Empleo

Andalucía no bajará del millón de parados en un año

BBVA sólo augura la creación de 200.000 empleos hasta 2016

La región cuenta con 1.260.500 parados, según la última Encuesta de Población Activa (EPA)
La región cuenta con 1.260.500 parados, según la última Encuesta de Población Activa (EPA)larazon

Aunque los síntomas de la recuperación son cada vez más evidentes, el paro sigue siendo el principal lastre de la economía andaluza. Tanto que la región no bajará del millón de desempleados a finales de 2016, según las estimaciones que se recogen en el informe «Situación Andalucía» de BBVA Research. Según la última Encuesta de Población Activa (EPA), la región cuenta con 1.260.500 parados. BBVA cree que se crearán hasta el próximo año 200.000 nuevos empleos, por lo que la economía andaluza todavía tendría que crear 195.000 puestos de trabajo para alcanzar el nivel obtenido en 2008. No obstante, según las estimaciones de la entidad, la tasa de paro bajaría hasta el 27,2 por ciento.

Son algunas de las conclusiones que se extraen de un informe que pone el acento en los retos que debe superar la comunidad para «converger con la renta media del resto de las regiones españolas». El principal de ellos, según el documento, es la reducción de la «inaceptablemente elevada» tasa de paro del 31 por ciento, por lo que propone una reforma del sistema de contratación que, de adoptarse, «permitiría una disminución en las tasas de temporalidad y desempleo, además de un incremento en la productividad y los salarios». «Además, Andalucía debe realizar un esfuerzo por aumentar su productividad, siendo necesarios avances en un adecuado marco institucional, un incremento de la competencia y una mejora del capital humano», señala.

Pero también hay datos que invitan al optimismo. La economía regional aumentará hasta el 3 por ciento en 2015 en una tendencia de «consolidación» que «se confirma» y que mantiene el crecimiento del PIB para 2016 en el 2,7 por ciento. No obstante, el informe recomienda al Gobierno andaluz que mantenga «la confianza sobre sus cuentas públicas» y acometa «reformas» que «sigan impulsando» la creación de empleo, la mejora de la productividad y la formación del capital humano para hacer frente a un eventual «compromiso» de este «escenario de crecimiento» por una serie de riesgos externos e internos que podrían generar tensiones.

Estos buenos augurios derivan de la «mejora de la confianza», la «reducción en el coste de financiación de las empresas y de las familias», una política fiscal «más expansiva», así como la «evolución de las ventas minoristas y las importaciones de bienes de consumo».

Detrás de este comportamiento favorable está, asimismo, los buenos registros del sector turístico, aunque no las exportaciones, que han «decrecido» en Andalucía «mostrando síntomas preocupantes de agotamiento».