La Junta descarta reducir el IRPF el año que viene como pretende C’s

La formación naranja quiere bajar el impuesto 0,5 puntos más, pero el Ejecutivo pospone la medida a lo largo de la legislatura

La incógnita sobre la formación del nuevo Gobierno central o la hipotética convocatoria de nuevas elecciones en diciembre afecta a todas las instituciones del Estado. En el caso de la Junta de Andalucía, la principal repercusión se produce en la elaboración de las cuentas públicas para 2017. Ante la situación de incertidumbre, el Ministerio de Hacienda no entrega los datos sobre las entregas a cuenta para que las autonomías elaboren sus presupuestos, lo que retrasa todo el proceso. En el caso de Andalucía, se suma un segundo problema. El PSOE no tiene mayoría absoluta y tendrá que negociar con el resto de formaciones políticas, teniendo como socio preferente a Ciudadanos para su aprobación, como ya hiciera para la investidura de Susana Díaz y para el Presupuesto del presente ejercicio. Sin embargo, todo indica que en esta ocasión no será tan sencillo.

El portavoz de Ciudadanos (C’s) en Andalucía, Juan Marín, ya anticipó a principios de mes que su formación va a «apretar» al PSOE andaluz durante las negociaciones para lograr una bajada de 0,5 puntos en el tramo autonómico del IRPF en el presupuesto de 2017. El partido naranja quiere conseguir los 3,5 puntos de reducción acordados para la legislatura, de los que dos de ellos ya aplicados en 2016. La reducción de impuestos es una de las banderas de Ciudadanos y quiere abanderar esa conquista. Ya entonces, el vicepresidente de la Junta, Manuel Jiménez Barrios, enfrió esa opción al considerar que el Ejecutivo ya ha realizado un esfuerzo con la bajada del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas y el de Sucesiones y Donaciones. La consejera de Hacienda y Administración Pública, María Jesús Montero, ha ido un paso más allá y ha sido categórica: no se tocará el impuesto.

Montero, en una entrevista a Ep, apuntó ayer que el compromiso con C’s «sigue hasta final de legislatura, por lo que todavía tendremos que abordar nuevas rebajas en IRPF pero será otro año, una vez que se consolide la rebaja del año pasado más la rebaja del impuesto de sucesiones que será en 2017».

La advertencia está acompañada también de un mensaje: «Nosotros no regateamos y tendremos un presupuesto suficiente contando con la mejora de la actividad económica, pero no nos guardamos ninguna carta y en materia fiscal hay que ser extraordinariamente transparente porque la fiscalidad es el instrumento que tenemos para equilibrar nuestras cuentas públicas y financiar servicios fundamentales».

Las cuentas autonómicas de 2017 tendrán que hacer frente a la bajada del impuesto de sucesiones que supone 125 millones de euros menos. Este descenso se espera compensar con una previsión de mejora de la recaudación derivado de la mejor situación económica.

Igualmente, también contemplará la recuperación de las 35 horas, compromiso firmado con organizaciones sindicales y que suponen un gasto de 75 millones de euros.

En cualquier caso, el escenario final dependerá de lo que ocurra en las negociaciones para la conformación del nuevo Gobierno y en si hay o no prórroga presupuestaria. De momento, desde la Junta «no se contempla» esta opción: «No vamos a estar pendientes de lo que haga Madrid, estamos trabajando ya, aunque nos hace falta conocer la cifra de las entregas a cuenta», aseguró la consejera de Hacienda.