Caso ERE

Manos Limpias, en el punto de mira de Pedraz y Núñez

La jueza pregunta a la Audiencia Nacional si ha tomado medidas cautelares y de su respuesta dependerá el futuro del sindicato en el caso

María Núñez Bolaños, junto al magistrado Álvaro Martín, en los juzgados sevillanos
María Núñez Bolaños, junto al magistrado Álvaro Martín, en los juzgados sevillanoslarazon

Una readmisión pero con matices. Eso es lo que ha hecho la titular del juzgado de Instrucción número 6 de Sevilla, María Núñez Bolaños, quien capitanea entre otras «macrocausas» la de los Expedientes de Regulación de Empleo (ERE) irregulares. De un lado, ha vuelto a dar por personada en la misma al sindicato Manos Limpias, después de la renuncia del abogado y del procurador que lo representaban desde casi el inicio del proceso en 2011 y de la correspondiente designación de una nueva procuradora y de un letrado sustituto. De otro, ha realizado una consulta a la Audiencia Nacional respecto a si se ha adoptado alguna «medida cautelar» en relación al propio sindicato o a su actividad, dada su implicación en la denominada operación «Nelson» que concluyó con la detención de su máximo dirigente, Miguel Bernad, y del presidente de Ausbanc, Luis Pineda, entre otros señalados por supuestas prácticas de extorsión a entidades financieras y a empresarios.

En una providencia dictada el 6 de mayo y consultada por LA RAZÓN, la jueza solicita al juzgado central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, que dirige Santiago Pedraz, que le envíe testimonio de las «resoluciones o particulares» de las diligencias de investigación que estén relacionadas con la «posible comisión de ilícito penal» por parte de Manos Limpias «en el ejercicio de la acción de acusación popular» en la causa de los ERE fraudulentos. Una de las personas implicadas en ese proceso lo vincula con el que instruye el juzgado sevillano. Se trata del presidente de Unicaja, Braulio Medel, quien presuntamente y según consta en el sumario, habría abonado un millón de euros, a través de Ausbanc, a cambio de que la entidad sindical pidiera el archivo de la causa contra él, que efectivamente plantearon, pese a haber reclamado una fianza millonaria. La entidad financiera ha reconocido que durante dos décadas contrató inserciones publicitarias en medios de Ausbanc pero ha negado haber efectuado pagos encaminados a obtener beneficios judiciales para Medel.

Fuentes del «caso ERE» apuntaron ayer a este periódico que el movimiento de Núñez Bolaños podría suponer «abrir la puerta» a la suspensión o incluso a la expulsión de Manos Limpias del procedimiento. Pero esa tesis no es unánime entre todos los sondeados por este diario. Otras fuentes sostuvieron que, «salvo que la Audiencia Nacional haya dictado medidas cautelares concretas, la personalidad jurídica del sindicato sigue intacta» y con ella «su capacidad jurídica de cumplir sus fines». Y añadieron que, pese al mediático escenario en el que se ha visto envuelta, la organización sindical que representaba Bernad «goza de la misma presunción de inocencia que cualquier persona física o jurídica del país». A juicio de estas últimas fuentes, el requerimiento que ha hecho la magistrada «es impecable» y de la respuesta «concreta» que le llegue de retorno «dependerá el mantenimiento de dicha acusación» en la «macrocausa».

Del lado de Unicaja, recordaron que la propia defensa de su presidente pidió al sevillano juzgado de Instrucción número 6 que «no se diera trámite» al escrito que sí se presentó en el que Manos Limpias reclamaba el archivo de la causa en lo referente a Medel, después de que éste declarara en sede judicial. Ahora se encuentra, como otros, en el punto de mira del magistrado Pedraz.