Andalucía

«No estamos libres, pero España y Andalucía son destinos seguros»

Entrevista a Javier Fernández, consejero de Turismo y Deporte

El consejero de Turismo y Deporte, durante el encuentro con LA RAZÓN
El consejero de Turismo y Deporte, durante el encuentro con LA RAZÓNlarazon

«En Andalucía sí caben más campos de golf». El consejero de Turismo y Deporte trabaja en la modificación del decreto de los campos de golf turísticos y marca la línea roja en la «sostenibilidad».

–El puesto de consejero de Turismo es de los más ‘duros’ del Gobierno, ¿no?

–Las circunstancias permiten que no sea de los más desagradables. Ahora mismo estamos recuperando los niveles que teníamos antes de la crisis económica y el atractivo de Andalucía ha aguantado bien. Gestionar el turismo y el deporte, dentro de las dificultades financieras que tenemos todos, es un trabajo apasionante. La dureza reside en el trabajo invisible, de reuniones con touroperadores y de muchos contactos en silencio que se muestran cuando dan resultados.

–La inestabilidad internacional que no es nueva, con la primavera árabe y el recrudecimiento de la amenaza yihadista, ¿qué efecto puede tener en Andalucía?

–Nosotros estamos ahora recuperando el nivel de turistas que teníamos en 2007, cuando la primavera árabe no había pasado. Estamos recuperando niveles pre crisis y pre primavera árabe. El incremento de visitantes a nuestra comunidad derivados de los problemas de Egipto o Túnez no ha llegado al uno por ciento. Es más la imagen que da Andalucía y España como un destino seguro que el hecho de captar a un turista que tenía pensado ir a otro sitio. Los resorts de Túnez trabajaban en unos márgenes de 14 o 17 euros en pensión completa por persona y día: ése no es nuestro público ni nuestra forma de trabajar. Andalucía no compite en esa liga. Nuestra preocupación reside en que el día que se recuperen esos mercados debemos estar lo suficientemente fuertes para no notarlo.

– España y Andalucía no están libres de esa amenaza terrorista. Teniendo en cuenta que el turismo supone en torno al 13 por ciento del PIB, ¿en qué medida le inquieta esa eventualidad?

– Nos preocupa en toda España y no solo a efectos turísticos. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado son lo suficientemente fuertes para combatir esa amenaza. No estamos libres, pero España y Andalucía dan seguridad.

– También la da París...

– Ha pasado en un momento determinado, pero hay una estructura de seguridad ciudadana. Los terroristas cometen atentados cuando pueden, no cuando quieren. La estructura de lucha contra el terrorismo que hay en Europa permite dar una imagen de seguridad. Incluso cuando ocurrió el atentado de Madrid, la ciudad recuperó su capacidad de acoger turismo.

– Perdió unos Juegos Olímpicos

– Bueno, más bien fue por otro tipo de circunstancias.

– Por hablar de aspectos concretos de su departamento. ¿No existen demasiadas administraciones operando en el sector? ¿Hay demasiados reinos de taifas?

– El esfuerzo de coordinación es mucho. Nuestro plan de acción se hace en colaboración con todos los patronatos provinciales y de las ciudades con competencias en turismo. El ordenamiento del turismo, sobre todo de promoción, si está cerca del territorio es más efectivo. Ese trabajo de coordinación se visualiza en la World Travel Market o en Fitur donde vamos con una oferta única donde todo el mundo tiene su sitio o las posibles cofinanciaciones.

–Hay una paradoja que han puesto de relieve los sindicatos. Ciñiéndonos a los datos de la EPA del tercer trimestre: no hay reflejo directo en la creación de empleo pese a los datos históricos de turistas y ocupación hotelera. ¿Por qué?

– Ese divorcio entre un 6,5 por ciento de incremento de turistas y un 0,1 de creación de empleo según la EPA nos preocupa y no solo a la Administración, también a toda la industria. La calidad en el empleo tiene que existir. El INE sí ha dado esta semana correlación entre el incremento de la ocupación hotelera y el aumento del empleo. Hay otro tipo de datos que distorsionan, bien por la externalización de servicios o por el incremento de horas de trabajo.

– ¿Y la economía sumergida no es un motivo principal?

– No es un factor principal pero sí uno de ellos. Tenemos que luchar contra la economía sumergida porque nos hace daño a todos: a empresarios, sindicatos y administraciones. Y me he encontrado mucha colaboración en el sector.

– ¿Tienen cuantificada la incidencia de las nuevas plataformas de alquiler de alojamientos no regularizados?

– Según quien lo mida. Exceltour habla de un 25 o un 30 por ciento. Los sindicatos hablan de un 15 por ciento. Al ser una economía que no existe es difícil de medir. Tenemos el compromiso de aprobar un decreto en los primeros meses del año para regularizar, con el consenso del sector, esas situaciones para que nadie ofrezca viviendas en alquiler que no estén registradas. El registro, al fin y al cabo, es una garantía.

–Su consejería lleva muchos años invirtiendo en potenciar la imagen única de «Andalucía». ¿Cómo va a afectar a la marca Andalucía el eje Sevilla-Málaga?

– No se trata de un eje excluyente y demuestra que colaborando se puede llegar más lejos. La marca Costa del Sol es lo más potente de sol y playa que podemos tener en España. Pero, ¿y la Alhambra? ¿Y Granada? ¿Y Sevilla? ¿O Doñaña? Andalucía tiene muchos focos atractivos y puede ofrecer para todos, de todo y todo el año. El eje Sevilla-Málaga puede servir de ejemplo de colaboración: todos somos parte de Andalucía.

–Ha hablado de oferta todo el año, un tema recurrente en su Consejería. ¿Qué va a ofrecer para acabar con la estacionalidad?

–Todos los consejeros hemos hablado de ese asunto porque es un problema, sobre todo si nos ceñimos al turismo de sol y playa. Ocurre en Baleares, donde muchos hoteles cierran una serie de meses para compensar la cuenta de resultados. Además del plan contra la estacionalidad que se hizo en el anterior mandato y que estamos desarrollando, vemos que hay fórmulas para hacer atractivos los destinos turísticos fuera de la temporada alta. Y para eso necesitamos la colaboración de los ayuntamientos. Por ejemplo, Benalmádena ha ofrecido reducir la tasa de basura a los hoteles que abran todo el año. Es una buena medida. Y hay otras medidas: el ejemplo más claro es Sierra Nevada. Tiene un programa que mantiene abierto hoteles en verano basado en el deporte de aventura y pruebas deportivas de alto nivel, como los triatlones. Eso queremos exportarlo al resto de lugares de Andalucía, bien a través del deporte o la cultura, como ha hecho Málaga a través de su oferta museística. Eso, y que fórmulas tradicionales funcionen, porque la demora en el Imserso ha hecho mucho daño.

– ¿No cree que falta profesionalización en el sector turístico?

– Tenemos muy buenos profesionales en Andalucía. Hay que seguir ahondando en la actualización de esos profesionales, en el reciclaje y en nuevas líneas a través de la innovación. Ahí tenemos a Andalucía Lab, que debe ser un semillero. Allí se está trabajando en las nuevas formas de comercialización en las redes o viendo necesidades específicas de algunas empresas. Como tú atiendas a la gente como hace 20 años, estás perdido.

– Andalucía Lab lleva funcionado desde 2009 y se inauguró en 2012. ¿No cree que se ha perdido tiempo? Parece que le ha costado arrancar.

– Todos los proyectos de innovación tienen que tener un recorrido de consolidación. La Universidad de Málaga en el campo de excelencia Andalucía Tech ya contemplaba como uno de sus elementos a Andalucía Lab. Yo sí quiero una renovación no tanto en lo que hacen sino en que hagan más cosas, que acoja a emprendedores y no solo a empresas existentes.

– Andalucía es la principal receptora de turismo nacional pero es la cuarta de turismo internacional después de Cataluña, Baleares y Canarias. ¿Qué se puede hacer para llegar al podium?

– Cataluña tiene un turismo internacional muy vinculado a su posición geografíca tan cercana a Francia y a sus instalaciones aeroportuarias. Y tanto Canarias como Baleares es que se basan desde su concepción en el turismo internacional. Nosotros queremos consolidar nuestros mercados: el alemán, británico, portugués y francés, y ahora está creciendo el de los Países Bajos. Y queremos que los touroperadores nos den su opinión a la hora de ejecutar nuestro plan de acción. Hace poco nos hemos reunido con los cuatro responsables de TourEspaña en Alemania para presentarles el borrador de nuestro plan. Queremos buscar nuevos mercados pero siempre centrándonos en el segmento donde podamos tener más éxito.

–¿Y en qué nicho exactamente?

– Vamos a hacer un esfuerzo con Estados Unidos y con recuperar el mercado italiano haciendo hincapié en que pueden visitar una región hermana. También hay un segmento de calidad en Oriente Medio sin olvidar mercados lejanos como China y Japón de donde no puedes desaparecer. Pero anteponiendo el segmento; no puedes vender turismo de sol y playa en Brasil.

–¿Qué está ocurriendo con el turismo ruso? Ha habido una bajada a nivel nacional.

– Andalucía no, pero en cualquier caso es un turismo que ha sufrido mucho la bajada del rublo con respecto al euro. Y el turismo ruso no es popular, sino de clase alta. Ahí nos dirigimos al turismo de lujo, de salud y bienestar.

–¿Qué determinación va a tomar su consejería con los campos de golf? Ya ha anunciado la modificación del decreto

– Sí, vamos a modificar el decreto de los campos de golf de interés turístico pero no pueden ser la excusa para hacer promociones inmobiliarias como ocurrió en su momento. Queremos que el campo de golf vaya unido a la sostenibilidad.

–Pero entonces, ¿caben más campos de golf en Andalucía?

– Creo que sí, pero lo que hay que buscar es que los campos de golf respeten el medio ambiente. Andalucía no va a tener el número de campos de golf de California.

– El proyecto «Guadalquivir turístico» se presentó como la gran apuesta de la Consejería en 2009 para los años siguientes. ¿Tiene pensado retomarlo?

– No. Tenemos ahora mismo otros proyectos que van a desarrollar esas mismas ciudades con otra perspectiva. La decisión no ha sido mía y en anteriores legislaturas ya se decidió dejarlo en «stand by». El programa que tenemos para potenciar las ciudades patrimonio de la humanidad al final es un recorrido por el río. Doñana, Sevilla con la Catedral, Archivo de Indias y el Alcázar; Córdoba; Úbeda y Baeza. Ahora hay una orientación distinta.

– El turismo representa el 13 por ciento del PIB. ¿Hay un plan para alcanzar un porcentaje determinado?

– No hay un plan determinado. Hay que conseguir una diversificación del modelo productivo andaluz y no poner todos los huevos en el mismo cesto.

–De manera más inminente. ¿Qué previsiones manejan para el Puente de diciembre, navidades y, más a medio plazo, Fitur?

– Tenemos muchas esperanzas en este puente. Los periodos de estancia suelen ser menores pero de manera más frecuente. Por tanto, tenemos buenas perspectivas y haremos un esfuerzo de promoción. En lo que respecta a Fitur tenemos que seguir afianzándonos como principal destino turístico nacional y mantener nuestra imagen como «Andalucía única». Y, sobre todo, provocar muchas relaciones comerciales entre los empresarios andaluces y los que ya están en la feria.

–La Junta insiste en el término «industria turística». ¿Hay intención de proyectar una imagen determinada?

– Las palabras nunca suelen ser inocentes. Cuando el sector te dice que son tan importantes como la industria aeronáutica o la agroalimentaria es una forma de darles su sitio. Hay que hablar de industria como generación de riqueza y el turismo la tiene.

–¿Y por qué no han funcionado los fondos reembolsables para pymes turísticas que ofrecía la Junta entre esa «industria turística» en una época de falta de liquidez?

– No eran ayudas sino préstamos y había unas condiciones determinadas lo que hizo que el acceso no fuera tan fácil o tan fluido como se disponía en un principio. Se consiguieron ciertas cosas pero no se llegó a la capacidad que tenía el fondo.

–¿Y no influyó que el sector turístico estaba más acostumbrado a la subvención directa o al convenio con financiación pública?

– Las circunstancias han cambiado y la industria ha aprendido a vivir así. Aquí hay las disponibilidades económicas que tenemos y ellos lo han entendido.

–El aumento presupuestario de su consejería es del 3,7 por ciento, inferior al del 5,6 del Presupuesto global. ¿Tiene margen suficiente?

– No nos preocupa tanto. Nuestra intención es que cada euro que gastemos en turismo y deporte tenga un retorno, esté bien gastado. Ahora mismo las prioridades de Andalucía son la educación, la sanidad, la dependencia y la generación de empleo.

–¿La época de las infraestructuras deportivas sin posibilidad de mantenerlas se ha acabado?

– En eso somos conscientes todas las administraciones. Tenemos que tener las infraestructuras deportivas que podamos mantener. Que la piscina cubierta esté en mi ayuntamiento y no en el del pueblo de al lado eso ya no se da.

–¿Por qué la licencia deportiva única aprobada por el Gobierno es un error?

– Porque las federaciones territoriales deben tener autonomía financiera y eso se lo dan sus propias fichas federativas. Hacer que todo dependa de la Federación Nacional es un error y así lo hemos dicho ante el Tribunal Constitucional.