejerce como arquitecta la hija de Pujol y si actualmente existe un contrato laboral que la ampare, por si de ese proceso pudieran desprenderse indicios de delito.

Según la denuncia, la hija mayor del ex presidente de la Generalitat firmó un contrato como arquitecta el 3 de abril de 1996 –con una jornada de 9 horas semanales y un sueldo de 2.264,17 euros–, que expiró en 2006, tras la citada prórroga.

En su comparecencia en la comisión del Parlament que investiga la fortuna oculta por su familia, Marta Pujol admitió el pasado lunes que fue empleada en 1996 gracias a un acuerdo del pleno municipal del consistorio, gobernado entonces por CiU y ERC, y que ese contrato tenía una vigencia de cuatro años que se prorrogó por otros cuatro, hasta 2004.

Según la versión de Marta Pujol, fue contratada en 1996 porque el Ayuntamiento de Sant Vicenç de Montalt la «fue a buscar» al de Sant Andreu de Llavaneres, dirigido entonces por Víctor Ros (PP) y en el que trabajaba como arquitecta desde 1987.

Marta Pujol precisó que su contrato es por quince horas semanales, aunque en realidad «trabaja más», y reconoció que en el pliego de condiciones estaba especificado que podía optar a adjudicaciones públicas del consistorio, como los proyectos de un centro cívico y una guardería que el ayuntamiento le encargó.