Sevilla

Ochenta mil demandantes de VPO tendrían derecho a la ayuda al alquiler

La mayoría de los 124.000 inscritos en los registros municipales ingresa menos de 7.500 euros al año y el 75% prefiere arrendar. El Plan de Vivienda 2016-2020 prevé 21.600 subvenciones a inquilinos este año. Entre 2008 y 2012 fueron 23.000, aún sin pagar totalmente

El cierre del crédito y la caída de ingresos hace que muchos andaluces opten por alquilar su vivienda
El cierre del crédito y la caída de ingresos hace que muchos andaluces opten por alquilar su viviendalarazon

La mayoría de los 124.000 inscritos en los registros municipales ingresa menos de 7.500 euros al año y el 75% prefiere arrendar. El Plan de Vivienda 2016-2020 prevé 21.600 subvenciones a inquilinos este año. Entre 2008 y 2012 fueron 23.000, aún sin pagar totalmente

Un 10% de los andaluces vive de alquiler, por debajo de la media española (13,48%), que en Europa roza el 30%. En algunos países como Alemania, la mitad opta por esta opción. A aumentar esos porcentajes ocupando alguna de las más de 630.000 viviendas vacías que hay en nuestra comunidad (18% del total nacional) se dirige el nuevo Plan Autonómico de Vivienda y Rehabilitación 2016-2020, en período de exposición pública desde el 30 de enero, paso previo a su tramitación parlamentaria. O eso asegura al menos el documento elaborado por la Consejería de Fomento y Vivienda, que realizará 265.893 actuaciones en el próximo quinquenio en rehabilitación, transformación de infravivienda, ayudas a autoconstrucción o al alquiler.

Desde 2005, la Junta ha encadenado subvenciones al alquiler para inquilinos. El último año, esta línea se reservó para personas con ingresos limitados y se destinaron 15,8 millones –15 de aportación estatal y 800.000 autonómica–. Para una unidad de convivencia de una sola persona, el límite se fijó en una vez el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples IPREM (7.455,14 euros).

El baremo empleado por la Junta para conocer las necesidades en este sentido son los registros públicos municipales de demandantes de vivienda protegida, gestionados por los ayuntamientos, con más de 124.000 inscritos. Según éstos, el 65% tiene ingresos inferiores a una vez el IPREM, lo que les permitiría acceder a la ayuda de la Junta para personas con ingresos limitados, que finalmente solo llegará a unos 7.500, según los cálculos de Fomento y Vivienda. Con ingresos entre 1 y 2,5 veces el IPREM se encuentra el 29 por ciento de las inscritas. Un dato revelador es que el 74% se inclina por el alquiler frente al 26% que preferiría comprarse una VPO. Más de 81.000 son menores de 35 años, mientras que cerca de 25.000 son mayores de 50.

El desbarajuste burocrático ha sido la tónica en las sucesivas convocatorias de este tipo. Dentro del anterior Plan de Vivienda 2008-2012 se concedieron 23.331 subvenciones para pagar la renta; 21.153 a agencias –multiplicando en ambos casos por cuatro las previsiones iniciales– y 4.590 a dueños de pisos, según consta en la memoria del citado documento. El fomento del alquiler se activó a través de agencias intermediarias –que percibían 600 euros por expediente tramitado–, donde propietarios –6.000 euros– y arrendatarios –240 euros al mes durante dos años– podían beneficiarse de ayudas. Todavía colea por los impagos acumulados: a final de 2014, eran más de 14 millones los que la Consejería debía a estos tres actores.

Los objetivos para el nuevo Plan Autonómico de Vivienda y Rehabilitación 2016-2020 prevén más de 21.600 ayudas a inquilinos solo en este primer año; en todo el período rozaría las 78.000. A partir de 2017 las subvenciones para arrendatarios se rebajarán a 14.000 beneficiarios por ejercicio. Para promotores al alquiler establece 8.333 cada uno de los cinco años que abarca el plan, con un resultado global de 41.665. En cuanto al fomento del alquiler del parque público, las previsiones son de entre 400 y 600 viviendas al año, con un total de 2.100 hasta 2020.

El consejero, Felipe López, aseguraba recientemente que «daremos respuesta a los compromisos adquiridos en anteriores planes, dando prioridad al pago de las ayudas a las cuotas del préstamo a adquirIentes de vivienda protegida» y a dar continuidad a las ayudas autonómicas a los promotores de pisos en régimen de arrendamiento. El Programa de Intermediación al Alquiler (PIMA) es el último instrumento puesto en marcha desde la Consejería para conectar a propietarios, agencias e inquilinos. La página web de la Consejería solo ofrece de momento viviendas en 11 municipios de seis provincias (excepto Málaga y Huelva) y en dos capitales, Almería y Sevilla.