Educación

La Formación Profesional se consolida con 2.800 nuevas plazas

Las oferta se mantiene estable con 140 especialidades. Cataluña inicia la transformación hacia la FP dual que impera en Europa

La formación profesional dual es la nueva apuesta para impulsar esta opción educativa
La formación profesional dual es la nueva apuesta para impulsar esta opción educativalarazonfreemarker.core.DefaultToExpression$EmptyStringAndSequenceAndHash@42e06ab2

Las oferta se mantiene estable con 140 especialidades. Cataluña inicia la transformación hacia la FP dual que impera en Europa

Todavía arrastra prejuicios, como la de ser vista como una opción de segundo nivel, relegada a los malos estudiantes que no tienen la capacidad intelectual necesaria para enfrentarse a una licenciatura. La crisis, la pedagogía y los buenos resultados que ha dado en otros países del entorno está consiguiendo, afortunadamente, eliminar estigmas y abrir camino a la Formación Profesional, presentándola como un camino de más fácil recorrido para acceder al mercado laboral. Los datos a este respecto son claros: el 21 por ciento de la oferta laboral cualificada demanda este tipo de formación (Informe Adecco de Empleabilidad y Formación Profesional) y su tasa de paro en el punto álgido de la recesión no llegó al 7 por ciento mientras que en los universitarios alcanzó el 14 por ciento (Observatorio Inversis Banco). A tener en cuenta también es el grado de satisfacción de sus alumnos, mucho más elevado que en el caso de los licenciados.

La FP se está convirtiendo en una palanca para salir de la crisis, una apuesta de futuro que requiere de los esfuerzos de la administración para conseguir impulsarla y elevarla a niveles europeos. Así, en la comunidad catalana se ofrecerán 4.000 plazas más para cursar estudios post obligatorios el próximo año, de las cuales 1.020 están destinadas a los grados medios y 1.163 a los superiores, según explicó ayer la consellera de Enseñanza, Irene Rigau.

Las matriculaciones en los ciclos formativos han crecido como la espuma y se corre el peligro que una buena parte de los alumnos se queden sin plaza: 12.000 alumnos más que hace cuatro años se matricularon el año pasado y se espera que la tendencia a la alza continúe. Lo que se mantiene estable es el espectro de las 140 especialidades de formación, si bien se están empezando a adaptar a las necesidades de las empresas. Tal es el caso de la especialización en bioinformática, creada tras el la investigación de la Universidad Autónoma de Barcelona que puso de manifiesto la carencia de este nicho en el mercado.

A pesar de los incipientes esfuerzos de la conselleria para impulsar la formación profesional, todavía dista mucho de estar a los niveles europeos. Sólo un 3 por ciento de los cursos que se imparten en los centros tiene prácticas remuneradas de jóvenes en empresas, una cifra de FP dual muy alejada de los niveles de Alemania (60 por ciento) y Francia (40 por ciento).

Pero antes de abordar el cambio de modelo que requiere la Formación Profesional, primero se requiere atajar la alta tasa de abandono escolar que sufre tanto España como la comunidad catalana. Rigau reconoció que el índice de abandono prematuro en los estudios es uno de los más altos de Europa, si bien quiso salir por la tangente asegurando que Cataluña «se distancia» de esta tendencia , ya que también repiten curso un 4,4 por ciento menos de estudiantes.

Con respecto a las plazas de bachillerato, la consellera anunció 1.155 más para el próximo curso y un ligero incremento de la presencia de los bachilleratos de modalidades. El artístico sólo se impartirá en tres centros más, el plurilingüe en 16 nuevos institutos y como novedad, este año se impartirá en tres centros públicos la modalidad de bachillerato internacional.