Los socios PSOE y C’s frenan el debate del «caos» sanitario y la poda en Educación

Votan no a la celebración del Pleno extraodinario que plantearon PP, Podemos e IU y que incluía la protección de Doñana.

Los socios de investidura PSOE-A y Ciudadanos (C’s) decidieron ayer que el debate para abordar lo que la oposición ha calificado de «caos» sanitario veraniego en la comunidad o la situación de los docentes interinos, algunos de ellos inmersos desde hace años en la rueda de la precariedad, no es urgente y puede esperar. Los nueve representantes de ambos partidos en la Diputación Permanente del Parlamento andaluz –órgano de gobierno de la Cámara entre periodos de sesiones ordinarios–, votaron que no a la celebración de sesiones plenarias extraordinarias, frente a los ocho sufragios que sumaban los diputados de los grupos de PP-A, Podemos e IULV-CA, que la habían planteado.

En concreto, los populares pretendían que la Junta informara de las incidencias registradas en el Servicio Andaluz de Salud (SAS) durante los meses de verano por la «falta de personal» y de «servicios» y de las plazas de interinos de cara al inicio del nuevo curso escolar 2016/2017, después de que algunos sindicatos y organizaciones alertaran de que se perderán en torno a un millar. Podemos e IU añadieron luego otro tema a tratar: la actuación del Ejecutivo regional de cara al blindaje del espacio natural protegido de Doñana que comparten las provincias de Huelva y Sevilla frente a los planes de extracción y almacenamiento de gas natural «que se están desarrollando en su entorno».

Tanto el PSOE como C’s justificaron su no al Pleno extraordinario en que no se dan razones de urgencia y en que las iniciativas propuestas por el resto de partidos pueden ser abordadas cuando se retome en septiembre la actividad parlamentaria posestival. El portavoz de los socialistas, Mario Jiménez, desmintió que la plantilla docente vaya a disminuir y defendió la calidad del sistema sanitario público andaluz. A su juicio, la demanda de la oposición forma parte del «ritual» de cada periodo de vacaciones. En la misma línea, la diputada de Ciudadanos Marta Bosquet tildó de petición «tópica y típica» del verano la demanda de la sesión extra, además de ser, en este caso, una «excusa para eclipsar» la convalidación de la reforma sobre el impuesto de sucesiones, que también se produjo ayer. Por su parte, su compañero de Grupo Sergio Romero sostuvo que su formación no ha llegado para «hacer de la política un ‘show’» ni para tirar de la «demagogia», el «paripé» o el «oportunismo». «Preferimos ser útiles a ser sensacionalistas», afirmó. Tras admitir que les «preocupa» la «situación de los interinos que se quedan fuera porque se ha reducido la contratación en función de la experiencia», matizó que su formación ya ha hecho al respecto lo que cree que debe hacer: solicitar «la comparecencia de los consejeros de Salud –Aquilino Alonso– y de Educación –Adelaila de la Calle– para que se expliquen» en el «Pleno ordinario del 7 de septiembre». Para Esperanza Gómez (Podemos) y Antonio Maíllo (IU) la urgencia se debía a que se trata de problemas cuya solución «no puede esperar» y a recortes «recurrentes». El PP quiso dejar claro a través de un trío de portavoces, Carmen Crespo, Patricia del Pozo y Ana Mestre, que la Cámara debe estar «al servicio de los ciudadanos todos los meses del año».