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La Princesa de Asturias, tras recibir la Primera Comunión: «Estaba muy nerviosa»

La Princesa de Asturias tras recibir la Primera Comunión
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Recibió emocionada la Primera Comunión como una alumna más de su colegio. Tras la misa se acercó a los periodistas y aseguró que celebraría el día «en casa» con su familia.

Máxima discreción y privacidad en la Primera Comunión de la Princesa Leonor para que se sienta una más entre sus compañeros del colegio. Esa ha sido la máxima de la Casa del Rey desde que se conoció la fecha en la que la heredera del Trono recibiría el santo sacramento. Y así se cumplió ayer, hasta el punto de que, a primera hora de la mañana, una bandera del principado de Asturias en un balcón era el único indicativo de que Doña Leonor iba a poner un pie dentro de la parroquia Nuestra Señora de la Asunción de Aravaca.

Eso sí, conforme se fue acercando la llegada de la Familia Real medio centenar de vecinos fue agolpándose tras la verja de la iglesia para recibirlos. En su mayoría, personas mayores y jubilados, al celebrarse la comunión en un día de diario, como es normal en el centro escolar. Una vez que la veintena de compañeros de la Princesa de Asturias y sus respectivos familiares estuvieron sentados en los bancos, fue cuando llegaron los vehículos de la Corona, desde los que descendieron los Reyes con sus dos hijas. Por parte paterna, acudieron los Reyes Don Juan Carlos y Doña Sofía y, por parte materna, los padres de Doña Letizia, Jesús Rocasolano con su segunda mujer, Ana Togores, la madre de la Reina, Paloma Rocasolano, y la bisabuela de Doña Leonor, Menchu Álvarez del Valle.

Tal y como informó este periódico, el sacerdote que ofició la misa fue el capellán del colegio, fray Javier, durante la aproximada hora que duró la ceremonia. El mismo que les impartió las clases de catequesis a los alumnos del colegio durante los dos años de preparación. La clase de Doña Leonor, el grupo B de 4º de Primaria.

A la salida, los Reyes se acercaron con sus hijas para posar frente a las cámaras, y luego se unió el resto de la familia. Una sonriente y desenvuelta Princesa de Asturias, con cierto vestigio de timidez, respondió a la pregunta de los periodistas de si estaba contenta en día tan especial. «Sí», afirmó. Tras unos segundos dubitativos, añadió: «Estaba muy nerviosa». La Casa del Rey informó de que, tras la Comunión, habría una comida y una celebración familiar en el Palacio de la Zarzuela, lo que corroboró la propia Doña Leonor: «Lo voy a celebrar en casa». A diferencia de cuando su padre hizo la Primera Comunión dentro del Palacio de la Zarzuela, en que sí se detallaron los asistentes e incluso se publicaron algunas imágenes, la Corona no informó en esta ocasión al considerarlo un acto privado.

Doña Leonor no fue la única que habló con los periodistas; su hermana, que al igual que su padre iba vestida combinando los colores del colegio –azul y amarillo–, aseguró haber visto «bien» a su hermana mayor.

Ni vestido de organdí, ni diadema de flores, ni adornos. Cumpliendo con la tradición del colegio, Doña Leonor vistió el mismo uniforme del centro que viste a diario, sólo que para esta ocasión se sustituyó el jersey por una «blazer» con con el escudo el colegio en la solapa izquierda y una camisa debajo. Según informaron antiguas alumnas del centro a este periódico, el motivo es «evitar un desfile de modelos». El que todos los alumnos vayan vestidos de igual modo para evitar diferencias se cuida a lo largo del año: «Hubo una vez que hasta se pensó que todas llevásemos el mismo husky en invierno».

A pesar de que el colegio ofreció a los Reyes la posibilidad de ocupar un lugar preferente en las 22 filas de bancos de la austera y reducida parroquia, los Reyes quisieron que su hija fuera una más en todos los sentidos: al ubicarse los los padres por orden alfabético, Don Felipe y Doña Letizia, junto con la Infanta Sofía, se sentaron en la segunda bancada como corresponde a su apellido Borbón. El resto de la familia, lo que incluyó a Don Juan Carlos y a Doña Sofía, ocuparon los bancos de detrás como el resto de allegados a los alumnos que recibieron su Primera Comunión.

Por su parte, los alumnos se distribuyeron en torno al altar, desde donde realizaron sus peticiones. La Princesa Leonor, además, leyó el salmo durante la ceremonia, en la que cantó el coro del colegio, formado por los alumnos de Secundaria. Sus voces sólo tuvieron el apoyo instrumental del piano. A lo largo de esta semana, los niños de las otras dos semanas también han recibido y recibirán el santo sacramento. Hace aproximadamente un mes, realizaron su primera confesión. Don Felipe y Doña Letizia, al igual que el resto de los padres, quisieron estar junto a su hija en momento tan señalado.

Tal y como informó la Casa del Rey –y la Princesa de Asturias–, el escenario para celebrar tan señalada fecha fue el Palacio de la Zarzuela, que Don Juan Carlos tuvo que abandonar a media tarde para asistir a la corrida de la Asociación de la Prensa en la plaza de toros de Las Ventas.