Administración Pública

De la Calle vende las «mejoras» a los monitores

Se limita a cumplir lo reclamado por el Tribunal de Recursos: ajustar el salario al convenio pero por día de trabajo y si un menor falta, no se paga.

La consejera de Educación, Adelaida de la Calle, ayer en el Parlamento.
La consejera de Educación, Adelaida de la Calle, ayer en el Parlamento.larazon

Se limita a cumplir lo reclamado por el Tribunal de Recursos: ajustar el salario al convenio pero por día de trabajo y si un menor falta, no se paga.

La consejera de Educación, Adelaida de la Calle, vendió ayer las «mejoras» al personal del servicio de apoyo y asistencia escolar al alumnado con necesidades educativas de apoyo específico en los centros públicos. En una peculiar alocución que causó «vergüenza» entre los portavoces de un colectivo de monitores que componen más de 900 personas en toda la comunidad, indicó que se trabaja con representantes de los trabajadores en mejorar sus condiciones. Todo un cúmulo de incongruencias entre las que destacó cuestiones como la subrogación del personal, el cumplimiento del convenio (¿?) y la creación de comisiones de seguimiento para «vigilar» a las empresas contratadas, sociedades que vienen siendo denunciadas por los trabajadores año tras año sin que el Gobierno andaluz ajuste los pliegos de contratación para dignificar un trabajo imprescindible como la integración escolar de los menores más vulnerables.

De la Calle respondió con estos argumentos a una pregunta parlamentaria de la diputada popular Patricia del Pozo, tras conocerse que la Agencia Pública Andaluza de Educación había visto «tumbada» la licitación del servicio en Sevilla, Málaga, Córdoba y Granada por presupuestar por debajo del precio de mercado el servicio. La consejera, y en esto sí que se ajustó a la realidad, indicó que «la nueva licitación se hace acorde a lo obligado por el Tribunal Administrativo de Recursos Contractuales», que no es otra cosa que ajustar los sueldos de los trabajadores a lo que dicta el convenio colectivo del sector. «Hemos hecho caso a lo que ha dicho el Tribunal, estemos de acuerdo o no», añadió De la Calle. Y es cierto, pero con matices. En la licitación de Sevilla, por ejemplo, se emitía ayer una corrección para incluir en los pliegos un documento sobre las condiciones de los contratos de los trabajadores reflejando el puesto, el tipo de contrato, las horas semanales, la antigüedad y el salario bruto anual, aunque con algunas precisiones. La Junta presupuesta el servicio por día del calendario escolar trabajado, con un máximo de 178 jornadas, en la mayoría de casos reducida, y en los propios pliegos indica que el cobro por el adjudicatario «será en función de los días lectivos de prestación y siempre que asista el alumno receptor del apoyo». Toda una autopista al empresario para que ningunee al monitor. Además, ninguno de los salarios anuales de las categorías se ajusta al precio unitario hora/monitor prefijado de 14,50 horas en las bases de la licitación, que incluyen 170 monitores, 12 más que hace un año. Con todas estas incongruencias, es lógico pensar, como Patricia del Pozo respondió a la consejera, que el Tribunal «volverá a tumbar» el procedimiento.