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Noticias de Reyes

La Razón
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Vacíos los parlamentos en estos días de asueto familiar, los debates se acomodan sin esfuerzo a los manteles familiares, a las plazas y a las barras de bar. La parroquia, en las fechas señaladas, suele ser más concurrida, jaranera, y las horas transcurren menos achacosas. No hay nada como alimentar el horizonte con la expectativa de un anís o de un mazapán. Y, como en demasiadas sesiones parlamentarias, entre el licor y el dulce es cuando se habla de las cosas serias. Está quien maldice la lluvia a estas alturas de sequía, pero no por contrariar las bondades del agua sino por haberle impedido comprar el billete del Niño, que este 2018 sí iba a caerle, como en Sevilla hace 77 años, día del primer sorteo. No ha faltado quien ha referido, por eso de no ser menos y aportar su buen grano de arena al debate semanal, el asunto de las cabalgatas. Los unos, que si la lluvia ha adelantado la salida de las carrozas en varios municipios; los otros, que si el trasiego de personajes variopintos en las paradas. Testigos de la desnaturalización de las fiestas, tanto en su apartado temporal como con el contenido, se preguntan tiros y troyanos cuánto tiempo será necesario para concederle a una fila de penitentes cantar un popurrí chirigotero o a los Reyes Magos coronar la carroza del «Gay Pride» cargados de caramelos. Y, cómo no, está el tema de la salud, presente siempre en estas fechas de contacto humano. Este año tal debate será cuestión principal en Ronda y en Viator, municipios de acuartelamientos de la Legión. A los legionarios, que son varios miles en Andalucía, van a imponerles una dieta equilibrada para reducir un cierto sobrepeso certificado. Las estadísticas de obesidad van a ser este año la leche, pero si Millán-Astray levantara la cabeza...