Lifestyle

Elena de Borbón cumple 54 años

La infanta se encuentra en una etapa de su vida muy discreta, cuando se cumplen diez del anuncio de su divorcio con Jaime de Marichalar

La Infanta Elena pasará su cumpleaños con sus hijos y sus padres
La Infanta Elena pasará su cumpleaños con sus hijos y sus padreslarazon

La infanta se encuentra en una etapa de su vida muy discreta, cuando se cumplen diez del anuncio de su divorcio con Jaime de Marichalar.

La Infanta Elena cumple hoy 54 años. A la hermana mayor de Felipe VI, más que divertirla, digamos que se resigna a ello. Aunque no llega a no celebrarlo como su ex marido, Jaime de Marichalar, al que no le gusta ni cumplir años ni festejarlos. No está prevista ninguna fiesta sorpresa, como la que se le organizó en casa de sus padres cuando cumplió cincuenta años. Lo probable es que almuerce con los Reyes Eméritos y sus hijos, Victoria Federica y Felipe Froilán, en La Zarzuela. Quizá, por la tarde, vaya a los cines Renoir de Retiro, ya que es muy aficionada a su programación en versión original, le divierten las películas de miedo, y a eso de las once de la noche o como muy tarde las doce, suele poner rumbo a casa para descansar.

Y si algún rezagado piensa en regalarle algo, las flores de Casa Florida son sus favoritas, concretamente, las peonías y los bouquets que allí preparan con capullos de rosas. Pero si realmente quiere quedar divinamente con la Infanta, lo mejor es regalarle cosas para la cocina. Le gusta guisar, especialmente repostería, lo que no quiere decir que se haga ella misma su pastel de cumpleaños porque no es de tartas, si acaso toma un pedacito. No usa azúcar ni harina refinadas, es más de repostería saludable. Por ejemplo, para el último rastrillo de Mapfre, donde ella trabaja, hizo unos panes de harinas especiales y magdalenas con la bandera de España, una capa roja, otra amarilla y otra roja. El pan que se come en casa de la Doña Elena lo hace ella misma porque tiene su panificadora, que fue un regalo de cumpleaños de hace algunos años, y hornea sus propios panes con forma de bollo, que son de textura abizcochada porque no es la típica barra de pan normal, y le gusta probar con distintas harinas como la de trigo sarraceno y si tiene que endulzar algo, se decanta por la estevia en vez de azúcar. No toma sacarina y aunque tampoco es una fundamentalista de lo saludable porque si tiene que comer un churrasco lo hace. Posiblemente hoy, que cumple 54 años, ella que es muy prusiana, haya empezado el día haciendo ejercicio y luego su desayuno haya sido un par de tostadas de su pan saludable con loncha de pavo y algo de fruta. No toma bebidas carbonatadas. La única burbuja que entra en su cuerpo son las del champán.

Productos ecológicos

A la Infanta Elena, más que regalos, le gustan los cacharros de silicona para hornear y algún accesorio de fotografía, le entusiasma hacer instantáneas. No es de grandes regalos y le gusta ir de compras a tiendas normales e incluso de bajo coste, como el súper chino que hay en Getafe o ir con su amiga Rita Allendesalazar al supermercado americano Cosco y al huerto de Lucas porque venden productos ecológicos. No es una loca de las marcas, pero sí funcional. Alguna vez que va, por ejemplo, a Mango o a Zara, se hace sus apaños de traje de chaqueta combinable con todo. La primogénita de los eméritos llega a una etapa de su vida que supone un momento de inflexión, con los hijos mayores y con la vida oficial y personal aligerada. Lleva seis años separada del núcleo duro de la Familia Real, y ahora es Familia del Rey, y lleva siete años divorciada del padre de sus hijos, Jaime de Marichalar. Aunque realmente son diez porque «el cese temporal de la convivencia» tuvo lugar tres años antes, cuando ella se instaló en una casa que le prestó un amigo en Fuente del Berro en Madrid. Doña Elena se mantiene soltera y sin compromiso aparente aunque haya tenido en este tiempo de soltería sus «ilusiones» porque es infanta, pero también humana.