Londres

Doña Letizia en Londres: Una maleta de 24.500 euros

A pesar de que la Reina repitió en Londres dos conjuntos, además de zapatos y bolsos, los vestidos hechos a medida por Felipe Varela y el Carolina Herrera que lució el jueves aumentan significativamente el monto de lo invertido en ropa para este viaje

Doña Letizia en Londres: Una maleta de 24.500 euros
Doña Letizia en Londres: Una maleta de 24.500 euroslarazon

A pesar de que la Reina repitió en Londres dos conjuntos, además de zapatos y bolsos, los vestidos hechos a medida por Felipe Varela y el Carolina Herrera que lució el jueves aumentan significativamente el monto de lo invertido en ropa para este viaje.

Letizia, la Reina moderna. Así la bautizaron por primera vez los franceses tras su visita a París, junto a Don Felipe, en 2015. Por su parte, los ingleses se rindieron ante su estilo en este breve viaje a Londres y volvieron a realzar su capacidad de poner al día a una institución tan tradicional apostando por «looks» más arriesgados (en el mejor sentido de la palabra). Desde la edición británica de «Vogue» hasta los diarios «The Telegraph», «The Sun» y «The Times» siguieron al detalle cada uno de los atuendos que lució esta semana y el consenso general ha sido más que positivo.

«Sería complicado encontrar una foto de la Reina Letizia en la que no luzca impecablemente acicalada», escribió la editora de belleza de «The Telegraph», Victoria Hall, mientras que la biblia de la moda afirma que, junto a Kate Middleton, nuestra Monarca se ha convertido en una «figura insigne de la moda real en la época moderna».

Para lograrlo, Doña Letizia elegió una combinación de piezas hechas a medida por su modisto de cabecera y otras de firmas más accesibles, como Topshop o Burberry. Además, optó por Carolina Herrera en dos ocasiones: cuando llevó el conjunto de falda y camisa que ya se le conocía, y en la noche del jueves, que lució un elegante vestido azul marino de escote asimétrico. Un total de siete «look» –si se incluye también el blanco de Hugo Boss con el que viajó a Londres– cuyo precio total estimado ronda los 24.500 euros. El monto, desde luego, no incluye las joyas que lució la Reina estos días, sino únicamente su vestuario.

Aunque puede parecer muy elevado, lo cierto es que ha repetido muchas de las piezas en este viaje, desde los zapatos color nude de Prada y algunos de los bolsos, hasta los conjuntos de Carolina Herrera y Boss. Ayer, por ejemplo, hizo alarde de una máxima del estilo accesible: lució un conjunto Topshop que no superaba los 200 euros combinado con un bolso-joya hecho especialmente para ella de alrededor de 1.000. Gran parte de la abultada suma final tiene que ver con los trajes a medida –el rojo de Felipe Varela se estima en 7.000– y el azul de la diseñadora venezolana (de unos 6.000).

Sin duda, el gran acierto de Doña Letizia tiene que ver con combinar modelos apropiados para citas tan formales como el encuentro con Isabel II con otros estilos más contemporáneos. En este viaje, el premio se lo llevó el vino tinto de Burberry que eligió para asistir al discurso de Felipe VI en el Parlamento británico. «Atemporal, sencillo, elegante y con carácter», afirma Ana Capel, estilista de actrices como Silvia Alonso y María León. Lo mismo opina Isabella Behrens, editora de «Vanity Fair» en Nueva York: «Resulta muy moderna la idea de lucir un vestido “trench coat”. Creo que con estas decisiones está modernizando significativamente la moda real y lo que es aceptado en el mundo de los “royals”».

Su estilista, el arma secreta

La artífice de gran parte de este cambio hacia una elegancia más actual es Eva Fernández, su estilista, con la que Doña Letizia forma un dúo imbatible desde 2015. El detalle del bolso de ayer, por ejemplo, fue idea suya.«Fernández nos trajo el de rafia y nos dijo: “Confío en vosotras”. Lo intervenimos con los materiales que utilizamos para nuestras joyas y tocados», explican desde Suma Cruz, la firma de Susana Cruz, diseñadora amiga de Fernández.

Otros ejemplos de cómo la Reina ha arriesgado en este viaje, seguramente gracias a la influencia de su estilista, son los escotes del Varela rojo que lució en Buckingham Palace y el azul de Carolina Herrera, que favorecía su figura. «El corte Bardot y el asimétrico parecen ser de sus preferidos. Con ellos da en el clavo porque muestra suficiente piel para que no sea aburrido, pero sin perder elegancia», afirma Behrens. El contraste entre los pendientes de diamantes y zafiros que estrenó el jueves y la diadema de Flor de Lis son otros ejemplos de cómo dar un toque contemporáneo a la etiqueta que exigía la ocasión.

El «look» menos alabado fue el Varela amarillo con que se estrenó en la capital británica. Muchos en la Prensa local consideraron aburrido que intentara emular el estilo inglés –el conjunto recordaba a uno que llevó Middleton hace años en Ascot–, pero Gabriela Ramos, periodista de moda de «The New York Times», cree que con él «rindió homenaje a los gustos coloridos de la monarquía inglesa. Es un ejemplo perfecto de cómo complacer su arraigo español y a la vez honrar al país que visita». Ramos se refiere a que aunque el estilo era marcadamente inglés, el vestido y el abrigo los firmaba Varela y el tocado, otra marca española, María Nieto.

En definitiva, el viaje a Londres dejó claro que Doña Letizia ha sabido combinar tradición y modernidad, así como hacer guiños apropiados al país que la recibía sin dejar de promocionar el suyo. Nos deja, además, con un atisbo de una nueva tendencia: el azul marino.


La conquista de Londres en seis «looks»

Poco afortunado

No tenemos todavía claro si fue un homenaje a la bandera española (al combinarlo después con el burdeos de la tarde y el rojo de la noche) o un guiño a su anfitriona, ya que al parecer el amarillo es uno de sus colores favoritos. Colores aparte, con el paso de los días ha pasado a ser quizá el «look» para olvidar de su visita a Reino Unido: la diferencia de largura del abrigo y el vestido no ayudaron a convertir este modelo en eterno. Lo lució con unos pendientes de perlas de Doña Sofía.

El detalle: Tocado, obra de la firma María Nieto, el sombrero con flores ladeado fue lo mejor del look. Doña Letizia se llegó a ver con Philip Treacy, pero ganó la marca España.

El guiño británico

La Reina es toda una fanática de los vestidos-gabardina, muy en tendencia esta temporada, y si en Roma hay que hacer como los romanos, en Londres apostó por una marca tan «british» como Burberry. Quizá demasiado contemporáneo para el acto (el discurso del Rey Felipe VI ante el Parlamento británico), fue una apuesta muy celebrada y todo un mensaje para sus anfitriones. Optó por combinarlo con unos espectaculares pendientes de diamantes y rubíes que realzaban su rostro, despejado gracias al moño.

El detalle. Burberry. Doña Letizia ha decidido llenar de guiños y mensajes sus apariciones en el Reino Unido. En la primera tarde de su visita oficial optó por la firma Burberry, toda una declaración de intenciones.

El rojo varela

Por la noche llegó el que pensábamos que iba a ser el momento más esperado de la visita: la cena de gala en Buckingham Palace. Volvió a confiar en Felipe Varela, que le diseñó para la ocasión un elegante vestido en rojo bordado con cristales que marcaba la cintura y dejaba al aire los hombros. En los últimos meses hemos visto a Doña Leticia varias veces con este escote Bardot que ella se ha encargado de popularizar y que ahora mismo es una de las tendencias clave del verano. Completó el «look» con una de las espectaculares pulseras de Cartier que posee herencia de la Reina Sofía.

El detalle. Una joya. No es la primera vez que la luce, pero esta era la ocasión perfecta para ponerse la pieza más importante de su joyero: la diadema de la Flor de Lis, símbolo de la monarquía.

De Carolina Herrera

Por la mañana recurrió a un clásico con el que sabía que no iba a fallar (y no lo hizo). El conjunto de blusa masculina y falda de flores de inspiración «New Look» ya es básico de su armario y, sin lugar a dudas, uno de sus mejores conjuntos. Ha recurrido a este diseño de Carolina Herrera varias veces y sigue reportándole muy buenas críticas: pocas veces la hemos visto tan guapa en un acto de mañana. Además, volvió a demostrar que es la reina del reciclaje de prendas. Puro ADN de Su Majestad.

El detalle. Comodidad. Dos son sus siluetas favoritas: las que marcan la figura y el “new look”, que le da un aire elegante y “lady like”, con el que se siente muy cómoda.

Conjunto de impacto

Y si pensábamos que lo mejor ya había pasado... ¡No! En la cena con la City, Doña Letizia demostró que todavía tenía mucho que dar que hablar en lo que a moda se refiere. Escogió un impecable vestido en azul tinta con un hombro caído que firmaba Carolina Herrera. Fue, sin lugar a dudas, su mejor «look» de toda la visita de Estado. Lo remató con la diadema de flores, otra de las estrellas de su joyero y una de las piezas que más le gustan a la Reina (y que más se pone) y, esta vez sí, las dos pulseras de Cartier.

El detalle. Pendientes. Aunque para muchos resultaron ser demasiado grandes, Doña Letizia deslumbró con unos pendientes que nunca le habíamos visto en rubíes y diamantes.

Apropiado y elegante

Para su último día volvió a recurrir a la silueta «New Look» con un conjunto de top, falda y zapatos. Estos últimos los conocíamos, ya que son un modelo de Lodi, una de las marcas que más le gusta llevar. El conjunto resultó apropiado y elegante, con un punto «sport» que en esta ocasión fue todo un acierto. Podemos afirmar que se despidió por todo lo alto asegurándose más que un aprobado: Su Majestad ha dejado el pabellón muy alto y así lo confirman los periódicos británicos, que han caído rendidos ante ella.

El detalle. Otro guiño. La Reina se caracteriza por vestir todo tipo de prendas. Esta vez en un guiño más a Reino Unido, optó por una falda de Topshop, estrella de la moda británica accesible.