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Misha Nonoo: Así hizo de celestina del príncipe Harry y Meghan

La diseñadora de moda, amiga común de los novios, fue la encargada de preparar una cita a ciegas en junio de 2016 para que se conocieran. Divorciada y residente en Nueva York, podría ser también la persona en la que Markle confíe para diseñar su vestido de novia

La diseñadora junto a su ex marido, Alexander Gilkes, antiguo amigo de la infancia del príncipe Harry
La diseñadora junto a su ex marido, Alexander Gilkes, antiguo amigo de la infancia del príncipe Harrylarazon

La diseñadora de moda, amiga común de los novios, fue la encargada de preparar una cita a ciegas en junio de 2016 para que se conocieran. Divorciada y residente en Nueva York, podría ser también la persona en la que Markle confíe para diseñar su vestido de novia.

Desde que el príncipe Harry anunciara su compromiso con Meghan Markle, todo el mundo se hace la misma pregunta:¿quién es la misteriosa mujer que presentó a la pareja? El mismo día en el que se anunció la que será la boda de 2018, los novios, siguiendo la tradición, concedieron una entrevista a la BBC para contar su historia de amor. Y fue ante las cámaras cuando revelaron que se habían conocido en julio de 2016 durante una cita a ciegas organizada por una amiga en común. Lo único que preguntó entonces la actriz cuando le propusieron aquella cena era si Harry, del que asegura no sabía nada, era amable.

Particular cupido

Los novios no quisieron revelar el nombre de su particular cupido –«respetaremos su privacidad», dijo Meghan–, pero la búsqueda por conocer la identidad de la misteriosa mujer era inevitable y el nombre de la diseñadora de moda Misha Nonoo, que nació en Bahrein, es ahora el que acapara los titulares. Lo cierto es que cuando el romance salió a la luz, se pensó que Markus Anderson, un consultor canadiense de Soho House amigo de la intérprete, había sido quien hizo la presentación. Sin embargo, durante la famosa entrevista de la BBC, la pareja dijo que se trataba de una mujer.

Violet von Westenholz, quien ha sido amiga de Harry desde que ambos eran adolescentes, también sonaba como candidata. Su padre es el barón Piers von Westenholz, un ex esquiador olímpico y amigo cercano del príncipe Carlos, y ella, de 33 años, los mismos que Harry, es directora de relaciones públicas de Ralph Lauren para mujeres. También se trata una buena amiga de Meghan. De hecho, ambas compartieron una fotografía juntas en Wimbledon el 4 de julio de 2016. Por aquellas fechas, Meghan ya habría conocido al hijo menor de la desaparecida Diana. Cuando la prensa británica preguntó esta semana a Violet, una figura habitual en las fiestas más glamurosas de Inglaterra, si había actuado de cupido, se limitó a contestar: «Eso se lo dejo decir a otras personas». ¿No negar la noticia es confirmarla? Podría ser. Aunque los rotativos dan más credibilidad a la opción de Misha como «la casamentera». La diseñadora cuenta además con un perfil más atractivo, ya que estuvo casi emparentada con la mismísima Pippa Middleton, hermana de la duquesa de Cambridge, a la que en su día se relacionó también con Harry cuando sus posaderas de dama de honor acapararon toda la atención en la boda de William y Kate. En definitiva, el morbo siempre atrae. Y, además, Meghan tiene muchas más fotos colgadas con Misha en sus redes sociales, que dejó de actualizar el pasado mes de abril por razones ahora obvias. De hecho, la intérprete posó con la modista y el entonces marido de ésta en Madrid, donde acudieron de vacaciones en el verano de 2016, el mismo en el año que comenzó su relación con Harry.

Pero, ¿quién es ella? Misha, de 31 años, se casó en Venecia en 2012 en una boda de tres días con Alexander Gilkes, un amigo de Harry de la infancia. Ambos acudieron al prestigioso colegio de Eton. Alexander fue uno de los invitados a la boda real de los duques de Cambridge en 2011. Éstos estuvieron luego invitados a su enlace con Misha en Venecia y aunque no pudieron acudir –Kate sufría las molestias de su primer embarazo–, sí asistieron las princesas Eugenia y Beatriz, además de James Middleton.

La diseñadora, que vive en Nueva York, guarda muy buena relación con la princesa Eugenia, que pasó un tiempo trabajando en la empresa de su ex marido, Paddle8, en los Estados Unidos, así como Emma Watson, Cate Blanchett o la hija del cantante Bono. Pero en particular tiene una relación muy especial con Meghan. De hecho, la actriz llevó uno de sus diseños –la famosa camisa blanca estilo masculino– en la primera aparición pública que hizo con Harry como pareja en los Juegos Invictus en Toronto de septiembre. Aquel día hizo saltar todas las alarmas ante un posible compromiso, como finalmente ha ocurrido. En 2015, Meghan también lució un minivestido de estilo esmoquin plateado diseñado por ella para la cena del Consejo de Diseñadores de Moda de América. En la entrevista que «Vanity Fair» de octubre donde la actriz confirmaba su romance, aseguraba de su amiga: «Su mayor fortaleza es su compasión por los demás. Gran parte del trabajo que hace es invisible para el público».

La diseñadora tampoco se queda corta en elogios, cuando el mes pasado le preguntaron por Meghan en una entrevista: «Ella tiene el espíritu más extraordinario y generoso. Aspiro ser tan filantrópica como ella y tener tanto impacto como Meghan. Es obvio que su relación es estrecha, por lo tanto, ya son muchos los que apuntan a que Misha, además de cupido, se podría convertir también en la diseñadora elegida para el vestido de novia para el gran evento que tendrá lugar en mayo de 2018 en la capilla de San Jorge.

Naturaleza salvaje

El hijo menor de Diana siempre ha sido uno de los miembros más populares de la Casa Windsor. Mientras su hermano William fue más comedido, discreto y responsable, Harry era el que tenía fama de gamberro, divertido y pasional. Claro que su naturaleza salvaje también le ha llevado a protagonizar episodios realmente polémicos. En 2002, desde palacio confirmaron que, a sus 17 años, el príncipe había experimentado con el alcohol y el cannabis. Tres años después, protagonizaba otro escándalo al disfrazarse de soldado nazi en una fiesta, algo que volvió a situarle en el centro de atención, como cuando se publicaron fotos disfrutando desnudo de una fiesta loca en Las Vegas.

Pasó una década en el Ejército. Su estancia en el cuerpo le llevó a servir en Afganistán hasta en dos ocasiones, sacarse el título de piloto de helicóptero Apache e incluso disparar contra los talibanes, como reconoció en 2013. Pero tras su salida en 2015, su futuro quedaba un poco confuso. Sobre todo, teniendo en cuenta que con la llegada en primavera del tercer retoño de los duques de Cambridge pasará a ser sexto en la línea de sucesión. El propio Harry llegó a cuestionar durante una entrevista si alguien en la Familia Real quería ser rey o reina. «No lo creo», afirmó. En mayo de 2016, también manifestó su frustración a la hora de establecer relaciones: «Si encuentro una novia o no, haré todo lo que pueda para asegurar que los dos podamos llegar al punto en el que nos sintamos cómodos el uno con el otro antes de la invasión masiva que inevitablemente va a pasar en su privacidad», aseguró. Tan solo un par de meses después de aquellas declaraciones conoció a Meghan. La actriz apareció en el momento correcto, cuando Harry había logrado poner fin al «caos total» que reinó en su vida durante su juventud al tratar de afrontar la muerte de su madre. Antes de Markle, Harry tuvo dos noviazgos serios con Chelsy Davy y Cressida Bonas. Ambas dejaron la relación al no ser capaces de aguantar la presión mediática. Un problema que no tendrá Meghan, más acostumbrada a los focos. Parece que al final Harry ha encontrado su camino.