Política

Susana Díaz marca el rumbo electoral

Los socialistas primarán la campaña en Granada, Córdoba y Málaga y confían en que la confluencia entre Podemos e IU sólo afecte en Jaén. «Por encima del PSOE, tenemos que ganar por Andalucía», señala la líder

La secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, flanqueada por Juan Cornejo y Juan Conejo
La secretaria general del PSOE-A, Susana Díaz, flanqueada por Juan Cornejo y Juan Conejolarazon

El PSOE andaluz ya está en modo «elecciones». Posiblemente, nunca ha dejado de estarlo. El Comité Director del partido, máximo órgano entre congresos, supone el punto de no retorno en busca de «la quinta victoria consecutiva» en Andalucía. Del resultado andaluz, dependen las posibilidades de formar Gobierno de Pedro Sánchez y, también, las aspiraciones de la presidenta andaluza. Susana Díaz abrió oficialmente la precampaña resaltando que «por encima del PSOE, tenemos que ganar por Andalucía». La confrontación, una vez más, sirvió de argumentario para la presidenta a la hora de alentar a los suyos en un discurso en el que citó a «Pedro» en tres ocasiones.

«En nuestro ADN está salir a ganar. Es el código genético del PSOE. Ganar para cambiarle la vida a las personas», indicó Díaz, que habló de «una campaña muy difícil», «de cabreo, de descontento» y confió –porque «la gente es sabia»– en que no suba la abstención. «Las campañas de apatía suelen dar mayorías amplias al PP», avisó. Los sondeos con que cuenta ahora el partido señalan una caída del 3% en la participación. En clave andaluza, en el seno del PSOE cuentan con encuestas tan buenas, que las descartan por la posible contaminación. El partido confía en que la suma de Podemos e IU, como mucho, afecte en Jaén, donde la formación morada se quedó a tiro de diputado el 20D. «Algunos sólo están pensando en el ‘sorpasso’, y deberían pensar más en el zarpazo que el PP ha dado a las políticas públicas», señaló el secretario de Organización socialista Juan Cornejo. Se confía también en que no se produzca una suma absoluta de votos porque es algo que históricamente no ha sucedido. Sobre el tablero está también la pérdida de tres diputados por el PP-A. Los socialistas van a echar el resto en las provincias de Granada –donde tienen la Alcaldía a mano–, Córdoba y Málaga. La horquilla socialista estaría entre los 21 y los 25 diputados. La estrategia pasa por potenciar la marca de la presidenta andaluza.

Díaz habló ayer de un «comité inédito» a causa de «la repetición de las elecciones» y que supone «la posibilidad de ganar por quinta vez consecutiva en Andalucía». «Os pido que ganemos como presidenta de Andalucía», aseguró, antes de enumerar los agravios sufridos por la comunidad. El último, «en el Consejo de Ministros del viernes» con «un plan de estabilidad» que supone «recortes en educación y sanidad para los próximos años». Díaz defendió que el PSOE sí «ha sabido gestionar la economía», de un modo «más eficaz» y «más justo para la gente». «En Andalucía no va a haber ni un solo recorte en Educación, Sanidad y Servicios Sociales se ponga Rajoy como se ponga», señaló. Díaz acusó al PP de imponer las medidas «con nocturnidad. Han metido por la puerta de atrás otro plan de estabilidad». En este punto, tiró de un tema recurrente de las campañas: las pensiones. Están «en peligro» ya, no en un futuro. Díaz resaltó que «los datos del paro, igual que los de la EPA, consolidarán» que «Andalucía está en el camino correcto». «Crecemos por encima de la media de España. Todo eso cumpliendo con las personas y el equilibrio presupuestario», aseguró.

Otro caballo de batalla utilizado como agravio es el reparto de la PAC. El PP, señaló, «siempre encuentra fórmulas de cómo castigar al Gobierno de Andalucía». La unidad de España es otro de los puntos recurrentes del discurso de Díaz: «Votar en Andalucía al PSOE es colaborar con que se defienda la unidad del país, la igualdad de oportunidades, garantizar que no se ponga en cuestión el modelo de solidaridad inclusivo, dar una oportunidad a miles de ciudadanos que lo han pasado tremendamente mal estos cuatro años».

La visualización de una suerte de «pinza» entre PP y Podemos, o su identificación, pasa por otro punto clave de la campaña socialista. «Algunos prefieren que hablemos de cuatro meses y no de cuatro años. Por ejemplo, los que representaban la nueva política y han envejecido un siglo en cuatro meses». Susana Díaz señaló que la coincidencia de postura a la hora de negociar de PP y Podemos «les habrá sorprendido a los que no vivieron los 80 días que vivimos nosotros», en referencia al tiempo que tardó en cerrar su investidura. «Estos cuatro meses, Rajoy se ha dedicado a lo que sabe hacer estupendamente: tirarse al palo, fumarse un puro. Con Montoro haciendo de su capa, un sayo», criticó. «Hay confluencia de intereses entre Rajoy y Pablo Iglesias, los dos quieren hablar de cuatro meses, no de cuatro años», censuró.

Finalmente, la presidenta andaluza marcó las líneas rojas para el partido: «Con el PP no podemos ir a ningún sitio. Han hecho muchísimo daño. En Andalucía están tremendamente débiles. Engañar permanentemente no es posible. El PP-A ha engañado demasiado a demasiada gente durante demasiado tiempo. Cuando han tenido oportunidad de gobernar, castigan a Andalucía. Los de aquí no han tenido el valor de levantar la voz, ni en el último Pleno». Díaz recordó que «en confluencia de intereses» está Podemos, que está «recuperando a los que hicieron campaña hace un año para que no gobernara el PSOE», citando a «Sánchez Gordillo o Cañamero». «Pasan de las agresiones físicas (por el detenido Andrés Bódalo) a las de otros tipos: verbales o de bienes privativos. Ése es el Podemos que tenemos», indicó. En este punto, se refirió a las palabras de Sergio Pascual en LA RAZÓN, definiendo al mismo como «el purgado secretario de organización». «Es un matrimonio de conveniencia el de Podemos e IU. Pablo Iglesias es experto en la unión temporal de partidos. No hay amor, hay otra cosa. Hay interés, odio al PSOE, intentar sustituir al PSOE». Susana Díaz, al fin, trata de colocar ante el electorado tanto a PP como a Podemos como partidos «radicales».

Una «buena opción de presente, no de futuro»

El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, aseguró ayer que ve a la presidenta de la Junta, Susana Díaz, como presidenta del Ejecutivo nacional. «Yo la veo buena opción de presente, no de futuro», apostilló al ser preguntado en un desayuno coloquio de la Cadena Ser Andalucía sobre la proyección nacional de la socialista. «Si hay una mujer que pueda ser primera presidenta de España, ésa es Susana Díaz», reiteró. Clavijo subrayó en su conferencia la afinidad que tiene con la máxima dirigente del Gobierno autonómico, a la que considera un «referente de la buena política». Sostuvo que el paso de Díaz a la política nacional lo tendrá que decir ella misma, pero reiteró que «es una realidad» el no verla «como opción de futuro», sino como «opción de presente». El presidente canario fue interrogado también por si tiene problemas de interlocución con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, cuestión que negó.