Cañamero «se piensa» si sustituir al encarcelado Bódalo como cabeza de cartel en la lista de Podemos por Jaén

«Utopía y Dignidad», la lista «exclusivamente andaluza que quedó en segundo lugar en las primarias estatales de Podemos, sólo por detrás del equipo de Pablo Iglesias», ha pedido al histórico ex portavoz nacional del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT), Diego Cañamero, que sustituya a Andrés Bódalo como «número uno» en la lista de Jaén, de cara a las próximas elecciones generales previstas el 27 de junio. Así lo desveló ayer la CUT-BAI a través de un comunicado en el que recordó que «los resultados de las primarias permitieron a ‘Utopía y Dignidad’ encabezar Jaén y tener los segundos puestos» en la propia Jaén, Almería, Córdoba, y Huelva; y «los terceros» en Almería, Cádiz, Málaga, Córdoba y Granada. El ex líder del SAT fue entonces el más votado, pero no ocupó ninguna de esas plazas, aunque sí hizo campaña por la formación morada, junto a su máxima dirigente en Andalucía, Teresa Rodríguez.

Cañamero, quien desde hace casi dos meses vive en el «Campamento Libertad» armado en el municipio jiennense de Jódar desde el que reclama la puesta en libertad de Bódalo –en prisión desde el 30 de marzo tras ser condenado por agredir a un teniente de alcalde socialista–, aseguró ayer a LA RAZÓN que «se lo pensará», aunque siempre ha creído que «no se pueden colgar todos los trajes en la misma percha» y no sabe si «encajaría» en el Congreso. Con todo, no lo descarta, movido «por la ilusión de los compañeros». De momento, su «prioridad», en «lo que tiene la cabeza» es en que «Andrés salga de la cárcel». Con ese fin, el SAT ha organizado en Jódar «un 1 de mayo muy especial para reivindicar su libertad» y días después, a las 10:00 horas del 4, emprenderán desde esa localidad una marcha hacia Madrid. «Queremos entrar en la puerta del Sol el 15», explica. Él mismo está en busca y captura por tener que responder ante un juzgado que investiga el supuesto robo de material escolar en un supermercado de Dos Hermanas (Sevilla) en 2013, unos hechos que para el SAT no fueron un delito sino una «protesta». «No estoy huyendo de la Justicia, pero no voy a ir voluntariamente porque me he declarado insumiso judicial», resume.