Andalucía

La Junta pedirá explicaciones a Interior y Fiscalía por una frase del líder del PP

Moreno sostuvo que Anticorrupción está «prácticamente instalada» tras la gestión del Gobierno

La presidenta de la Junta, Susana Díaz, en el Pleno de ayer respondiendo a las preguntas de la oposición
La presidenta de la Junta, Susana Díaz, en el Pleno de ayer respondiendo a las preguntas de la oposiciónlarazon

No es la primera vez que en el Parlamento andaluz alguien dispara y permanece el humo ardiente y sacudido, pero ayer la fumarada se mantuvo, tal vez por la atmósfera de la plural décima legislatura. Durante su intervención en la sesión de control al Ejecutivo del Pleno de la Cámara el líder del PP autonómico, Juanma Moreno, pidió a la presidenta de la Junta, la socialista Susana Díaz, explicaciones sobre las ayudas soportadas por fondos Jeremie, que «sí se han concedido en los años 2015 y 2014 –Díaz lo negó en Onda Cero– y con la advertencia de irregularidades por parte de la Cámara de Cuentas», sostuvo. Moreno fue más allá y preguntó a la presidenta en el plenario: «¿Sabe usted que está investigando ahora mismo la Fiscalía Anticorrupción», y añadió: «Una Fiscalía que está prácticamente instalada en Andalucía detrás de la gestión del Gobierno socialista». Palabras que provocaron una cascada de reacciones en cadena.

Primero Díaz en su turno de réplica expresó su preocupación porque el presidente de los populares andaluces, «voluntaria o involuntariamente», hubiera dicho que Anticorrupción «está centrada en Andalucía». «Espero que haya sido un error y lo explique, usted o el ministro de Justicia», espetó a Moreno, dado que, a su juicio, resulta «grave» que se confundan las distintas instituciones del Estado y la separación de poderes y mucho más significativo que alguien insinúe que «se están utilizando las instituciones generales del Estado».

Más tarde, el portavoz parlamentario del PSOE-A, Mario Jiménez, recogió rápido el guante y arrancó su intervención pidiendo al presidente de la Cámara, el también socialista Juan Pablo Durán, que constara en acta «literalmente» lo dicho por Moreno, al ser «muy grave», aseveró en consonancia con lo expresado por su jefa de bancada. Y por último, tras acabar las preguntas parlamentarias dirigidas a la presidenta del Ejecutivo andaluz, el vicepresidente y consejero de la Presidencia y Administración Local, Manuel Jiménez Barrios, anunció que el Gobierno de Díaz remitirá un escrito al fiscal general del Estado y al Ministerio de Justicia para que aclaren si la Fiscalía Anticorrupción está o no «instalada» en la comunidad, tal y como mantuvo Moreno. Según transmitió a los periodistas a las puertas del Salón de Plenos, el Gobierno regional «no quiere pensar» que el máximo dirigente del PP tenga «información oculta, que le es trasladada y que puede servirle para fines no acordes con la transparencia, la democracia y la decencia». Para fuentes parlamentarias, la correlación de hechos, «da la medida del estado de nerviosismo que se vive en la Cámara estos días entre el Ejecutivo andaluz y la mayoría de la oposición». Al margen del papel que la Fiscalía juega en la comunidad, Moreno había instado a Díaz a, «si realmente no tiene miedo a la Cámara», subirse a la tribuna para justificar «por qué hay tantas irregularidades en Andalucía» y a abrir un diálogo «fluido y leal» con los partidos de la oposición para acometer cuestiones como una reforma económica amplia en la que encajar una bajada «real» de impuestos». Díaz, por su parte, dejó claro que «no le temblará el pulso» nunca ante un caso de corrupción, mientras a Moreno «le tiemblan las piernas».