Parlamento Regional

El PSOE de Díaz pasa del barro a buscar un acercamiento “discreto” a Podemos

Han existido contactos telefónicos entre ambos partidos desde enero e incluso se celebró una reunión, «a petición de los socialistas», a la que asistieron Teresa Rodríguez y Juan Cornejo

El PSOE de Díaz pasa del barro a buscar un acercamiento “discreto” a Podemos
El PSOE de Díaz pasa del barro a buscar un acercamiento “discreto” a Podemoslarazon

Han existido contactos telefónicos entre ambos partidos desde enero e incluso se celebró una reunión, «a petición de los socialistas», a la que asistieron Teresa Rodríguez y Juan Cornejo

Buscar cierto acercamiento era la consigna. Moverse detrás de la escena para recolocarse en ella, pero no todo paso es certero. Uno de los elementos singulares de esta X legislatura son los «cara a cara» parlamentarios, algunos de alto voltaje a cuenta de la corrupción, protagonizados por la presidenta del Gobierno andaluz y secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, y la coordinadora general de Podemos en la comunidad, Teresa Rodríguez. La primera, quien ha presumido en múltiples ocasiones de haber contenido el avance electoral de la formación morada en la región gracias a su decisión de adelantar los comicios autonómicos de 2015, llegó a equipararla con el presidente de EE UU, Donald Trump, al aseverar que quizás bebieran de «la misma fuente». Imputó a Podemos el ser «tortolitos» del PP y criticó, entre otras muchas cuestiones, las «tácticas oscuras» de su líder nacional, el mediático Pablo Iglesias.

Rodríguez, por su parte, llegó a lanzarle en la Cámara andaluza a la máxima dirigente del Ejecutivo regional que «el cortijo apestaba», para reprocharle luego que los socialistas se negaran por sistema a tramitar las leyes que presentaba su partido, a lo que Díaz le afeó que recurriera al «fango» para defender una posición. Episodios como ése ha habido unos cuantos. Pero del barro se ha transitado a un intento «discreto» de acercar posturas. Según ha podido saber LA RAZÓN, desde enero ha habido contactos telefónicos entre ambos partidos que cristalizaron en una reunión, concertada «a petición del PSOE», a la que asistió la propia Rodríguez y el secretario de Organización de los socialistas andaluces, Juan Cornejo, hombre de confianza de Díaz.

Del encuentro, que se produjo hace unos dos meses, se puede hacer una lectura interna en el caso del promotor, el PSOE, que anda inmerso en la búsqueda de una nueva era. Entonces ya se especulaba con la posibilidad de que la presidenta de la Junta fuera una de las candidatas en la carrera por liderar el partido y que tendría enfrente en unas primarias a quien se le ha acusado de querer «podemizar» a la formación, al ex secretario general estatal Pedro Sánchez.

Después del tanteo para despresionar, lo cierto es que «podemitas» y socialistas se han alineado en algunos asuntos en el Parlamento. Votaron en contra, junto a IULV-CA, de una proposición no de ley (PNL) del PP-A encaminada a que el Ejecutivo autonómico, en virtud de sus competencias fiscales, bonificara de forma progresiva hasta 2019 el impuesto de sucesiones y donaciones. Las mismas tres formaciones que posibilitaron días más tarde que se aprobara, con la abstención de PP y Ciudadanos (Cs), la Ley de Memoria Democrática, cuyo texto incluye la creación de un órgano que elaborará un informe sobre la Guerra Civil y los crímenes del franquismo, o el establecimiento de un régimen jurídico para reconocer a las víctimas. Pero hasta ahí ha llegado la suavización de relaciones. En el plenario siguen saltando chispas entre Díaz y Rodríguez y esta última advirtió a la primera el pasado jueves desde los pasillos del ex hospital de las Cinco Llagas, ahora sede de la Cámara, que si espera que Podemos le «guarde las espaldas si decirse irse» a Madrid y busca el respaldo de la formación morada «en una investidura para su sucesión», se equivocará porque no los encontrará. De hecho, apuestan por las urnas. «Si Susana Díaz no ha cumplido con Andalucía –argumentó Rodríguez–, nosotros en ningún caso tenemos motivos para cumplir ni con el PSOE ni, particularmente», con Díaz. Hay sentencias de las que es difícil volver. En cualquier caso, desde el otro lado, la secretaria general de los socialistas había avisado con anterioridad a los suyos en el acto partidario retardado de festejo del 28F que Podemos no pretendía «asaltar cielos» sino a ellos.