Casas reales

La familia real sueca bautiza al príncipe Óscar

El segundo hijo de la princesa Victoria, tercero en la línea de sucesión al trono, ha sido bautizado hoy ante más de 400 invitados en la Iglesia del Palacio Real de Estocolmo

El rey de Suecia acaricia a su nieto Óscar, hijo de Victoria
El rey de Suecia acaricia a su nieto Óscar, hijo de Victorialarazon

Suecia ha vivido hoy una esperada jornada de celebración: el Bautizo Real de Óscar de Suecia. El segundo hijo de los príncipes Victoria y Daniel ha recibido las aguas bautismales en una ceremonia oficiada por la arzobispa Luterana, Antje Jacklén, habiendo ejercido como padrinos Federico y Mette-Marit, además de la princesa Magdalena de Suecia, Oscar Magnuson -primo de Victoria- y Hans Astrom -primo de Daniel-.

El acto arrancó a las 11 de la mañana, hora a la que han ido accediendo los invitados por orden de protocolo. Seguidamente, a las 12, dio comienzo el servicio bautismal, a lo que siguió de 1 a 2 del mediodía una recepción en palacio y un almuerzo para toda la familia, principales autoridades y representantes de las demás casas reales escandinavas.

Como era de esperar y siguiendo la tradición, el cuarto nieto de los Reyes de Suecia ha recibido las aguas baustismales procedentes de la isla sueca de Öland. Además, como hicieron en su momento su abuelo, su madre y todos sus primos, el pequeño Duque de Skane ha lucido el mismo vestido con el que fue bautizado su bisabuelo, el príncipe Gustavo Adolfo, en 1906. El nombre del pequeño también ha sido grabado en la centenaria prenda, ya que como manda la tradición desde 1935 -desde el nacimiento de la princesa Margaretha- el nombre de cada portador debe ser bordado en la misma en una capa de seda satén.

Achuchones y piruetas

Estelle, hermana mayor del recién bautizado, ha asistido a la ceremonia junto con sus primos Leonor y Nicolás, hijos ambos de la pricesa Magdalena y su marido Christopher O'Neill. Se ausentó, no obstante, Alejandro, primogénito de los príncipes Carlos Felipe y Sofía, de dos meses de edad.

Los pequeños han acaparado la atención de las cámaras durante el acto. Así, hemos podido ver el aluvión de achuchones que la princesa Estelle ha dedicado a su abuela paterna, mientras que una revoltosa Leonor ha hecho muestra en la alfombra roja de sus dotes haciendo piruetas, aunque acto seguido ha caído de cabeza de su sillón. Parece que el chupete fue al final lo único que pudo mantenerla calmada hasta el final.

De este modo, los príncipes Victoria, de 38 años, y Daniel, de 42, han bautizado a su segundo hijo seis años después de su enlace matrimonial, unión que se celebró en la catedral de San Nicolás de Estocolmo tras un noviazgo de diez años que se inició cuando la princesa se enamoró del que era entonces su entrenador personal.