Junta de Andalucía

La Junta gastó más de 42 millones entre 2003 y 2011 sin un registro de pacientes

Hasta 2012 no existen datos de los menores atendidos y aún hoy no se controla el número de sesiones ni de las sesiones impartidas

Más de 17.000 menores fueron atendidos en Andalucía por la Atención Temprana en 2014, según datos oficiales
Más de 17.000 menores fueron atendidos en Andalucía por la Atención Temprana en 2014, según datos oficialeslarazon

El servicio público, y en teoría gratuito, de Atención Temprana ofrecido por la Junta de Andalucía a los menores de cero a seis años con trastornos del desarrollo o riesgo de padecerlos fue asumido por la Consejería de Salud en 2003. Hasta entonces la Administración lo gestionaba a través del Instituto Andaluz de Servicios Sociales. Desde esa fecha y hasta el año 2011 incluido –nueve años en total–, el Gobierno andaluz ha invertido más de 42 millones de euros, entre convenios y subvenciones a ayuntamientos, ayudas a entidades y conciertos con entidades privadas. Pues bien, el consejero de Salud, Aquilino Alonso, admite que del trabajo realizado en casi una década no existe registro alguno. No se conoce el número de personas asistidas, ni de las edades de los niños atendidos ni de las UMAT (Unidad de Medida de Atención Temprana) impartidas.

Así lo refleja el consejero en una respuesta parlamentaria formulada por Inmaculada Nieto (Izquierda Unida) a la que ha tenido acceso LA RAZÓN. Sólo a partir de la implantación en 2012 del sistema de información Alborada existen datos de seguimiento de los menores, aunque aún hoy, más de trece años después, la Junta no es capaz de ofrecer información sobre las sesiones recibidas por paciente. Para Antonio Guerrero, portavoz de la Plataforma por la Atención Temprana, no es más que la constatación de que los menores andaluces con trastornos necesitan otro modelo de gestión que a su juicio pasa por la aprobación de una ley cuyo proyecto ha de debatirse en breve en el Parlamento. «No saben ni a cuántos niños atienden, ni cuántas sesiones dan», se lamenta.

El desglose anual permite conocer cómo ha ido evolucionando el presupuesto destinado a estos menores. Así, en 2003 la cantidad era de apenas 1,2 millones de euros, siendo en 2007 cuando recibe un impulso significativo hasta los 4,5 millones; y en 2008 se eleva a las 7,4 millones, cifra en la que se mantiene hasta 2011, cuando sube de nuevo a 9,6 millones. En total, 42,6 millones de euros en nueve años.

Ya en 2012, gracias al sistema Alborada, se puede conocer el número de menores atendidos, 15.364, y el desglose por edades de cero a seis años (849, 1.579, 2.146, 2.803, 3.313, 3.021 y 1.613, respectivamente). El presupuesto anual ascendía a 10.680.457 euros. En 2013 creció levemente a 10,2 millones, pero la cifra de niños atendidos se eleva a 17.179. En 2014 comienzas los problemas con los pagos a los centros de atención temprana, cuyas subvenciones se resuelven con atrasos. Las cifras presupuestadas son similares, pero el número de menores atendidos sigue creciendo. El último dato se sitúa en 17.494 menores atendidos. En 2015, el presupuesto fue de 12,3 millones. «En los últimos 4 años el ratio por niño se ha reducido en un 25%, pasando de 683 €euros al año en 2012 a 509 €euros al año en 2015. El coste real está en torno a 3.975 €euros al año, ¿quién paga la diferencia? ¿O es que se quedan desatendidos», se pregunta Guerrero. La realidad es que las familias que pueden costear los tratamientos pagan hasta 400 euros mensuales, cuando la Junta apenas llega a una media de 60 euros. La Fiscalía del Menor tiene la palabra.